Kamala Harris presenta su ¡°alegato final¡± contra Donald Trump donde el republicano dio una arenga el d¨ªa del asalto al Capitolio

Donald Trump es el acusado. El electorado ser¨¢ el jurado popular. Kamala Harris recupera este martes el papel de fiscal con el que dio el salto a la pol¨ªtica en un mitin en la Elipse de Washington, el parque contiguo a la finca de la Casa Blanca. Es el lugar de los hechos: desde all¨ª Donald Trump lanz¨® una arenga a sus seguidores el 6 de enero de 2021, antes de que estos se dirigieran a asaltar el Capitolio. Se trata de un acto lleno de simbolismo. La propia campa?a dem¨®crata se refiere a ¨¦l en t¨¦rminos iguales a los judiciales, como el ¡°alegato final¡±, el momento en que el fiscal expone los hechos, las pruebas y los testimonios y pide que se declare al acusado culpable. El veredicto se dictar¨¢ el 5 de noviembre.

Los hechos est¨¢n claros. Donald Trump se neg¨® a aceptar su derrota electoral frente a Joe Biden en las elecciones de 2020. Trat¨® de revertir el resultado sin ¨¦xito. Entre otras cosas, junto con sus asesores, perge?¨® un plan para que el vicepresidente, Mike Pence, se negase a certificar la victoria del dem¨®crata en la sesi¨®n conjunta del Congreso convocada para el 6 de enero de 2021 y le proclamase a ¨¦l como presidente reelegido.

En el propio mitin de la Elipse, Trump dijo ante sus seguidores: ¡°Mike Pence va a tener que cortar por lo sano y, si no lo hace, ser¨¢ un d¨ªa triste para nuestro pa¨ªs. Y Mike Pence, espero que te plantes por el bien de nuestra Constituci¨®n y por el bien de nuestro pa¨ªs. Y si no lo haces, voy a estar muy decepcionado contigo. Te lo digo ya mismo¡±. Despu¨¦s, los insurrectos se dirigieron al Capitolio al grito de: ¡°?Colguemos a Mike Pence!¡±. Tomaron al asalto la sede del Congreso e interrumpieron la certificaci¨®n del voto, que se retom¨® horas m¨¢s tarde.

Las pruebas de la conducta de Trump est¨¢n encima de la mesa. Algunas, simplemente, son p¨²blicas. Otras, salieron a la luz en el proceso pol¨ªtico (impeachment) al que se someti¨® al expresidente. De los 100 miembros de la C¨¢mara alta, 57 votaron el veredicto de culpabilidad, pero no alcanzaron la mayor¨ªa de dos tercios necesaria para la condena. La comisi¨®n de la C¨¢mara de Representantes que investig¨® el asalto al Capitolio sac¨® a la luz muchas m¨¢s pruebas y le consider¨® responsable de la insurrecci¨®n por unanimidad. A esas se suman las que figuran en el sumario del caso que se sigue contra Trump en un juzgado federal de Washington. El fiscal especial Jack Smith logr¨® que un gran jurado le imputase por cuatro delitos. La dilaci¨®n del proceso, y la ayuda del Tribunal Supremo, ha impedido que el caso vaya a juicio antes de las elecciones.

Los testimonios son m¨²ltiples. Est¨¢n los que tienen un valor probatorio desde el punto de vista judicial, incorporados tambi¨¦n al caso, aunque bajo secreto de sumario. Est¨¢n los que dieron los que comparecieron ante el Congreso. Adem¨¢s, en esta campa?a han cobrado relieve las declaraciones de quienes trabajaron codo a codo con Trump durante su presidencia y que le retratan como un ¡°fascista hasta la m¨¦dula¡± que quer¨ªa tener ¡°generales como los de Hitler¡±, como el exjefe del Estado Mayor, Mark Milley, y su antiguo jefe de gabinete, John Kelly.

Un peligro para la democracia

Harris acusar¨¢ a Trump de ser un peligro para la democracia. Es una acusaci¨®n que Biden ¨Dque no asistir¨¢ al mitin¨D blandi¨® con cierto ¨¦xito en las elecciones legislativas de 2022 y a la que su sustituta en la papeleta dem¨®crata otorg¨® inicialmente un papel secundario. En las ¨²ltimas semanas, sin embargo, se ha convertido en un tema central de su campa?a. Compareci¨® por sorpresa la semana pasada ante su residencia oficial para hacer una breve declaraci¨®n al respecto. Le acusa de pretender gobernar como un dictador, de querer perseguir a sus rivales pol¨ªticos, a los que define como el ¡°enemigo interno¡±. Habr¨¢ que ver si le acusa abiertamente de ser un fascista, como ha hecho ya en un par de ocasiones sin llegar a pronunciar ella misma la palabra.

Para Harris es el caso de su vida. Presenta su alegato acusatorio contra Trump en un momento clave. El entusiasmo que gener¨® su nominaci¨®n se ha apagado. Entre los dem¨®cratas cunden los nervios ante la mejora del expresidente en las encuestas y la movilizaci¨®n de los republicanos en el voto anticipado en los Estados decisivos. La candidata dem¨®crata hizo campa?a este lunes en M¨ªchigan y seguir¨¢ el mi¨¦rcoles y jueves su recorrido por los territorios clave por Carolina del Norte, Pensilvania, Wisconsin, Nevada y Arizona, donde se juega la presidencia.

Adem¨¢s de acusar a Trump, Harris tratar¨¢ de ofrecer sus propias propuestas para los estadounidenses. Seguramente insistir¨¢ en las frases que ha repetido una y otra vez en sus m¨ªtines: ¡°pasar la p¨¢gina¡±, ¡°trazar un nuevo camino hacia adelante¡±, ¡°una nueva generaci¨®n de liderazgo¡±, ¡°poner a la gente por delante del partidismo¡± o las dos visiones diferentes del pa¨ªs, sin olvidar otro de sus lemas: ¡°No retrocederemos¡±.

En el Distrito de Columbia, Biden logr¨® el 92% de apoyo, frente al 5% de Trump. Los tres votos de la capital en el Colegio Electoral los tiene en el bolsillo, pero acude a Washington con la idea de lanzar un mensaje de proyecci¨®n nacional. No es el momento de Beyonc¨¦ ni de Bruce Springsteen. Est¨¢ por ver si Liz Cheney y otros republicanos la acompa?an, como vienen haciendo en algunas intervenciones de Harris centradas en la democracia.

El fallo del jurado electoral ser¨¢ ajustado, seg¨²n apuntan las encuestas. Pr¨¢cticamente, la mitad de los votantes no solo absuelven a Trump de su papel en el asalto al Capitolio, sino que lo quieren de vuelta en el poder. Si el expresidente recupera el cargo, los casos contra ¨¦l quedar¨¢n en suspenso. Desde su cargo, podr¨¢ conseguir que se retiren las acusaciones en los dos casos federales, el de Washington y el de los papeles clasificados, en Florida. Casi otra mitad del pa¨ªs apoya a Harris. El que gane este juicio popular ser¨¢ el inquilino de la Casa Blanca los pr¨®ximos cuatro a?os, justo el decorado de fondo del mitin.