Radiograf¨ªa de la crisis en M¨¦xico: el 90% de los hogares tiene menores ingresos a causa de la pandemia

M¨¦xico ya tiene su radiograf¨ªa del impacto econ¨®mico de la pandemia. Los hogares ingresaron y gastaron en 2020 un 6% y un 13% menos, respectivamente, que en 2018, ha revelado este mi¨¦rcoles la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares, la fotograf¨ªa m¨¢s detallada hasta la fecha de c¨®mo se vivi¨® la crisis de puertas adentro. La desigualdad se redujo a costa de p¨¦rdidas de ingreso importantes en el 90% de la poblaci¨®n. El aumento de las transferencias del Gobierno no bast¨® para compensar la ca¨ªda salarial. Geogr¨¢ficamente, las ciudades y los Estados m¨¢s volcados al sector servicios fueron los que cargaron con el peso del golpe.

Los datos macroecon¨®micos de un 2020 fat¨ªdico ya se conoc¨ªan: el desplome del 8,5% en el PIB y la destrucci¨®n de 12 millones de empleos. La nueva encuesta, que realiza el Instituto Nacional de Estad¨ªstica y Geograf¨ªa (Inegi) cada dos a?os, permite llevar ahora el an¨¢lisis a pie de calle y adentrarse en los hogares. El ingreso pas¨® de 53.418 pesos trimestrales a 50.309. La reducci¨®n se debe principalmente a la p¨¦rdida de empleo y de salarios, que representan el 64% de los ingresos regulares y cayeron casi un 11% respecto a 2018.

Frente a esta ca¨ªda, las transferencias gubernamentales, que representan alrededor del 17% de los ingresos familiares, aumentaron un 8,3% hasta los 8.871 pesos trimestrales y llegaron al 30% de hogares. Detr¨¢s de este aumento, hay un incremento del 50% en los beneficios sociales y de un 15% en las jubilaciones y pensiones. Estas ayudas amortiguaron el impacto, pero no alcanzaron para llenar el vac¨ªo dejado por los salarios. ¡°El aumento de las transferencias fue insuficiente para compensar la ca¨ªda del los ingresos del trabajo¡±, ha se?alado este mi¨¦rcoles el economista Julio Santaella, presidente del Inegi. Toda una llamada de atenci¨®n para el Gobierno de Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, cuya respuesta a la crisis se limit¨® a mantener los programas que ya exist¨ªan sin ofrecer mayores est¨ªmulos fiscales.

Pese a la parquedad de los apoyos, la recesi¨®n ha limado la brecha socioecon¨®mica en un pa¨ªs donde el 1% m¨¢s rico concentraba el 29% del ingreso antes de la pandemia. El 10% m¨¢s pobre tuvo ingresos de 110 pesos diarios, un aumento marginal del 1,3% respecto a 2018, mientras el 10% m¨¢s acomodado, con 1.814 pesos diarios, registr¨® una disminuci¨®n del 9%. La diferencia entre la punta y la base de la pir¨¢mide sigue siendo abismal; los ingresos de los m¨¢s ricos pasaron de ser 18 veces superiores a los de los m¨¢s pobres en 2018 a 16 veces.

La modesta mejora entre los m¨¢s desfavorecidos no es un logro del Gobierno, opina el economista Rodolfo de la Torre, del Centro de Estudios Espinosa Yglesias. ¡°Hay serias dudas respecto a la efectividad de los programas sociales. El 30% de la poblaci¨®n m¨¢s rica recibi¨® m¨¢s beneficios que los m¨¢s pobres¡±, apunta. En cambio, De la Torre atribuye la evoluci¨®n al tipo de confinamiento que hubo: ¡°Las actividades que estuvieron detenidas m¨¢s tiempo fueron las de zonas urbanas. En las rurales el sector agr¨ªcola no se detuvo. Eso pudo impulsar el ingreso de las personas m¨¢s pobres¡±.

Precisamente, las cifras muestran los contornos geogr¨¢ficos de la crisis: eminentemente urbana y ubicada en el centro y sur del pa¨ªs. En las ciudades los ingresos disminuyeron un 8%, mientras que en el ¨¢mbito rural aumentaron un 3,6%. Las regiones m¨¢s golpeadas fueron aquellas con un mayor peso del sector servicios, el m¨¢s afectado por el confinamiento impuesto a inicios de la crisis. Los ingresos trimestrales promedio en el tur¨ªstico Quintana Roo se desplomaron un 23% y los de Ciudad de M¨¦xico, un 20,5%. En contraste, los Estados industriales del norte del pa¨ªs tuvieron una ca¨ªda mucho menor, del 1,3% en Nuevo Le¨®n e incluso un aumento del 4% en el vecino Chihuahua. El sector exportador es que el que m¨¢s r¨¢pidamente se ha recuperado gracias a la reactivaci¨®n estadounidense.

Los ingresos menguantes llevaron a gastar menos -de 34.329 pesos trimestrales en 2018 a 29.919 en 2020-, pero tambi¨¦n diferente. Con el cierre de las escuelas y la propagaci¨®n del teletrabajo, los hogares dedicaron un 45% menos recursos a educaci¨®n y esparcimiento y un 19% menos a transporte y comunicaci¨®n. Por otro lado, el gasto en salud subi¨® un 40,5%. La pandemia y el confinamiento tambi¨¦n se tradujeron en cambios en los h¨¢bitos de alimentaci¨®n. El gasto en productos consumidos dentro de casa aument¨® un 10%, mientras el de los alimentos en el exterior cay¨® un 43%.

El impacto de la pandemia es una fotograf¨ªa en movimiento. Tras la ca¨ªda hist¨®rica del PIB el a?o pasado, la peor desde los a?os treinta, M¨¦xico da signos de recuperaci¨®n. Con el avance de la vacunaci¨®n y el tir¨®n de las exportaciones a Estados Unidos, organismos nacionales e internacionales han revisado al alza sus pron¨®sticos de crecimiento para este a?o. El FMI se?al¨® esta semana que prev¨¦ que el pa¨ªs crezca un 6,3%, frente a su pron¨®stico anterior del 5%. Sin embargo, persisten las inquietudes sobre la calidad de la recuperaci¨®n. Aunque junio registr¨® medio mill¨®n de empleos m¨¢s que hace un a?o, el trabajo informal aument¨® del 56% al 59%, al igual que el n¨²mero de horas trabajadas.

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