?C¨®mo ayudan las artes marciales a los ni?os? Sus beneficios m¨¢s all¨¢ de la pr¨¢ctica deportiva

Las pel¨ªculas de Bruce Lee alcanzaron una popularidad inesperada para la industria del cine en los a?os setenta. Un fil¨®n que se sigui¨® explotando durante los ochenta con pel¨ªculas como Karate Kid, que lleg¨® a recaudar 130,8 millones de d¨®lares en taquilla, una cifra muy por encima de la empleada para su realizaci¨®n (tan solo ocho millones de d¨®lares) y que sirvi¨® para que la historia se prolongara a lo largo de cuatro pel¨ªculas m¨¢s, la ¨²ltima en 2010, y una serie. M¨¢s all¨¢ de la acogida de estos largometrajes por parte de sus fans, en Espa?a la pr¨¢ctica de algunas disciplinas relacionadas con las artes marciales, como el judo o el k¨¢rate, ambas disciplinas ol¨ªmpicas, han dado numerosos referentes masculinos y femeninos en las ¨²ltimas d¨¦cadas. Una circunstancia que ha contribuido a que en la actualidad la Federaci¨®n Espa?ola de Judo cuente con 108.145 inscritos y la Federaci¨®n Espa?ola de Karate tenga 75.406 asociados. A este auge tambi¨¦n ha ayudado el hecho de que muchos colegios incluyan algunas de esas disciplinas en sus actividades extraescolares.

?scar Mart¨ªnez de Quel es profesor de la Facultad de Ciencias de la Actividad F¨ªsica y del Deporte-INEF de la Universidad Polit¨¦cnica de Madrid y campe¨®n del mundo de k¨¢rate en 2002 y 2006. Adem¨¢s, es cintur¨®n negro 6? Dan k¨¢rate, cintur¨®n negro 1? Dan judo y cintur¨®n negro 1? Dan Kickboxing. ?l tiene claro que la pr¨¢ctica de las artes marciales ¡°es beneficiosa para la educaci¨®n y la salud f¨ªsica y mental¡±. En 2021, Mart¨ªnez de Quel, junto a un equipo multidisciplinar, public¨® el art¨ªculo Efectos de una intervenci¨®n de karate en la escuela sobre el rendimiento acad¨¦mico, el funcionamiento psicosocial y la aptitud f¨ªsica: un ensayo controlado aleatorio por conglomerados de varios pa¨ªses. En su investigaci¨®n, publicada en la revista Journal of Sport and Health Science, introdujeron el k¨¢rate dentro del horario curricular de 20 colegios en cinco pa¨ªses europeos durante un a?o.

¡°Comprobamos que la pr¨¢ctica de este arte marcial mejor¨® la resistencia cardiorrespiratoria, el equilibrio y la flexibilidad¡±, explica este profesor sobre sus beneficios f¨ªsicos. A eso se a?ade que tambi¨¦n favorece el rendimiento acad¨¦mico y disminuye problemas de conducta, seg¨²n argumenta, especialmente en aquellos ni?os que inicialmente muestran mayores dificultades psicosociales y menor rendimiento acad¨¦mico: ¡°Pudimos verificar a nivel cient¨ªfico lo que hab¨ªamos sentido quienes practicamos artes marciales desde nuestra infancia: una mejora del cuerpo y la mente¡±.

Las mejoras observadas en la poblaci¨®n infantil, de siete a ocho a?os, que particip¨® en la investigaci¨®n se deben tanto al tipo de ejercicio f¨ªsico practicado como a los valores transmitidos, seg¨²n asegura Mart¨ªnez de Quel. El k¨¢rate, y las artes marciales en general, incluye ejercicios de equilibrio, respiraci¨®n, coordinaci¨®n de piernas y brazos, condici¨®n f¨ªsica (resistencia, potencia, flexibilidad) y reacci¨®n a est¨ªmulos variados. Adem¨¢s, se trabajan valores psicosociales como el respeto al maestro, el respeto al adversario, la disciplina y el autocontrol: ¡°La iniciaci¨®n a cualquier deporte de combate, desde la esgrima hasta el judo, empieza con un saludo para mostrar respeto al maestro y al adversario¡±.

Sara ?lvarez, actual directora deportiva de la Real Federaci¨®n de Judo y Deportes Asociados ¡ªAikido, Jiu-Jitsu, Wushu, Kendo y Defensa Personal¡ª, ha sido tambi¨¦n deportista ol¨ªmpica. Particip¨® en tres Juegos Ol¨ªmpicos entre los a?os 1996 y 2004, y gan¨® tres medallas en el Campeonato Mundial de Judo entre los a?os 1997 y 2001 y cinco medallas en el Campeonato Europeo de Judo entre los a?os 1998 y 2004. Ella empez¨® a practicar judo desde muy peque?a, un deporte que compaginaba con balonmano o nataci¨®n. Sin embargo, al final, ¡°el judo estuvo por delante de las dem¨¢s actividades extraescolares¡±. Para esta deportista de ¨¦lite la clave del ¨¦xito del judo entre la poblaci¨®n infantil se encuentra en que es un arte marcial que se puede empezar a practicar con ni?os de cuatro o cinco a?os: ¡°A estas edades se inician dej¨¢ndose caer y proyectando a sus compa?eros de entrenamiento sin riesgo y sin peligro. Este ejercicio, para ni?os que todav¨ªa no comprenden la necesidad de controlar lo que est¨¢n practicando, es muy ¨²til¡±.

La implementaci¨®n de este tipo de disciplinas tiene que hacerse a trav¨¦s del juego. ¡°Un buen profesor de judo debe hacer que las clases sean divertidas e incluir el componente de orientaci¨®n en el espacio, de agilidad y de juego como parte de su metodolog¨ªa¡±, incide ?lvarez. Una vez en la clase, adem¨¢s de fomentar el juego, el disfrute y el aprendizaje, hay que aproximarse gradualmente hacia el combate para superar el miedo: ¡°En todo momento se debe maximizar la seguridad de cada deportista mediante normas y protecciones que garanticen una pr¨¢ctica segura: tatami en el suelo para protegernos ante ca¨ªdas y protecciones en pies y manos en los deportes de golpeo, entre otras medidas¡±.

Mayoritariamente, los ni?os y ni?as se ejercitan en las artes marciales en los centros educativos. ¡°El judo est¨¢ muy extendido como actividad extraescolar. Hay un porcentaje alt¨ªsimo de ni?os que empiezan en la escuela, aproximadamente un 70%. Otros lo hacen en gimnasios y centros deportivos por proximidad geogr¨¢fica o familiar. Pasada una edad, todos los que siguen, lo hacen asistiendo a lugares espec¨ªficos porque el colegio se acaba y el que se vuelve adicto al judo contin¨²a¡±, explica la directora deportiva de la Real Federaci¨®n de Judo y Deportes Asociados.

¡°Para aproximar a los m¨¢s peque?os a practicar este tipo de deportes es conveniente hacerlo no solo en un contexto l¨²dico, sino tambi¨¦n respetando unas reglas y desarrollando el autocontrol¡±, retoma Mart¨ªnez de Quel. Para acercarles m¨¢s a estos deportes, prosigue, ¡°se pueden aprovechar las circunstancias de nuestro entorno en un momento dado: una competici¨®n deportiva, una serie de televisi¨®n (Cobra Kai), una pel¨ªcula (Karate Kid) o una exhibici¨®n de un club cercano, para ver a otros ni?os y ni?as practicarlo¡±.

Si el menor decide practicar cualquiera de los deportes que forman parte de las artes marciales, lo fundamental es que lo imparta un buen profesional. ¡°Como m¨ªnimo debemos exigir que tenga la titulaci¨®n adecuada de entrenador y no solo el cintur¨®n negro, para tener mayor garant¨ªa de los conocimientos pedag¨®gicos necesarios¡±, sostiene este experto. En ese sentido, en Espa?a se recomienda su pr¨¢ctica en clubes afiliados a federaciones reconocidas por el Consejo Superior de Deportes, cuyo trabajo est¨¢ regulado oficialmente: ¡°A partir de ah¨ª, debemos asegurarnos de que nuestros objetivos educativos y deportivos est¨¢n en l¨ªnea con los trabajados en esos entrenamientos¡±.

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