?Por qu¨¦ los ni?os no se cansan de ver la misma pel¨ªcula y escuchar el mismo cuento?

Los padres saben lo que es conocer de memoria un cuento o una pel¨ªcula que su hijo ve o escucha una y otra vez. ?Por qu¨¦ los ni?os no se cansan de ese bucle repetitivo? ¡°El cerebro de un ni?o est¨¢ en desarrollo y no funciona igual que el de un adulto. Necesita previsibilidad y repetici¨®n para aprender, experimentar y crecer. Por ello, lo conocido le resulta c¨®modo y le aporta seguridad. Le ayuda a ordenar la gran cantidad de est¨ªmulos nuevos que recibe cada d¨ªa y que tiene que procesar¡±, explica Gema L¨®pez, psic¨®loga general sanitaria especialista en infancia y familia. ¡°El cerebro infantil va interiorizando y consolidando conocimiento a trav¨¦s de la imitaci¨®n, la repetici¨®n y de ver sus logros reflejados en el espejo de sus padres. Las rutinas conocidas les hacen sentir protegidos, calmados, c¨®modos y seguros para seguir experimentando, explorando y aprendiendo del mundo que les rodea¡±, prosigue la explicaci¨®n.

Al cerebro infantil le gusta que las cosas sean predecibles. ¡°Para los ni?os es un proceso m¨¢s sencillo, que les permite concentrarse m¨¢s y mejor. Por ejemplo, es habitual que si les cambias una parte del cuento o canci¨®n que conocen, te se?alen c¨®mo era. De forma que, si en la historia siempre aparece un caballo blanco y les hablas de una cebra, te dir¨¢n: ¡®Un caballo, mam¨¢, un caballo¡±, ejemplifica la experta. ¡°Escuchar siempre el mismo cuento, la misma canci¨®n o ver la misma pel¨ªcula, les permite darse cuenta de m¨¢s matices o captar nuevos detalles e informaci¨®n, algo que favorece el aprendizaje¡±, a?ade L¨®pez.

Ver una y otra vez una pel¨ªcula, escuchar un cuento o repetir el mismo juego les ayuda a vincularse emocionalmente con la historia. ¡°Cuanto m¨¢s lo conocen, m¨¢s disfrutan, porque se genera una conexi¨®n emocional profunda. Por ejemplo, es habitual ver que sonr¨ªen antes de que llegue una escena conocida, porque les gusta anticipar y revivir lo que va a pasar¡±, asegura la experta.

Los peque?os comprenden mejor el mundo de esta forma. ¡°La tem¨¢tica de determinados contenidos o juegos les sirve de explicaci¨®n y el hecho de revivirlo les facilita experimentarlo a trav¨¦s de los personajes de la historia, lo que les ayuda a saber c¨®mo actuar o resolver situaciones¡±, explica por su parte Bel¨¦n Robles, socia fundadora del centro de psicolog¨ªa e inteligencia emocional Escuela Afectiva, situado en Madrid. Esta experta menciona otros beneficios de la afici¨®n de los ni?os por las reiteraciones: ¡°Les ayuda al desarrollo del lenguaje y la escritura, por lo que lejos de preocuparse, conviene facilitar este tipo de comportamiento¡±.

La organizaci¨®n del pensamiento o el desarrollo de la memoria tambi¨¦n se ven favorecidos por la reiteraci¨®n de los contenidos: ¡°Se ordena la capacidad l¨®gica y temporal, porque les ayuda a comprender con mayor profundidad¡±, contin¨²a L¨®pez, que tambi¨¦n destaca la importancia de que exista un equilibrio entre la novedad y la repetici¨®n: ¡°Lo primero se trata de la ventana a la curiosidad y con lo segundo se consigue la consolidaci¨®n de lo aprendido¡±.

El gusto por la repetici¨®n de los contenidos es habitual hasta los 10 a?os, salvando las individualidades de cada peque?o. ¡°A partir de esa edad, la motivaci¨®n cambia y se ampl¨ªa en funci¨®n de sus gustos y aficiones. Pero lo importante es observarles para comprender qu¨¦ necesidad subyace en los patrones repetitivos, como, quiz¨¢s, buscar la seguridad en una situaci¨®n de mucho cambio¡±, contin¨²a la psic¨®loga.

As¨ª que la b¨²squeda del consumo de la reiteraci¨®n en la infancia no debe ser motivo de preocupaci¨®n. ¡°Se trata de una cuesti¨®n evolutiva muy com¨²n, incluso desde que son beb¨¦s, con juegos como el cucutr¨¢s. Pero cuando son m¨¢s mayores (a partir de los seis a?os) y buscan ver lo mismo una y otra vez en una pantalla, conviene tener cuidado con que est¨¦ generando una adicci¨®n a trav¨¦s de los contenidos en el m¨®vil o la televisi¨®n¡±, advierte Robles.

No obstante, es recomendable dosificar la cantidad de contenidos que tienen para repetir. ¡°Conviene que no tengan muchos cuentos, por ejemplo, sino que se adquieran paulatinamente, para que puedan ir leyendo varias veces lo que les gusta, ya que si hay una gran cantidad de est¨ªmulos, al final, es m¨¢s dif¨ªcil fijar la atenci¨®n¡±, aclara la especialista. Asimismo, tambi¨¦n es aconsejable que los adultos introduzcan poco a poco detalles que aporten flexibilidad a la estructura reiterativa que le gusta al ni?o: ¡°Por ejemplo, un cambio en el cuento o el juego, pero respetando la estructura repetitiva que prefieren¡±, a?ade la experta. Aunque este comportamiento infantil entra dentro de la normalidad por formar parte de su desarrollo evolutivo, hay ciertos aspectos que pueden apuntar a conductas desajustadas, como en el caso que apunta Robles: ¡°Cuando hay una actitud muy r¨ªgida por la excesiva necesidad de control, aunque en este caso, tambi¨¦n se reflejar¨ªa en otros aspectos, como el orden obsesivo de objetos. En estos casos, habr¨ªa que averiguar la raz¨®n de esa situaci¨®n¡±.