El Supremo de Estados Unidos impide registrar una marca despectiva contra Trump
La frase ¡°Trump too small¡± fue acu?ada por Marco Rubio, que ahora suena como candidato a vicepresidente
Cuando era candidato en las primarias para las elecciones de 2016, Donald Trump llamaba ¡°peque?o Marco¡± a su rival, el senador Marco Rubio. Este, cansado de ese desprecio, se plant¨® en un mitin: ¡°Ya saben lo que dicen de los tipos con manos peque?as. ?No te puedes fiar de ellos!¡±. Steve Elster, un activista progresista, intent¨® registrar en 2018 la marca ¡°Trump too small¡± [¡±Trump demasiado peque?as¡± o, con doble sentido, ¡°demasiado peque?a¡±], pero la oficina de patentes lo rechaz¨®, pues la ley exige consentimiento de la persona citada. Elster recurri¨® y un tribunal le dio la raz¨®n el a?o pasado, alegando que se estaba violando su libertad de expresi¨®n, pues Trump es un personaje p¨²blico. La oficina de patentes apel¨® y el Supremo le ha dado la raz¨®n este jueves en el caso Vidal v. Elster.
En aquella campa?a de las primarias, Rubio lanz¨® otros ataques f¨ªsicos contra Trump. Apunt¨® a su bronceado, diciendo que ¡°no suda porque sus poros est¨¢n obstruidos por el spray bronceador¡±. ¡°Donald Trump no va a hacer Am¨¦rica grande, va a hacer Am¨¦rica naranja¡±, a?adi¨®. Trump se refiri¨® despu¨¦s a la frase de Rubio en un debate de las primarias. ¡°Mira estas manos. ?Son manos peque?as? Se refiri¨® a mis manos... si son peque?as, algo m¨¢s debe ser peque?o. Os garantizo que no hay ning¨²n problema. Os lo garantizo¡±, dijo el luego ganador de las primarias y de las presidenciales de 2016.
Curiosamente, Marco Rubio suena ahora en las quinielas para figurar en la papeleta para candidato a vicepresidente junto a Trump. El expresidente puede intentar apelar con ¨¦l al voto latino, pero su candidatura se enfrenta tambi¨¦n a algunos inconvenientes. Rubio deber¨ªa sacrificar su puesto de senador y adem¨¢s, tendr¨ªa que cambiar su residencia, pues la Constituci¨®n exige que los candidatos a presidente y vicepresidente est¨¦n domiciliados en Estados diferentes.
Libertad de expresi¨®n
La vista oral del caso de la marca ¡°Trump too small¡± se celebr¨® el pasado 1 de noviembre. En su sentencia de este jueves, el Supremo considera que la cl¨¢usula que protege a los nombres no viola la libertad de expresi¨®n. Una cosa es usar una frase contra alguien y otra poder registrar esa frase denigratoria con el nombre de otra persona como marca y garantizarse los derechos. Elster puede seguir vendiendo camisetas y otros productos con esa frase en virtud de su libertad de expresi¨®n, pero no puede registrarla para tener la exclusividad. El Departamento de Justicia defend¨ªa la misma tesis que ha prevalecido en el Tribunal Supremo.
¡°Las restricciones a las marcas registradas se han basado en la noci¨®n de que una persona es propietaria de su propio nombre y que no puede ser excluida del uso de ese nombre por la marca de otro¡±, se?ala la sentencia, de la que ha sido ponente el juez Clarence Thomas. El sentido del fallo ha sido un¨¢nime, aunque la mayor¨ªa de los jueces se desmarcan de parte de los fundamentos de derecho.
¡°La restricci¨®n sobre los nombres de marca tambi¨¦n refleja la l¨®gica hist¨®rica de la ley de marcas de identificar el origen de los productos y garantizar as¨ª que los consumidores conozcan el origen de un producto y puedan evaluarlo bas¨¢ndose en la reputaci¨®n y el reconocimiento del fabricante. Adem¨¢s, la cl¨¢usula respeta la conexi¨®n establecida entre una marca y su protecci¨®n de la reputaci¨®n del titular de la marca¡±, dice la resoluci¨®n. ¡°Una marca protege la reputaci¨®n del titular de la marca, y la conexi¨®n es a¨²n m¨¢s fuerte cuando la marca contiene el nombre de una persona¡±, a?ade.
Aplicando estos principios, el tribunal concluye que una parte no tiene derecho, en virtud de la libertad de expresi¨®n, a aprovecharse del valor que otra entidad o persona tiene por su nombre. ¡°La cl¨¢usula de nombres refleja la tradici¨®n del derecho consuetudinario al prohibir que una persona obtenga una marca registrada del nombre de otra persona viva sin su consentimiento, protegiendo as¨ª la reputaci¨®n y el reconocimiento de la otra persona¡±, afirma la sentencia. Esa doctrina, se?ala, es suficiente en este caso concreto, aunque el Supremo trata de no sentar un marco global para todas las restricciones de marcas basadas en el contenido.
El curso judicial del Tribunal Supremo viene muy marcado por las decisiones sobre Trump. Esta sentencia solo le afectaba de modo tangencial. Los jueces tambi¨¦n decidieron acerca del uso de las redes sociales por parte de los cargos p¨²blicos, un caso con ecos al mandato del expresidente, pero que no le ata?¨ªa directamente. Por ahora, la decisi¨®n m¨¢s importante sobre el expresidente fue la que rechaz¨® su inhabilitaci¨®n por insurrecci¨®n. Quedan otras dos que afectan al futuro judicial de Trump. Una, sobre el alcance de su inmunidad presidencial en materia penal. La otra, sobre la naturaleza de un delito del que est¨¢ acusado, el de obstrucci¨®n de un procedimiento oficial. Ambos fallos se esperan este mes.
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