Expertos holandeses revelan el secreto para lograr que los ni?os coman verduras

A muchos ni?os no le gustan las verduras, sobre todo a los m¨¢s peque?os. Y esto puede ser un quebradero de cabeza para muchos padres y madres. Pero un ¨²ltimo estudio, publicado en Holanda, puede tener la soluci¨®n. La investigaci¨®n revela el secreto para que los m¨¢s peques se acostumbren a su textura o sabor y, al final, este alimento tan necesario en nuestra dieta se convierta en algo habitual, e incluso que les guste.

¡°Es importante que los ni?os coman verduras desde muy peque?os¡±, afirma en un comunicado Britt van Belkom, autora principal del estudio y que trabaja el Programa Juventud, Alimentaci¨®n y Salud del Instituto de Alimentaci¨®n, Salud y Seguridad de la Universidad de Maastricht, en Holanda. ¡°Sabemos de investigaciones anteriores¡±, prosigue la experta, ¡°que normalmente los ni?os han probado de ocho a 10 tipos distintos de verduras antes de que les gusten¡±. Con esta premisa, la pregunta que se hicieron los expertos fue si pedirles repetidamente que prueben algunas verduras los hace m¨¢s dispuestos a comerlas: ¡°Tambi¨¦n nos interesaba saber si proporcionar una recompensa divertida marcar¨ªa la diferencia¡±, a?ade.

La investigaci¨®n, denominada Vegetables Box Program [Programa Caja de Verduras, por su traducci¨®n al espa?ol], incluy¨® a 600 ni?os y ni?as entre uno y cuatro a?os, que asist¨ªan a guarder¨ªas en Limburgo, Holanda. La muestra se dividi¨® en tres grupos: exposici¨®n-recompensa; exposici¨®n-no recompensa, y no exposici¨®n-no recompensa [este era el grupo control]. Los dos primeros grupos tuvieron la oportunidad de probar una gran variedad de verduras cada d¨ªa que acud¨ªan a su escuela infantil durante tres meses. Y los que eran parte de los grupos de recompensa recibieron, adem¨¢s, un premio no comestible, como una pegatina o una corona de papel, cuando probaban una verdura nueva. El estudio se present¨® a principio de mayo en el Congreso Europeo sobre Obesidad, que se hizo en Maastricht, Pa¨ªses Bajos.

Al final del estudio, los menores hab¨ªan probado hasta 14 verduras distintas [tomate; lechuga; calabac¨ªn; zanahoria; pimiento; cebolla; br¨®coli; guisantes; coliflor; champi?ones; jud¨ªas verdes; achicoria; calabaza, y esp¨¢rragos]. El consumo se midi¨® d¨¢ndoles la oportunidad de probar trozos peque?os de seis verduras (tomate, pepino, zanahoria, pimiento, r¨¢banos y coliflor) y contando cu¨¢ntos estaban dispuestos a probar.

En los grupos de exposici¨®n con y sin recompensa, los ni?os identificaron nueve verduras al comienzo del estudio, y terminaron conociendo 11, en el caso del grupo control, estos detectaron de ocho a 10. Al comienzo de la investigaci¨®n los ni?os de los tres grupos estaban animados a probar cinco o seis verduras, cuando acab¨® este n¨²mero disminuy¨® en el grupo de control, permaneci¨® igual en el grupo de exposici¨®n-sin recompensa y aument¨® a siete en el grupo de exposici¨®n-recompensa.

Estos resultados indican que ofrecer verduras con regularidad a los ni?os peque?os en las escuelas infantiles incrementa su capacidad de reconocerlas, seg¨²n informa van Belkom. Y darles alg¨²n premio tambi¨¦n favorece esto: ¡°Eso s¨ª, es importante que esta recompensa sea algo divertido y no comida¡±. ¡°Efectivamente, por mi experiencia personal, ni la recompensa tipo oral, con frases como ¡°eres campe¨®n¡±, ni las alimenticias son una buena estrategia para que un ni?o coma verdura¡±, a?ade Gemma Bes, nutricionista que adem¨¢s es la encargada de la alimentaci¨®n de Rafa Nadal y de lo que comen en la Rafa Nadal Academy. ¡°Lo que he observado que funciona es cuando en un papel, delante del ni?o, a?adimos una figurita adhesiva, entonces el peque?o tiene una actitud m¨¢s positiva en probar una verdura. De todas formas, no soy muy partidaria de recompensar continuamente, si de forma ocasional como un juego¡±.

M¨¢s atractivo el plato, m¨¢s verduras come el ni?o

¡°Los cinco sentidos son muy relevantes y hay que tenerlos en cuenta en la cocina y en la presentaci¨®n de los platos. Los ni?os tienen muy buen paladar. Las verduras hay que tenerlas en cuenta en la comida y cena por sus propiedades nutricionales¡±, agrega Bes. ¡°Por ejemplo¡±, explica la experta, ¡°mi fuente de inspiraci¨®n siempre han sido los platos asi¨¢ticos, aunque en Italia tambi¨¦n las cocinan de manera divertida, deliciosa y est¨¦tica¡±. En el caso de que a los ni?os les cueste comer verduras, ¡°no les tenemos que poner un plato de jud¨ªas verdes con patata, porque fracasaremos. Les serviremos un plato que sepamos que les gusta, como pasta. Por ejemplo: pasta con pesto y verduras salteadas al dente. Otros ejemplos pueden ser: un curry de verduras al dente (importante la textura) y arroz basmati o una hamburguesa de salm¨®n y verduras con pur¨¦ de patatas¡±.

La manera de cocinar las verduras tambi¨¦n influir¨¢ en el ¨¦xito de nuestro plato. ¡°Las verduras hervidas no son una buena idea, de nuevo es una textura poco interesante, a los peques les suele gustar sentir c¨®mo crujen. As¨ª, unas buenas opciones pueden ser hacerlas al vapor, salteadas al wok o al horno¡±, subraya la experta. Adem¨¢s, seg¨²n explica, es muy recomendable cocinar con nuestros hijos y que juntos decoremos los platos o preparemos salsas para ali?ar los platos de verduras: ¡°Siempre digo: Hoy no me gusta, ma?ana tampoco, pero al mes s¨ª. Con esto quiero decir que hay que seguir intentando y experimentando¡±.

No podemos olvidar que las verduras deber¨ªan ser la base de nuestra alimentaci¨®n por sus cualidades nutricionales: ¡°Las verduras, las hortalizas o las frutas deber¨ªan ser prioritarias porque son alimentos que est¨¢n relacionados con la prevenci¨®n de muchas enfermedades y con una mejor calidad de vida¡±. Por ¨²ltimo, la experta sostiene que cada una de las comidas, sobre todo, comida y cena, deber¨ªa estar formada en gran parte por estos nutritivos alimentos. ¡°En concreto, lo ideal ser¨ªa llenar la mitad del plato de hortalizas y a?adir un cuarto de prote¨ªna de calidad (pescado azul peque?o, huevos, carne de pasto¡­) y otro cuarto de hidratos de carbono (tub¨¦rculos o cereales de absorci¨®n lenta). De esta manera, obtendremos m¨¢s riqueza nutricional con la variedad de colores. Y siempre elegir verduras de temporada y de proximidad¡±, concluye.

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