M¨¦xico y EE UU buscan modernizar la frontera en una antigua mesa de negociaci¨®n suspendida por Trump

La reuni¨®n de este jueves en Washington es una prueba m¨¢s de la nueva sinton¨ªa entre las Administraciones de EE UU y M¨¦xico. El llamado di¨¢logo econ¨®mico de alto nivel (DEAN), que incluye la presencia varios secretarios (ministros) adem¨¢s de las respectivas canciller¨ªas y la vicepresidencia de EE UU, no se produc¨ªa desde 2016, antes de la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca. Una reciente conversaci¨®n directa entre Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador y Joe Biden resucit¨® esta mesa de negociaci¨®n pol¨ªtica cuyo principal objetivo es funcionar como puente paralelo a los encuentros t¨¦cnicos para el seguimiento del Tratado de Libre Comercio (T-MEC). El cambio de tono en la relaci¨®n bilateral se percibe incluso en el lenguaje. Frente a la confrontaci¨®n y las amenazas que marcaron la etapa anterior, los t¨ªtulos de los bloques de negociaci¨®n son ahora tan elocuentes como ¡°Construir juntos¡± o ¡°Invertir en nuestra gente¡±, seg¨²n reza un comunicado de la Casa Blanca sobre la reuni¨®n.

M¨¢s all¨¢ de la escenificaci¨®n de una nueva cordialidad, en la agenda hay asuntos espinosos como la reapertura por tierra de la frontera, que lleva cerrada m¨¢s de un a?o salvo para residentes o casos especiales por la crisis de la covid-19. Una demanda insistente desde la delegaci¨®n mexicana durante los ¨²ltimos encuentro bilaterales. ¡°El objetivo estrat¨¦gico es acelerar las inversiones, el movimiento econ¨®mico y el bienestar. Vamos a tratar temas como la infraestructura en la frontera. Tenemos que hacer que se cierre la diferencia entre uno y otro lado y se pueda facilitar el tr¨¢nsito de comercio y personas¡±, reconoci¨® este mi¨¦rcoles el canciller mexicano Marcelo Ebrard ya desde Washington.

La modernizaci¨®n de la frontera es una de las cuestiones pendientes desde las ¨²ltimas reuniones de este tipo entre Barack Obama y Enrique Pe?a Nieto. Ya entonces se hablaba de un plan conjunto p¨²blico y privado destinado a agilizar los cruces comerciales. El antiguo jefe del equipo t¨¦cnico mexicano de negociaci¨®n del tratado para Am¨¦rica del norte, Kenneth Smith Ramos, explica a EL PA?S que ¡°este tipo de encuentros sirven para apuntalar lo ya establecido en el T-MEC sobre reducci¨®n de burocracia a trav¨¦s de inversi¨®n en tecnolog¨ªa y mejoramiento de las aduanas y el resto de log¨ªstica¡±.

La llamada frontera sur, de M¨¦xico con Guatemala, ser¨¢ otro de los focos de la negociaci¨®n en un contexto de fuerte crecida del flujo de migrantes y tras el reciente fallo judicial que obliga de nuevo a los solicitantes de asilo en EE UU a esperar respuesta en las ciudades fronterizas mexicanas. Ebrard incidi¨® este mi¨¦rcoles en el plan conjunto para abordar las causas estructurales de la migraci¨®n en los pa¨ªses de origen: ¡°Tiene que haber inversiones para que las personas no migren por razones de pobreza y seguridad¡±.

Desde las primeras reuniones diplom¨¢ticas, la vicepresidente Kamala Harris ha dejado claro la voluntad de Estados Unidos de trabajar de forma ¡°bilateral¡± con M¨¦xico y ¡°multilateral¡± junto al resto de pa¨ªses afectados para tratar de solucionar los motivos de la migraci¨®n procedente de Centroam¨¦rica. Washington ha decidido impulsar un plan para invertir hasta 4.000 millones en cuatro a?os en la regi¨®n, pero a la vez ha advertido de que la financiaci¨®n queda supeditada a la lucha contra la corrupci¨®n.

¡°Por primera vez hay una apuesta decidida en este sentido. Durante a?os se plante¨® a EE UU que liderara una especie de fondos de estabilizaci¨®n parecidos a los de la Uni¨®n Europea para ayudar a la regi¨®n¡±, celebra Smith Ramos. La propuesta mexicana, en la que incidi¨® L¨®pez Obrador durante la ¨²ltima reuni¨®n de mayo, es la prolongaci¨®n de algunos de sus programas sociales en los pa¨ªses vecinos del sur. Un plan que pasa a su vez por la integraci¨®n de la otra gran apuesta mexicana, el proyecto de cooperaci¨®n y desarrollo anunciado en 2019 y auspiciado por la Comisi¨®n Econ¨®mica para Am¨¦rica Latina y el Caribe (CEPAL).

Bajando m¨¢s a lo concreto, Ebrard ha colocado entre las prioridades ¡°la movilidad el¨¦ctrica de la industria automotriz en M¨¦xico¡±. Otro complemento a las directrices del T-MEC, que buscan fortalecer las cadenas de valor en Am¨¦rica del Norte a trav¨¦s de fomentar los centros productivos regionales, sobre todo en sectores clave como el automotriz. Esta gran palanca econ¨®mica cuenta sin embargo con serios frentes abiertos entre ambos pa¨ªses. A finales de agosto, M¨¦xico logr¨® que el Gobierno canadiense se sumara a su solicitud para revisar la interpretaci¨®n de reglas de origen a productores de autos de Estados Unidos. Antes, en mayo, la secretar¨ªa de comercio denunci¨® abusos laborales y violaciones a los derechos de los trabajadores en dos plantas estadounidenses con sede en Guanajuato y Tamaulipas.

El conflicto est¨¢ ya en manos de uno de los mecanismos de resoluci¨®n establecidos por el T-MEC y amenaza con abrir una v¨ªa de agua en la relaci¨®n bilateral. ¡°La soluci¨®n del caso va a marcar el tono del desarrollo del tratado. Si se llega a un acuerdo antes de que falle el panel ser¨¢n buenas noticias. Si siguen entrando m¨¢s denuncias por parte de los sindicatos estadounidenses se puede complicar¡±, anticipa el antiguo jefe del equipo t¨¦cnico mexicano de negociaci¨®n del tratado.

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