El Congreso de EE UU da un paso decisivo para aprobar la ayuda a Ucrania tras meses de obst¨¢culos
Los diputados votar¨¢n este s¨¢bado cuatro proyectos de ley, incluida la asistencia a Kiev, despu¨¦s de que los dem¨®cratas se unieran a los republicanos moderados en una moci¨®n
Un paso aparentemente peque?o, una mera formalidad, para la C¨¢mara de Representantes de Estados Unidos, pero un salto gigante para la ayuda a Ucrania en la guerra. Despu¨¦s de meses de retrasos y votos en contra, los congresistas han autorizado votar este s¨¢bado en el pleno ¡ªdonde seguramente quedar¨¢ aprobado¡ª un proyecto de ley que asigna 60.000 millones de d¨®lares (unos 56.000 millones de euros) para la asistencia militar y econ¨®mica al pa¨ªs invadido por Rusia. El paso es resultado de una ins¨®lita alianza entre republicanos moderados y dem¨®cratas para derrotar el bloqueo del grupo de republicanos ultraconservadores, opuestos a ultranza a destinar un solo d¨®lar m¨¢s a Kiev.
En una situaci¨®n muy poco habitual, votaron a favor de la autorizaci¨®n m¨¢s legisladores de la minor¨ªa dem¨®crata, 165, que de la mayor¨ªa republicana proponente de la medida, 151. El resultado final fue de 316 votos a favor por 94 en contra para pronunciarse sobre cuatro proyectos de ley: sobre la ayuda a Ucrania, la ayuda a Israel, asistencia a aliados en Indo-Pac¨ªfico y una cuarta sobre medidas de seguridad nacional estadounidenses, un caj¨®n de sastre que incluye desde la prohibici¨®n a TikTok si su matriz china no pone a la venta la aplicaci¨®n a una autorizaci¨®n para incautar activos rusos.
Una vez que estas cuatro medidas se sometan a votaci¨®n, tienen garantizado salir adelante, al contar con el apoyo de toda la bancada dem¨®crata y la gran mayor¨ªa de los republicanos. Esta alianza ha desencadenado la furia del grupo ultraconservador, que amenaza con desatar un proceso interno para cesar al presidente de la C¨¢mara, su compa?ero de partido Mike Johnson ¡ªel promotor de estos proyectos de ley¡ª por ¡°blando¡±, como ya hicieron en octubre con el predecesor de este, Kevin McCarthy.
Todo en este proceso se ha desarrollado de manera ins¨®lita, desde que en septiembre la Casa Blanca presentara lo que hasta entonces hab¨ªa sido un mero tr¨¢mite en el Congreso: una petici¨®n de fondos extraordinarios, contenida en un proyecto de ley presupuestario, para continuar la ayuda militar y econ¨®mica a Ucrania y permitir a Kiev repeler la invasi¨®n rusa a gran escala lanzada en febrero de 2022. La solicitud se top¨® con la oposici¨®n de los republicanos, esc¨¦pticos sobre la transparencia en la gesti¨®n de los fondos, la duraci¨®n y perspectivas de la guerra y que opinaban que ese dinero deb¨ªa destinarse a otras prioridades dentro de Estados Unidos. A esos reparos se uni¨® poco despu¨¦s la exigencia de que, antes que preocuparse de Ucrania, hab¨ªa que resolver la cuesti¨®n migratoria, dado el aluvi¨®n r¨¦cord de peticiones de asilo en la frontera sur.
Durante meses, la petici¨®n de fondos, incluida ahora en un proyecto de ley sobre seguridad nacional de m¨¢s de 100.000 millones de d¨®lares que inclu¨ªa tambi¨¦n 14.000 millones para Israel, y diversas partidas para Taiw¨¢n y aliados asi¨¢ticos, as¨ª como para reforzar la seguridad en la frontera sur, languideci¨® en los pasillos del Capitolio. Dem¨®cratas y republicanos negociaron durante semanas un complejo acuerdo que combinaba la ayuda a Kiev con una reforma migratoria. La Casa Blanca exhortaba a dar el s¨ª, y recordaba que la mayor parte de esos fondos se invierten en las compa?¨ªas de armamento estadounidenses. Mientras, desde Ucrania llegaban llamamientos cada vez m¨¢s apremiantes, y noticias cada vez peores desde el frente sobre la disponibilidad de armamento y de hacer frente a unas fuerzas rusas envalentonadas.
El torpedo de Trump
Pero cuando los dos partidos cantaban victoria sobre un acuerdo de reforma en enero, el candidato presidencial republicano, Donald Trump, se pronunci¨® en contra con un torpedo verbal de los suyos: la medida era ¡ªseg¨²n ¨¦l¡ª ¡°horrible¡±. En cuesti¨®n de d¨ªas, y en un espectacular golpe de tim¨®n pol¨ªtico, todo su partido opinaba igual. Vuelta a la casilla de salida.
En febrero la medida, sin las provisiones sobre la frontera, y reducida a 95.000 millones de d¨®lares, quedaba aprobada finalmente en el Senado, donde los dem¨®cratas cuentan con mayor¨ªa. En la C¨¢mara, el speaker Mike Johnson, que hab¨ªa reemplazado a McCarthy en octubre con los votos de los ultraconservadores, arrastraba los pies. No hab¨ªa ninguna posibilidad de que el proyecto de ley, tal y como ven¨ªa del Senado, pudiera recibir el s¨ª de su c¨¢mara: en un clima pol¨ªtico muy polarizado y en el que la colaboraci¨®n entre los partidos es casi un tab¨², y con un partido republicano que cuenta su mayor¨ªa sobre los dem¨®cratas con los dedos de una mano, cada voto del ala dura es necesario. Un ala dura que, adem¨¢s, controla el comit¨¦ de reglas, el organismo que debe dar la autorizaci¨®n final para trasladar al pleno cualquier proyecto de ley.
Johnson, en el ala de los republicanos ¡°ucranio-esc¨¦pticos¡±, alegaba que deb¨ªa darse prioridad a votar las leyes presupuestarias de este a?o. Aprobadas estas, argumentaba que deb¨ªa acometerse la renovaci¨®n de FISA, la ley que autoriza medidas de vigilancia para el contraespionaje sin necesidad de autorizaci¨®n judicial y que la C¨¢mara pas¨® a comienzos de este mes.
Pero hace dos semanas, los servicios de inteligencia ofrecieron una serie de sesiones informativas clasificadas a los diputados sobre la situaci¨®n de la guerra en Ucrania. Lo que contaron, seg¨²n han ido apuntando varios legisladores asistentes, era devastador. De no recibir ayuda ya, Kiev bien podr¨ªa perder la guerra m¨¢s pronto que tarde, con graves consecuencias para Estados Unidos.
M¨¢s defensa a¨¦rea para Kiev
La situaci¨®n en Ucrania es peor que complicada. Rusia est¨¢ lanzando misiles y drones contra la infraestructura civil y energ¨¦tica. Las v¨ªctimas civiles han aumentado y hay ciudades, como J¨¢rkov, en el este del pa¨ªs, pr¨¢cticamente a oscuras. Los aliados de la OTAN han prometido este viernes enviar m¨¢s defensa a¨¦rea al pa¨ªs invadido por Rusia, tras los reclamos del presidente Volod¨ªmir Zelenski y las peticiones de la UE y la OTAN, que en los ¨²ltimos d¨ªas han urgido a sus miembros a que revisen sus arsenales. El secretario general de la Alianza Atl¨¢ntica, Jens Stoltenberg, ha asegurado este viernes que los aliados han identificado m¨¢s sistemas de defensa antia¨¦rea Patriot y SAMP/T disponibles. ¡°Espero anuncios en un futuro pr¨®ximo¡±, ha asegurado Stoltenberg tras una reuni¨®n urgente con los ministros de Defensa de los 32 aliados de la OTAN por videoconferencia, en la que ha participado tambi¨¦n Zelenski.
El secretario general de la Alianza ha reiterado que ahora es prioritario enviar material a Ucrania, incluso a costa de no cumplir las cantidades m¨ªnimas establecidas por la OTAN para los arsenales aliados ¡ªalgo que hace tiempo dej¨® de imperar debido a la guerra lanzada por Rusia y al apoyo a Kiev¡ª. Sin embargo, no ha dado detalles de qui¨¦n enviar¨¢ m¨¢s defensa antia¨¦rea y cu¨¢ndo. Los aliados est¨¢n terminando de cerrar sus compromisos, ha dicho, informa Mar¨ªa R. Sahuquillo.
Ucrania ha pedido siete sistemas de defensa Patriot para intentar crear un escudo antimisiles que repela los ataques rusos. Alemania ha anunciado esta semana que enviar¨¢ uno de los que tiene y que se sumar¨¢ a los dos que ya hab¨ªa entregado. Adem¨¢s, hay pa¨ªses como Espa?a, Grecia o Pa¨ªses Bajos que tambi¨¦n disponen de Patriot ¡ªen el caso de Espa?a, una de sus bater¨ªas est¨¢ estacionada en Turqu¨ªa como parte de una misi¨®n de la OTAN¡ª y otros pa¨ªses, como Francia, disponen de otros sistemas. Adem¨¢s, hay aliados que se han comprometido a enviar fondos para comprar elementos de defensa antia¨¦rea o repuestos, aunque eso significa que el material puede tardar en llegar. Mientras, Rep¨²blica Checa ha comprado ya medio mill¨®n de rondas de artiller¨ªa como parte de una iniciativa de conseguir un mill¨®n en pa¨ªses fuera de la UE para enviar a Ucrania, seg¨²n ha confirmado la OTAN.
El ataque de Ir¨¢n a Israel, en el que los aviones de Estados Unidos jugaron un importante papel para proteger al pa¨ªs aliado de los drones y misiles de Teher¨¢n, complet¨® los argumentos. El fin de semana pasado, Johnson anunciaba que esta misma semana presentar¨ªa a votaci¨®n en la C¨¢mara el paquete de ayuda.
Para atraer al mayor n¨²mero posible de esc¨¦pticos moderados, y pasar por encima de los ultraconservadores, el speaker, un hombre al que le gusta examinar cualquier problema desde todos los ¨¢ngulos posibles, propuso partir el paquete de fondos: en lugar de un solo proyecto de ley, cuatro distintos. El de Ucrania lleva incorporadas medidas para una supervisi¨®n m¨¢s estricta, para hacerlo m¨¢s tolerable entre su bancada.
¡°Prefiero mandar a Ucrania balas que tener que enviarles soldados estadounidenses¡±, ha alegado Johnson para explicar su nueva postura a favor de la ayuda.
Con todo, la propuesta del presidente de la C¨¢mara no ten¨ªa los votos suficientes entre su grupo parlamentario. Y entre el ala dura, l¨ªvida por la maniobra de Johnson, estallaban las cr¨ªticas contra el l¨ªder de la bancada y cobraba fuerza una propuesta para forzar su cese.
Pero ocurri¨® lo que ya comenzaba a parecer cosa del pasado: un acuerdo bipartidista. Los dem¨®cratas, con un inter¨¦s extremo en sacar adelante los fondos, se asociaban con Johnson para votar a favor de los cuatro proyectos de ley. Era la primera vez que se produc¨ªa una alianza de este tipo, entre los dem¨®cratas y un republicano conservador, en los seis meses de mandato de Johnson.
En el voto del s¨¢bado, Johnson volver¨¢ a requerir el respaldo de los dem¨®cratas. En la votaci¨®n de este viernes, en una se?al del descontento en el ala m¨¢s conservadora, 55 diputados republicanos se han pronunciado en contra. Algo que anuncia nubarrones en el horizonte para el presidente de la C¨¢mara: tres diputados ya han anunciado que apoyan una moci¨®n para cesarle.
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