Trump llama a la unidad antes de pasar al ataque contra Biden y los dem¨®cratas

Donald Trump cerr¨® este jueves la convenci¨®n republicana con un llamamiento a la unidad, aunque una unidad en torno a ¨¦l. ¡°La discordia y la divisi¨®n en nuestra sociedad deben ser curadas. Como estadounidenses, estamos unidos por una misma suerte y un destino compartido. Nos levantamos juntos. O nos desmoronamos¡±, dijo, en un discurso marcado por el atentado que sufri¨® el pasado s¨¢bado. ¡°Me presento para ser presidente de todo Estados Unidos, no de la mitad de Estados Unidos, porque no hay victoria en ganar para la mitad de Estados Unidos¡±, a?adi¨® en una intervenci¨®n que salpic¨® de sus bulos e hip¨¦rboles habituales. Trump volvi¨® enseguida a los ataques, present¨® una imagen apocal¨ªptica del pa¨ªs y se present¨® como salvador.

Excepto por los primeros 15 minutos, en que hizo ese llamamiento a sanar heridas y relat¨® con algo de emoci¨®n c¨®mo vivi¨® el intento de asesinato, son¨® ¡ªy dur¨®¡ª como cualquiera de sus m¨ªtines, solo que en tono menor y quiz¨¢ m¨¢s aburrido. Estuvo m¨¢s de hora y media hablando, el discurso de aceptaci¨®n m¨¢s largo registrado nunca, hasta que los globos azules, rojos, blancos y dorados que llevaban toda la semana esperando su momento descendieron desde el techo del Fiserv Forum, en Milwaukee (Wisconsin). El p¨²blico se entreg¨®, pero no m¨¢s que en cualquiera de sus citas de campa?a.

Trump ya avanz¨® que suavizar¨ªa su mensaje a ra¨ªz del intento de asesinato en el mitin de Butler (Pensilvania). Y al principio lo hizo. ¡°Me presento ante ustedes esta noche con un mensaje de confianza, fuerza y esperanza. Dentro de cuatro meses, obtendremos una victoria incre¨ªble y comenzaremos los cuatro mejores a?os de la historia de nuestro pa¨ªs¡±, dijo el candidato. ¡°Juntos, iniciaremos una nueva era de seguridad, prosperidad y libertad para los ciudadanos de toda raza, religi¨®n, color y credo¡±, a?adi¨®, antes de referirse al atentado.

¡°Perm¨ªtanme comenzar esta noche expresando mi gratitud al pueblo estadounidense por su efusi¨®n de amor y apoyo tras el intento de asesinato en mi mitin del s¨¢bado¡±, se?al¨®. El expresidente estuvo en el escenario con un casco y una chaqueta de bombero que pertenecieron a Corey Comperatore, que muri¨® durante el atentado. Trump rindi¨® un homenaje a la v¨ªctima del atentado al acercarse a su traje y besar su casco y pidi¨® unos momentos de silencio para ¨¦l.

¡°Como ya saben, la bala del asesino estuvo a un cuarto de pulgada de quitarme la vida. Mucha gente me ha preguntado qu¨¦ pas¨®, y, por lo tanto, les contar¨¦ lo que pas¨®, y nunca lo oir¨¢n de m¨ª una segunda vez, porque es demasiado doloroso contarlo¡±, dijo antes de relatar c¨®mo vivi¨® el atentado. Explic¨® que girarse para mirar un gr¨¢fico sobre la inmigraci¨®n ilegal le salv¨® la vida. ¡°Algo me golpe¨® muy, muy duro, en mi oreja derecha¡±, afirm¨®. ¡°Hab¨ªa sangre por todas partes y, sin embargo, en cierto modo me sent¨ªa muy seguro porque ten¨ªa a Dios de mi lado¡±, continu¨®. ¡°Las balas volaban sobre nosotros, pero yo me mantuve sereno. Estoy ante ustedes en esta arena solo por la gracia de Dios todopoderoso¡±, a?adi¨®.

Tambi¨¦n destac¨® c¨®mo se levant¨® gritando: ¡°Lucha, lucha, lucha¡±. En ese momento los asistentes se pusieron a corear ese lema. El primer cuarto de hora largo del discurso lo consumi¨® en hablar del atentado, en la primera intervenci¨®n p¨²blica tras sufrirlo. A ojos de los republicanos, Trump emerge del atentado como un ¡°h¨¦roe¡±, como un ¡°le¨®n¡±, seg¨²n fueron diciendo muchos de los intervinientes en la convenci¨®n.

¡°Nada nos detendr¨¢. Nunca dejar¨¦ de luchar por vosotros y por nuestro magn¨ªfico pa¨ªs¡±, sigui¨® como transici¨®n para cambiar de tema. Tras hablar del atentado, el expresidente vovi¨® a pedir unidad, pero para que retiren las acusaciones penales contra ¨¦l y se acabe lo que denomina ¡°caza de brujas¡±, con imputaciones que considera inconstitucionales. Celebr¨® la decisi¨®n de la jueza de archivar el caso de los papeles de Mar-a-Lago. La llamada a la unidad se produjo, por otra parte, despu¨¦s de d¨ªas de ataques frontales a Joe Biden y Kamala Harris en la convenci¨®n. Y aunque evit¨® la mayor parte de la deriva autoritaria con la que ha salpicado intervenciones en el ¨²ltimo a?o, enseguida se lanz¨® a atacar de nuevo al Gobierno de Biden.

Los dem¨®cratas, a trav¨¦s de la vicepresidenta, Kamala Harris, hab¨ªan anticipado que Trump apelar¨ªa a esa idea de unidad y ya hab¨ªan criticado que el expresidente, la figura m¨¢s divisiva de la pol¨ªtica estadounidense, se presentara ahora como unificador. ¡°Si pretendes defender la unidad, debes hacer algo m¨¢s que pronunciar la palabra. No se puede afirmar que se defiende la unidad si se impulsa un programa que priva a grupos enteros de estadounidenses de libertades, oportunidades y dignidad¡±, dijo este jueves en un mitin en Carolina del Norte. ¡°No se puede pretender estar a favor de la unidad si se intenta anular unas elecciones libres y justas¡±, a?adi¨®, en referencia a sus intentos de revertir el resultado electoral de 2020.

Trump solo pronunci¨® el nombre del presidente en un pasaje: ¡°Yo digo que si coges a los 10 peores presidentes de la historia de Estados Unidos, los 10 peores, no habr¨¢n hecho el da?o que ha hecho Biden¡±. No cit¨® a Harris. Pese a ello, critic¨® su ¡°incompetente liderazgo¡± que ha hecho, seg¨²n dijo, que Estados Unidos sea ¡°un pa¨ªs en decadencia¡±. A la que mencion¨® un par de veces por su nombre fue a la expresidenta de la C¨¢mara de Representantes, Nancy Pelosi, a la que llam¨® ¡°loca¡±, demostrando que su supuesta moderaci¨®n tiene un l¨ªmite, poco despu¨¦s de decir que no hab¨ªa que ¡°demonizar los desacuerdos pol¨ªticos¡±.

Buena parte del discurso pareci¨® una repetici¨®n de cualquiera de sus m¨ªtines, con sus proclamas a favor de los combustibles f¨®siles, promesas de rebajas de impuestos, planes de aranceles a la importaci¨®n (en particular cit¨® los coches), el cierre de la frontera a la inmigraci¨®n irregular y una de sus ¨²ltimas promesas estrella: propinas libres de impuestos. No mencion¨® el asalto al Capitolio, pero s¨ª sac¨® a pasear el bulo de que le robaron las elecciones en 2020. Evit¨® tambi¨¦n hablar del aborto.

El expresidente reiter¨® su habitual retrato apocal¨ªptico en el que se?ala que Estados Unidos sufre ¡°una invasi¨®n¡±, en referencia a la entrada irregular de inmigrantes que ¡°proceden de prisiones y c¨¢rceles, de instituciones mentales y manicomios, y con terroristas a niveles nunca vistos¡±, present¨¢ndolos como can¨ªbales y vincul¨¢ndolos a la delincuencia, en la repetici¨®n de uno de sus bulos demag¨®gicos. Prometi¨® la mayor deportaci¨®n en la historia de Estados Unidos. Tambi¨¦n asegur¨® que el planeta est¨¢ al borde de una tercera guerra mundial, otro de sus cl¨¢sicos.

Cerr¨® asegurando que los republicanos lograr¨¢n la victoria. ¡°Vamos a salvar nuestro pa¨ªs¡±, dijo. ¡°Nada nos detendr¨¢¡±, continu¨®, para cerrar con su lema, heredado de la campa?a de Ronald Reagan: ¡°Vamos a hacer que Estados Unidos sea grande de nuevo¡±.

Camino de la Casa Blanca

El expresidente es el primer delincuente convicto elegido candidato de uno de los dos grandes partidos. Sale de Milwaukee aclamado, mientras una buena parte de los dem¨®cratas han emprendido una operaci¨®n de acoso y derribo contra el presidente, Joe Biden, para que no se presente a la reelecci¨®n.

Tras los intentos de Biden de aferrarse a la candidatura, dejando abiertas solo hip¨®tesis de retirada extremas, la presi¨®n de los l¨ªderes dem¨®cratas en el Congreso ha empezado a dar sus frutos. Biden ha tenido conversaciones con el l¨ªder de su partido en el Senado, Chuck, Schumer; con el de la C¨¢mara de Representantes, Hakeem Jeffries, y con la ¨²ltima speaker dem¨®crata, Nancy Pelosi, que parecen haber pesado en su ¨¢nimo. Ha empezado a mostrarse receptivo a sus advertencias de que no tiene apenas posibilidades de derrotar a Trump y de que puede arrastrar al partido en su derrota. Con ello, parece empezar a aceptar que podr¨ªa tener que ceder el testigo para evitar el triunfo de su rival de 2020. Seg¨²n The Washington Post, Pelosi ha dicho a algunos congresistas que Biden ¡°podr¨ªa¡± convencerse pronto de que tiene que abandonar.

Trump acaricia la vuelta a la Casa Blanca despu¨¦s de la triunfal convenci¨®n de Milwaukee. Un partido con frecuencia disfuncional, que ha vivido mil y una batallas internas en el Congreso en los ¨²ltimos dos a?os, ha dado una imagen de unidad casi impecable, solo alterada por alg¨²n episodio y altercado menor. El candidato quiere evitar a toda costa ahuyentar a los votantes moderados e independientes. Sabe que los suyos est¨¢n movilizados, especialmente despu¨¦s del atentado del s¨¢bado, as¨ª que trata de mostrar su lado m¨¢s amable, pero no termina de lograrlo.

Pese a ello, la sesi¨®n del jueves estuvo marcada por una dial¨¦ctica de enfrentamiento antes de su intervenci¨®n. Particip¨® el extremista presentador de televisi¨®n Tucker Carlson, que present¨® a Trump como ¡°el l¨ªder de una naci¨®n¡±, especialmente despu¨¦s del atentado. ¡°Todo es diferente despu¨¦s de ese momento. Estados Unidos es diferente. El mundo es diferente¡±, dijo. Tambi¨¦n aparecieron el luchador Hulk Hogan, que se desgarr¨® la camiseta, y el jefe de Ultimate Fighting Championship, una competici¨®n de artes marciales. Poco antes de la intervenci¨®n de Trump, Kid Rock interpret¨® un rap con el estribillo Fight, fight (Lucha, lucha), en referencia a las palabras que pronunci¨® Trump tras el atentado con el pu?o en alto.

Entre luchador y rapero lleg¨® Melania Trump, la mujer del candidato, con m¨²sica de la Novena de Beethoven para recibirla. Era su primera aparici¨®n en la convenci¨®n, pero no dio un discurso, como acostumbran los c¨®nyuges de los candidatos. Apareci¨® vestida de rojo, el color del Partido Republicano y el de la corbata de su marido. Luego subi¨® al escenario al acabar el mitin y dio un beso que pareci¨® algo esquivo a su marido.

Trump ha escogido como compa?ero de papeleta a J. D. Vance, senador por Ohio, autor de Hillbilly: una eleg¨ªa rural. Con sus 39 a?os, Vance aporta juventud, pero sobre todo, es alguien que el expresidente cree que le puede ayudar a ganar las elecciones en tres Estados clave: Pensilvania, M¨ªchigan y Wisconsin. All¨ª se impuso a Hillary Clinton en 2016 porque fue capaz de atraer el voto de los trabajadores blancos sin cualificar, pero Biden le gan¨® en 2020. En su discurso de aceptaci¨®n, aislacionista y antiglobalizaci¨®n, mencion¨® una y otra vez a esos Estados.

Forman parte del llamado Cintur¨®n del ?xido, la regi¨®n industrial del Medio Oeste cuyas f¨¢bricas han sufrido con la globalizaci¨®n, y muchos de cuyos votantes comparten un origen similar al del candidato a vicepresidente. Los dem¨®cratas llaman ahora a esos tres Estados el Muro Azul, el color de su partido, porque retenerlos se ha convertido en pr¨¢cticamente el ¨²nico camino para ganar las elecciones y frenar la pujanza de Trump.

Trump se refiri¨® a Vance en su discurso y le dijo: ¡°Vas a estar haciendo esto mucho tiempo¡±, confirmando as¨ª el papel de sucesor que le asigna indirectamente al elegirle como su n¨²mero dos.

A lo largo de la convenci¨®n, pr¨¢cticamente todo el Partido Republicano ha cerrado filas en torno a Trump. La gran mayor¨ªa de los candidatos que le desafiaron en las primarias le han apoyado, incluidos los que fueron sus dos oponentes m¨¢s destacados: el gobernador de Florida, Ron DeSantis, y la exembajadora en la ONU y exgobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley. ¡°No tienes que estar de acuerdo con Donald Trump el 100% del tiempo para votar por ¨¦l¡±, dijo Haley en su discurso. La mayor¨ªa de los presentes en la convenci¨®n de Milwaukee esta semana ni siquiera tienen que hacer esa reflexi¨®n.

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