Olaf Scholz, el canciller siempre al l¨ªmite

A Angela Merkel la apodaron ¡°la canciller de las crisis¡±. Durante 16 a?os capitane¨® el barco alem¨¢n desde la crisis financiera de 2008 a la del coronavirus pasando por la migratoria de 2015. Pr¨¢cticamente no tuvo un a?o tranquilo. Y sin embargo pocas veces lleg¨® a ponerse en duda su liderazgo o la continuidad de sus Ejecutivos. Olaf Scholz, en cambio, siempre parece estar al borde del abismo. Su Gobierno de coalici¨®n con verdes y liberales va a cumplir tres a?os de sobresalto en sobresalto, siempre a punto de romperse. Con cada nueva pelea interna cae su valoraci¨®n. Pero resiste. Incluso despu¨¦s de obtener sus peores resultados en las europeas y el domingo pasado en las regionales de Turingia y Sajonia, Scholz aguanta, siempre al l¨ªmite.

Tambi¨¦n el in¨¦dito Ejecutivo tripartito de Scholz ¡ªnunca tres formaciones hab¨ªan formado Gobierno a escala federal¡ª ha tenido su raci¨®n de crisis externas en estos a?os: la salida de la pandemia, la invasi¨®n rusa de Ucrania, la espiral inflacionaria, los costes de la energ¨ªa. Pero son las crisis internas, las desavenencias entre tres partidos tan distintos, las que han estado a punto de estallarle las costuras al Gobierno alem¨¢n. El ¨¦xito de la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD), fuerza m¨¢s votada en Turingia y segunda en Sajonia, ha sido la ¨²ltima prueba de fuego para la coalici¨®n. Solo uno de cada diez votantes optaron en estos l?nder por alguno de los partidos en el Ejecutivo. Dif¨ªcilmente podr¨ªa haber salido m¨¢s debilitado de los comicios.

Y pese a ello, cuando queda apenas un a?o para las pr¨®ximas elecciones federales, el canciller dice estar dispuesto a volver a ser candidato. Scholz se ve fuerte pese a las encuestas, que muestran que solo un 18% de los alemanes est¨¢n contentos con su gesti¨®n. Por hacerse una idea, la peor puntuaci¨®n del tambi¨¦n socialdem¨®crata Gerhard Schr?der (1998-2005) durante sus siete a?os en el cargo ¡ªal final de su mandato era extremadamente impopular¡ª fue del 24%. Angela Merkel (CDU) nunca baj¨® del 40%.

¡°La insatisfacci¨®n con la labor del Gobierno federal es muy alta, hasta el punto de que ha alcanzado un m¨ªnimo hist¨®rico¡±, apunta Uwe Jun, polit¨®logo de la Universidad de Tr¨¦veris: ¡°Y cuanto m¨¢s insatisfecha est¨¢ la gente, cuanto m¨¢s se queja, cuanto m¨¢s nota o tiene la impresi¨®n de que el Gobierno federal no resuelve sus problemas cotidianos, m¨¢s recurre a otros partidos, incluso a partidos radicales como acabamos de ver en el este. Es su forma de canalizar la protesta¡±. El Ejecutivo de Scholz es, en ese sentido, responsable de lo sucedido, a?ade: ¡°S¨ª, porque pocas veces hemos visto un Gobierno que haya generado tanto descontento, y eso es preocupante¡±.

Con los partidos enfrascados ahora en las complicadas negociaciones para formar Gobiernos regionales respetando el cord¨®n sanitario a los ultras, en el horizonte asoma la pr¨®xima conmoci¨®n: en las elecciones en el Estado federado de Brandeburgo, el pr¨®ximo 22 de septiembre, AfD vuelve a estar en cabeza en los sondeos. El SPD podr¨ªa perder el poder all¨ª despu¨¦s de m¨¢s de tres d¨¦cadas. El Gobierno de Potsdam, uno de sus grandes bastiones, ha estado en manos de un ministro presidente socialdem¨®crata ininterrumpidamente desde 1990.

¡°Parece que el canciller Scholz sigue convencido de que la labor del Gobierno federal es mejor que su reputaci¨®n¡±, asegura la polit¨®loga Ursula M¨¹nch, directora de la Academia para la Educaci¨®n Pol¨ªtica de Tutzing: ¡°No toma nota de que las valoraciones del electorado van dirigidas contra ¨¦l¡±. En las ¨²ltimas elecciones federales, asegura, se produjo un ¡°milagro¡± que dif¨ªcilmente se va a repetir: los ¡°m¨²ltiples errores¡± de sus adversarios, el democristiano Armin Laschet y la verde Annalena Baerbock.

Mientras, las crisis internas no amainan. El Bundestag empieza esta semana a debatir el proyecto de presupuesto para 2025 con vac¨ªos en la financiaci¨®n de algunas partidas y numerosas diferencias entre los socios. Los liberales de Christian Lindner, ministro de Finanzas, vuelven a pedir rebajas en prestaciones sociales, que son la l¨ªnea roja de los socialdem¨®cratas. Los tres partidos tratan de marcar perfil propio y de distanciarse del Gobierno de coalici¨®n que dirige Scholz.

Tampoco la econom¨ªa alemana muestra signos de recuperaci¨®n de su estancamiento, y eso se refleja en la valoraci¨®n ciudadana. ¡°La estrategia de Scholz est¨¢ sentando cada vez peor en el partido, con sectores que parecen estar volvi¨¦ndose en su contra¡±, a?ade M¨¹nch. Las elecciones en Brandeburgo ser¨¢n otro punto de inflexi¨®n para el canciller. ¡°Una derrota volver¨ªa a ponerle en una situaci¨®n comprometida dentro del partido y podr¨ªa plantearse abiertamente un cambio en la canciller¨ªa, o al menos en la candidatura a canciller¡±, apunta la polit¨®loga.

A poco m¨¢s de un a?o de la cita electoral, el Gobierno de coalici¨®n es m¨¢s impopular que nunca entre los ciudadanos. S¨®lo uno de cada seis (16%) est¨¢ muy satisfecho o satisfecho con su labor, seg¨²n el ¨²ltimo sondeo Deutschlandtrend, publicado esta semana. En un mes ha ca¨ªdo cuatro puntos. Es rese?able que la insatisfacci¨®n, muy alta entre los votantes de los partidos de la oposici¨®n, sea tambi¨¦n elevada entre los propios electores del tripartito.

El prestigioso sondeo de la cadena p¨²blica ARD indaga tambi¨¦n en los asuntos que preocupan a los alemanes: la inmigraci¨®n y los refugiados. Uno de cada dos encuestados (48%) lo mencion¨® como el problema m¨¢s importante que los pol¨ªticos alemanes deben abordar con urgencia. Tres de cada cuatro (77%) opinan actualmente que es necesaria una pol¨ªtica de asilo y refugio radicalmente distinta para que lleguen menos personas a Alemania. Dos tercios de los votantes del SPD de Scholz as¨ª lo creen tambi¨¦n.

Tras el presunto atentado terrorista islamista de Solingen a finales de agosto el canciller ha endurecido su ret¨®rica respecto a la inmigraci¨®n, pero la oposici¨®n le exige todav¨ªa m¨¢s firmeza. El l¨ªder de la CDU, Friedrich Merz, le dio un ultim¨¢tum este viernes. Debe decidir, dijo, si ¡°est¨¢ dispuesto a llevar a cabo rechazos en las fronteras¡±; de lo contrario, la CDU se levantar¨¢ de las mesas de negociaci¨®n.

El asunto sin duda protagonizar¨¢ la campa?a electoral en Brandeburgo, el Estado federado que rodea Berl¨ªn y que form¨® parte de la Rep¨²blica Democr¨¢tica Alemana (RDA). ¡°El futuro de Scholz depende en buena medida del resultado de esas elecciones¡±, reitera M¨¹nch. Las ¨²ltimas encuestas dan una intenci¨®n de voto al SPD del 24% mientras AfD lidera con el 27%.

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