La decisi¨®n del tribunal de la ONU eleva la presi¨®n sobre EE UU para contener la ofensiva de Israel en Rafah

Minutos despu¨¦s de que el presidente del Tribunal Internacional de Justicia (TIJ), Nawaf Salam, ordenase en La Haya a Israel detener de inmediato su ofensiva militar en Rafah, en el sur de Gaza, una enorme nube de humo negro se alzaba en esa zona por un bombardeo de la aviaci¨®n militar israel¨ª. M¨¢s all¨¢ de la coincidencia, el ataque simboliza los l¨ªmites del tribunal. Sus medidas cautelares, como esta, son vinculantes, pero carece de una fuerza para imponer su cumplimiento, por lo que la clave ahora es qu¨¦ har¨¢ para ello la comunidad internacional. Y, m¨¢s concretamente, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, donde el principal aliado de Israel, Estados Unidos, cuenta con un derecho de veto que ya ha empleado en tres ocasiones para frenar una resoluci¨®n de alto el fuego permanente.

Un buen ejemplo es la invasi¨®n rusa de Ucrania, la otra guerra con importantes consecuencias geoestrat¨¦gicas que se libra en paralelo. El mismo tribunal orden¨® a Rusia ¨Dotro de los cinco pa¨ªses con asiento permanente en el Consejo de Seguridad¨D suspender de inmediato sus operaciones militares. Era marzo de 2022.

La reacci¨®n inicial de Israel apunta a que seguir¨¢ adelante con la operaci¨®n, pero evitando im¨¢genes de invasi¨®n masiva y de hambruna. Y alimentando la idea de que est¨¢ cumpliendo la medida cautelar, agarr¨¢ndose a que el TIJ se refiere a aquellas acciones que ¡°puedan infligir a los gazat¨ªes condiciones de vida que puedan llevar a su destrucci¨®n total o parcial¡±, es decir, constitutivas de genocidio. ¡°En resumen¡±, conclu¨ªa Amit Segal, uno de los principales comentaristas pol¨ªticos en Israel, ¡°la operaci¨®n continuar¨¢ en Rafah. Y, dentro de un mes, otra ronda en La Haya¡±.

Es la rendija, que depender¨¢ de la intensidad de las operaciones y de la narrativa que se imponga, a la que apunta la respuesta conjunta que han dado la jefatura del Estado Mayor de Seguridad Nacional y el Ministerio de Asuntos Exteriores: ¡°Israel no ha llevado a cabo ni llevar¨¢ a cabo actividad militar en la zona de Rafah que cree condiciones de vida que puedan conducir a la destrucci¨®n de la poblaci¨®n civil palestina, total o parcialmente¡±. En el comunicado se habla tambi¨¦n de ¡°reducir en la medida de lo posible los da?os a la poblaci¨®n civil en Gaza¡± y continuar los ¡°esfuerzos para permitir la entrada de ayuda humanitaria¡±.

Matan Gutman, experto legal y comentarista jur¨ªdico del diario Yediot Ahoronot, lo se?alaba con m¨¢s crudeza en el plat¨® del Canal 12 de la televisi¨®n nacional: ¡°Lo que quiere decir [el fallo] es que mientras convenzamos de esta interpretaci¨®n a nuestros amigos, a Estados Unidos, el Reino Unido, Alemania¡­ en la pr¨¢ctica no pasa nada¡±.

Aunque carezca de poder coercitivo para hacer cumplir las medidas cautelares de emergencia, el TIJ no deja de ser la m¨¢xima instancia judicial de la ONU. Y los apoyos de Israel pueden verse ahora en la tesitura de decidir si se ponen del lado de su aliado, incluso si incumple las ¨®rdenes, o de Naciones Unidas, que representa el pilar sobre el que se basa el sistema internacional de resoluci¨®n de conflictos. Si Israel se mantiene en su rechazo al ¡°tribunal mundial¡±, en su acepci¨®n coloquial, la credibilidad de la ONU puede quedar en entredicho, porque la opini¨®n p¨²blica internacional ver¨¢ que sus Gobiernos no apoyan sus decisiones. Las manifestaciones de estudiantes registradas en muchos pa¨ªses en las ¨²ltimas semanas son un ejemplo de un malestar cada vez mayor y visible en este sentido.

Es lo que ha querido destacar Balkees Jarrah, director asociado de justicia internacional de la ONG estadounidense Human Rights Watch. La orden del tribunal ¡°abre la posibilidad de un alivio¡± para los civiles gazat¨ªes, ¡°pero solo si los gobiernos usan su influencia, incluidos los embargos armament¨ªsticos y las sanciones focalizadas, para presionar a Israel a cumplir con urgencia las medidas¡±, puntualiza en un comunicado.

En Israel se daba casi por hecho que el tribunal no se limitar¨ªa esta vez a una advertencia gen¨¦rica de cumplimiento (como en enero), ni a la dimensi¨®n humanitaria. La duda era si pedir¨ªa detener la ofensiva en Rafah o en toda Gaza. ¡°Por extra?o que suene¡±, matizaban este viernes, antes del anuncio, los comentaristas pol¨ªticos del diario Yediot Aharonot Itamar Eichner y Zeev Avrahami, ¡°hay en Israel quienes preferir¨ªan en realidad [la exigencia] de un alto el fuego total¡±. El motivo: pocos dudan de que Estados Unidos hubiera vuelto a vetar en la ONU una previsible resoluci¨®n de alto el fuego permanente para cumplir el mandato del TIJ. Que la medida cautelar se limite a Rafah, donde Washington ha dejado claro que no quiere una gran operaci¨®n terrestre, aumenta las posibilidades de que se abstenga, dejando que salga adelante la resoluci¨®n, lo que no favorece al Gobierno de Netanyahu, que promete continuar la guerra hasta ¡°la victoria total¡±.

El fallo del tribunal se?ala que las medidas adoptadas por Israel para proteger a los gazat¨ªes, y en particular a los desplazados en Rafah, son insuficientes. M¨¢s a¨²n, el presidente ley¨® un pasaje donde dec¨ªa que los magistrados no hab¨ªan ¡°recibido pruebas¡± de que el Gobierno israel¨ª les proporcionara seguridad y acceso a condiciones humanitarias. El TIJ duda de que ¡°los esfuerzos de evacuaci¨®n y las medidas a las que Israel afirma haberse comprometido para mejorar la seguridad de los civiles¡± hayan sido ¡°suficientes para aliviar el inmenso riesgo¡± al que los exponen. Y se?ala que ¡°los inmensos riesgos asociados con una ofensiva militar en Rafah han comenzado a materializarse y se intensificar¨¢n incluso m¨¢s si la operaci¨®n contin¨²a¡±.

El desplazamiento forzoso de civiles es clave en la lucha por la narrativa. El presidente del tribunal record¨® que la ofensiva en Rafah ya ha originado la evacuaci¨®n obligada de al menos 800.000 personas, la gran mayor¨ªa de los 1,2 millones que se calculan en la zona de Rafah y que llegaron principalmente de otras partes de la Franja; bien por orden directa del ej¨¦rcito israel¨ª, bien tratando de huir de los bombardeos, que no han cesado en toda Franja.

Israel ¨Dque no reconoce la competencia del tribunal en este litigio¨D lo presentar¨¢, en cambio, como prueba de que la evacuaci¨®n era posible y evitar¨¢ muertos civiles en Rafah. Si los jueces abordan el fondo del caso, Sud¨¢frica, que present¨® su demanda en diciembre de 2023, tendr¨¢ que demostrar los ¡°actos de genocidio¡± que ha alegado. El tribunal, de todos modos, exige ya ahora a Israel que permita que se investiguen ¡°las alegaciones de genocidio¡±; la entrada de investigadores nombrados por la ONU; y preservar pruebas.

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