El crimen de Plaza Artz: La G¨¹era, la mafia israel¨ª y el rastro del Cartel Jalisco en Ciudad de M¨¦xico

Era julio de 2019. En un restaurante de una zona lujosa del sur de la capital, una mujer con peluca y un hombre se levantaban de una mesa con el temple de unos sicarios entrenados y acribillaban de 16 tiros a dos israel¨ªes ante el espanto de decenas de comensales. En ese momento se inici¨® la guerra que ha vivido la capital durante meses despu¨¦s. Hasta esa fecha, los balazos del Cartel Jalisco sonaban todav¨ªa lejos y la capital libraba batallas entre c¨¢rteles locales, algunos financiados por los grandes, pero ninguno con la capacidad de fuerza y falta de pavor suficiente como para amenazar al Estado. El 24 de julio de ese a?o todo cambi¨®. Y el macabro doble asesinato a sangre fr¨ªa orquestado por el narco m¨¢s poderoso de M¨¦xico, el Cartel Jalisco Nueva Generaci¨®n, reventaba las fr¨¢giles costuras del mapa criminal que hab¨ªan mantenido alejada a la capital de la guerra. Los del Mencho hab¨ªan irrumpido en una plaza sagrada, en el coraz¨®n del pa¨ªs.

Esta semana, una informaci¨®n del peri¨®dico Reforma desvelaba la forma en la que aquel grupo de sicarios enviados por los hombres de Nemesio Oseguera Cervantes, alias El Mencho, l¨ªder del Cartel Jalisco, se organizaron por un grupo de WhatsApp llamado La Chamba para asesinar a Benjam¨ªn Sutchi, de 44 a?os, y Alon Azoulay, de 41. El atentado contra los israel¨ªes supuso el primer gran golpe del cartel en la capital y desencaden¨® la lucha que enfrent¨® meses despu¨¦s al jefe de la polic¨ªa de la capital, Omar Garc¨ªa Harfuch, con los sicarios de El Mencho dentro y fuera de la capital. El segundo gran golpe y el m¨¢s contundente del narco fue el intento de asesinato del polic¨ªa en junio de 2020. Fusiles de alto calibre y decenas de agujeros de bala en la camioneta de Harfuch, en la avenida emblem¨¢tica de la capital, el Paseo de la Reforma. Una amenaza directa no solo al responsable de la seguridad de la capital, sino al Estado mexicano.

La tarde del 24 de julio de 2019, Vanessa Ballar, La G¨¹era, fung¨ªa como anzuelo de los dos israel¨ªes, que se sentaron con ella en la misma mesa para tratar un tema de lavado de dinero en un restaurante de comida china en la lujosa colonia de El Pedregal, al sur de la ciudad. Las autoridades dieron a conocer la identidad de Sutchi, uno de los dos asesinados. Hab¨ªa sido detenido en la capital en 2005 por una ficha de la Interpol y extraditado a su pa¨ªs, donde cumpli¨® 14 a?os de condena por homicidio. Hac¨ªa solo unas semanas que hab¨ªa regresado a M¨¦xico y hab¨ªa retomado sus relaciones con el crimen local. Azoulay era, seg¨²n la informaci¨®n oficial, su asistente.

Las pesquisas policiales concluyeron que se trat¨® de una presunta traici¨®n de los de Jalisco a los israel¨ªes, con los que colaboraba. La G¨¹era, detenida en marzo pasado por la polic¨ªa de la capital por el doble homicidio y vinculada a la c¨¦lula de los de Jalisco en la capital, huy¨® ese d¨ªa a la cocina del restaurante unos segundos antes de que fueran acribillados a balazos sus acompa?antes. La G¨¹era ha sido la ¨²ltima captura del rastro que han seguido los hombres de Harfuch para desmontar la red criminal del Mencho en la capital.

En los mensajes de WhatsApp se lee c¨®mo un grupo de unos siete sicarios y colaboradores, algunos enviados desde Jalisco, se organizaron para recoger las armas en una taquer¨ªa. Dos de ellos, Esperanza N. y Mauricio Hiram P¨¦rez, alias El Mawicho o El Mauri, se sentaron de espaldas a las v¨ªctimas en una mesa del restaurante. ¡°Ah¨ª mero, ap¨¢¡±, le indica un tal El Barbas a Mauricio por mensajes. Fuera esperaban otros sicarios que deb¨ªan dejar el camino libre para su fuga. En cuesti¨®n de segundos, los dos criminales se levantaron de su mesa y se dirigieron directamente contra los israel¨ªes y les descerrajaron 16 tiros. La ¨²nica detenida ese d¨ªa fue Esperanza, que en la huida olvid¨® una peluca en la salida del restaurante. En ese momento comenz¨® la rocambolesca historia del crimen de Artz, donde la presunta criminal se?al¨® en un primer momento que se hab¨ªa tratado de un tema de celos; luego, que hab¨ªa recibido 5.000 pesos por apretar el gatillo, m¨¢s otros 25.000 que le hab¨ªan prometido al terminar el trabajo. Unos meses despu¨¦s, el Cartel Jalisco apareci¨® en la mira de las autoridades.

Harfuch aterriz¨® como jefe de la polic¨ªa de Ciudad de M¨¦xico en octubre de 2019. Su equipo de polic¨ªas de investigaci¨®n ¡ªque se formaron en la Agencia de Investigaci¨®n Criminal del Gobierno de Enrique Pe?a Nieto (de 2012 a 2018)¡ª lleg¨® a la capital con la promesa de reprimir el terror del crimen organizado cuya estela de homicidios hab¨ªan puesto a temblar los primeros meses de Gobierno de Claudia Sheinbaum, de Morena (el mismo partido que el Gobierno federal). La mano dura que caracterizaba a los de Harfuch, con estrategias policiales m¨¢s propias de la guerra contra el narco a nivel nacional, irrump¨ªa con fuerza en una ciudad donde la lucha contra el crimen organizado se observaba solo en las noticias, en las cruentas batallas en el norte o en los pueblos asediados de Michoac¨¢n.

Pocos meses antes de su toma de posesi¨®n, sorprendieron en la capital algunos operativos liderados por Harfuch, cuando todav¨ªa estaba en la Agencia de Investigaci¨®n Criminal, en los que empezaban a caer cabecillas del narco local hasta el momento desconocidos: El Tortas y El Jam¨®n, presuntos cabecillas del cartel Antiuni¨®n (contrario al poderoso Uni¨®n de Tepito que controlaba la capital); Aldo Jes¨²s Azcona Cort¨¦s, El Enano o El Chucky. Todos ellos, presuntos colaboradores de los de Jalisco en la ciudad.

Un mes antes de tomar el cargo, Harfuch organiz¨® un operativo in¨¦dito a cientos de kil¨®metros, en Zapopan (Jalisco), en la zona metropolitana de Guadalajara. Acompa?ados por el Ej¨¦rcito, deten¨ªan en uno de los bastiones por excelencia del narco m¨¢s poderoso de M¨¦xico a uno de los dos gatilleros de Plaza Artz, El Mawicho. El presunto criminal declar¨® haber sido enviado por el narco para matar a los israel¨ªes a cambio de 100.000 pesos. A partir de entonces, la guerra contra el Cartel Jalisco por parte del jefe de la polic¨ªa de la ciudad se hizo evidente.

El crimen de Artz les dio un hilo del que tirar para desmantelar la red criminal de los de Jalisco en la ciudad. Uno de los presuntos jefes de sicarios y reclutadores m¨¢s importantes del Cartel Jalisco en la capital, Carlos Fernando Huerta N¨²?ez, El Viej¨®n, fue detenido en febrero de 2020. Las autoridades lo presentaron como el organizador del atentado en la plaza comercial. Al tiempo, el Gobierno federal asestaba otro golpe al h¨ªgado del Cartel Jalisco: la extradici¨®n de Rub¨¦n Oseguera, alias El Menchito, el hijo de El Mencho. Y a principios de junio, el bloqueo de cuentas en una operaci¨®n conjunta con la DEA, que congelaba 1.939 cuentas bancarias donde hab¨ªan detectado movimientos de m¨¢s de 900 millones de d¨®lares.

A partir de ese momento, comenzaron a llegar amenazas de los de Jalisco a altos funcionarios de Gobierno. Unos meses despu¨¦s, el atentado contra Harfuch en junio pon¨ªa de manifiesto la fragilidad del Estado ante el poder del narco, que se hab¨ªa atrevido a perpetrar un ataque de esas dimensiones en la capital del pa¨ªs, hasta el momento un lugar sagrado para las luchas intestinas del narco.

Unos d¨ªas despu¨¦s del ataque contra el jefe de la polic¨ªa de la capital, fue detenido Jos¨¦ Armando Brise?o, alias La Vaca. Otro sospechoso jefe de sicarios del Cartel Jalisco en la capital y autor intelectual del atentado contra Harfuch. Seg¨²n los informes de inteligencia, Brise?o hab¨ªa enrolado a pistoleros a la organizaci¨®n criminal y los hab¨ªa entrenado para las ejecuciones. La polic¨ªa descubri¨® adem¨¢s que La Vaca hab¨ªa estado tambi¨¦n involucrado en el atentado de Plaza Artz, pues ¨¦l hab¨ªa reclutado a los sicarios que organizaron el doble crimen contra los israel¨ªes en julio de 2019.

Las ¨²ltimas pesquisas sobre el ataque en Plaza Artz, la detenci¨®n de La G¨¹era y c¨®mo se organizaron para perpetrar un ataque contra la mafia israel¨ª ponen de manifiesto la batalla de la capital para impedir que los de Jalisco se hagan con el control de la ciudad. Una estrategia policial que enfrenta a la Ciudad de M¨¦xico con uno de los peores males de M¨¦xico, el terror del narco que no da tregua en ning¨²n rinc¨®n del pa¨ªs y que lo sacude desde hace a?os con las peores cifras de homicidios de su historia.

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