M¨¢s de 75 premios Nobel piden al Senado de Estados Unidos que no confirme a Robert Kennedy como secretario de Salud
La carta, a la que ha tenido acceso el diario ¡®The New York Times¡¯, subraya que la salud p¨²blica estar¨ªa en riesgo bajo su direcci¨®n
M¨¢s de 75 premios Nobel han firmado una carta en la que instan al Senado a no confirmar a Robert F. Kennedy Jr, el candidato elegido por el presidente electo Donald J. Trump para dirigir el Departamento de Salud y Servicios Humanos y un conocido antivacunas. La carta, a la que ha tenido acceso el diario The New York Times, es la primera de la que se tiene constancia en que un grupo de galardonados cierran filas contra una elecci¨®n del Gabinete, seg¨²n Richard Roberts, ganador del Nobel de Fisiolog¨ªa y Medicina en 1993, que particip¨® en la redacci¨®n de la misiva. El laureado club de investigadores y acad¨¦micos no suele pronunciarse p¨²blicamente en cuestiones pol¨ªticas, subray¨® Roberts, y menos a¨²n, de consuno.
El principal argumento que esgrimen los Nobel es que, bajo la direcci¨®n de Kennedy, la salud p¨²blica estar¨ªa en riesgo. En palabras de Roberts, la confirmaci¨®n de Kennedy, un cr¨ªtico ac¨¦rrimo de la medicina convencional, pero tambi¨¦n de las Big Pharma (las grandes multinacionales farmac¨¦uticas), es una amenaza que los premios Nobel no pueden ignorar. Kennedy se ha mostrado repetidamente contrario a los cient¨ªficos y a los organismos cuya supervisi¨®n recae en el Departamento de Salud. ¡°Estos ataques pol¨ªticos a la ciencia son muy perjudiciales. Hay que levantarse y protegerla¡±, ha declarado Roberts.
Los laureados cuestionan la idoneidad del candidato, de quien aseguran que ¡°carece de credenciales¡± en medicina, ciencia o administraci¨®n, para dirigir el departamento responsable de proteger la salud p¨²blica y financiar la investigaci¨®n biom¨¦dica. ¡°Poner al Sr. Kennedy al frente del DHHS [siglas en ingl¨¦s del Departamento de Salud y Recursos Humanos] socavar¨ªa el liderazgo mundial de Estados Unidos en las ciencias de la salud¡±, advierte la carta.
Si es confirmado por el Senado, avisan los firmantes de la carta, la conocida oposici¨®n de Kennedy a herramientas de salud p¨²blica bien establecidas, como las vacunas y la fluoraci¨®n del agua potable, supondr¨ªa un riesgo para el bienestar del pa¨ªs. La carta tambi¨¦n denuncia la promoci¨®n de teor¨ªas conspirativas por parte de Kennedy, entre ellas, vincular falsamente las vacunas con el autismo, su rechazo de las pruebas cient¨ªficas que demuestran que el VIH es el causante del sida y su denuncia de que el coronavirus fue especialmente dirigido a blancos y negros, y que los chinos y los jud¨ªos son inmunes al virus. Lejos de disculparse ante la pol¨¦mica que causaron sus palabras, durante su campa?a como precandidato presidencial dem¨®crata, Kennedy arremeti¨® en la red social X (antes Twitter) contra el medio que hab¨ªa publicado esas declaraciones racistas. Su familia, y en especial su hermana Kerry, han renegado p¨²blicamente de ¨¦l por considerar que mancha el legendario apellido.
Kennedy ha amenazado con despedir a los empleados de la FDA, la agencia federal de alimentos y medicamentos, que seg¨²n ¨¦l ha librado una ¡°guerra contra la salud p¨²blica¡±, y ha prometido sustituir a cientos de empleados del NIH, siglas en ingl¨¦s del Instituto Nacional de Salud, uno de los centros m¨¢s punteros del mundo en investigaci¨®n m¨¦dica, al d¨ªa siguiente de la toma de posesi¨®n de Donald Trump, el pr¨®ximo 20 de enero. Seg¨²n el nominado, antiguo dem¨®crata reconvertido a la religi¨®n trumpista ¡ªabandon¨® el tradicional partido familiar desde el que lanz¨® su candidatura para concurrir a la Casa Blanca como independiente y luego aparcar la carrera y respaldar a Trump¡ª, los inmun¨®logos deber¨ªan ¡°ser encerrados en la c¨¢rcel y tirar la llave¡± despu¨¦s. La FDA y el NIH son dos de las principales agencias del Departamento de Salud.
Si supera la prueba del Senado, Kennedy dirigir¨¢ un departamento formado por 13 agencias federales con un total de 80.000 empleados, y del que depende no solamente la pol¨ªtica sanitaria del pa¨ªs, sino tambi¨¦n la regulaci¨®n de medicinas y alimentos, as¨ª como los principales programas p¨²blicos de cobertura sanitaria, Medicare y Medicaid. Su nominaci¨®n fue recibida con estupor por la comunidad cient¨ªfica, algunos de cuyos miembros recordaron su responsabilidad en uno de los peores brotes de sarampi¨®n de los ¨²ltimos tiempos, al inundar Samoa de informaci¨®n err¨®nea, lo que provoc¨® que la tasa de vacunaci¨®n cayera en 2018 a un nivel peligrosamente bajo. Al a?o siguiente, cuando un viajero llev¨® el sarampi¨®n a las islas, la enfermedad hizo estragos entre la poblaci¨®n, contagiando a m¨¢s de 5.700 personas y matando a 83, la mayor¨ªa ni?os peque?os.
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