M¨¦xico frente a ¨®micron: una radiograf¨ªa de la ola de contagios m¨¢s explosiva de la pandemia

?micron toc¨® la puerta de M¨¦xico desde finales del a?o pasado. El primer caso de la nueva variante en territorio mexicano fue detectado el 3 de diciembre. Para enero, el pa¨ªs ya estaba inmerso en una cuarta ola de contagios. Al igual que en el resto del mundo, el nuevo rostro de la pandemia dispar¨® los diagn¨®sticos positivos, hizo que la gente formara largas filas para aplicarse pruebas que les permitieran saber si ten¨ªan covid o una gripe y el sistema de salud ha afrontado nuevas presiones, con Estados que han superado el 70% de ocupaci¨®n hospitalaria.

En pleno pico de contagios y tras varios r¨¦cords superados, una radiograf¨ªa del paso de ¨®micron por el pa¨ªs arroja que la cuarta ola ha superado con creces a las anteriores en casos confirmados hasta multiplicarlos por 1,6 en su punto ¨¢lgido. Lo positivo ha sido que a las terapias intensivas solo ha entrado una cuarta parte de los pacientes que lo hicieron en el peor momento de 2021. Hay m¨¢s casos y suben m¨¢s r¨¢pido que en otros momentos de la pandemia, pero tienden a ser menos graves.

¡°De acuerdo con las tendencias en otros pa¨ªses, aunque las situaciones no son siempre equiparables, lo que podr¨ªamos esperar es que la variante ¨®micron siga subiendo intensamente en M¨¦xico todo el mes de enero¡±, se?ala Alejandro Mac¨ªas, zar de la pandemia de influenza AH1N1 en M¨¦xico. El epidemi¨®logo explica que hay zonas del pa¨ªs que entraron antes a este pico y es posible que empiecen a ver un declive antes tambi¨¦n. ¡°Esperar¨ªamos que febrero ya sea una etapa en la que empiecen a disminuir los casos en algunas regiones de M¨¦xico y que en marzo entr¨¢ramos a una meseta¡±, comenta Mac¨ªas, aunque matiza que para que eso pase es necesario que la poblaci¨®n se siga vacunando.

El especialista advierte, sin embargo, de que el hecho de que no se hayan saturado los hospitales como en olas anteriores ¡°no debe darnos un falso sentimiento de tranquilidad¡±. ¡°Recordemos que los hospitales y las terapias intensivas no se saturan al mismo momento en que se incrementan los casos¡±, dice Mac¨ªas, que cita el ejemplo de Sud¨¢frica, donde se identific¨® ¨®micron por primera vez en noviembre pasado y donde el n¨²mero de pacientes internados subi¨®, incluso cuando los casos en general empezaron a bajar. ¡°Ah¨ª, el n¨²mero total de casos sigue incrementando la ocupaci¨®n total de los hospitales e, inclusive el n¨²mero de muertos, y es algo que se est¨¢ viendo tambi¨¦n en la mayor¨ªa de los Estados de EE UU¡±, se?ala el especialista sobre uno de los posibles escenarios. En los ¨²ltimos d¨ªas, las defunciones en el pa¨ªs rondaban las 500 por d¨ªa frente a las 300 que se promediaban durante la semana pasada, a pesar de que la pandemia se ha desacelerado en cuanto a contagios. M¨¦xico ha sumado 45.115 nuevos contagios y otras 437 muertes por covid-19, seg¨²n los datos publicados este viernes. La ocupaci¨®n promedio de camas generales en hospitales mexicanos est¨¢ en un 46% y la de terapia intensiva se sit¨²a en un 29%.

Hasta este momento, el pico de ¨®micron se est¨¢ desvelando como menos grave, no s¨®lo caso por caso, sino en su efecto agregado en comparaci¨®n con las olas que hubo en verano y a inicios del a?o pasado, cuando no hab¨ªa iniciado la vacunaci¨®n masiva. El m¨¦rito de este menor impacto empieza en las caracter¨ªsticas de la variante, pero termina en el muro inmunitario que se ha ido construyendo gracias a las vacunas, pero tambi¨¦n a contagios anteriores.

En lo que respecta a la naturaleza de ¨®micron, tan significativa como la diferencia entre casos y entradas en UCI es la que existe entre la entrada en cuidados intensivos y la intubaci¨®n, que apenas llega a un 15% de lo que se vio en agosto del a?o pasado. Esto es consistente con la evidencia acumulada a base de experimentos en ratones que se?ala infecciones menos patog¨¦nicas en los pulmones: como resultado, los casos graves (aunque lo sigan siendo) tienen menor probabilidad de necesitar soporte respiratorio.

Pero el frente definitivo ha sido probablemente el de la inmunidad adquirida. En las vacunas, M¨¦xico ha peleado un poco por debajo del peso que se le supone a una de las potencias diplom¨¢ticas y econ¨®micas de la regi¨®n: hasta ahora sectores importantes de la poblaci¨®n no han recibido ninguna dosis y los llamados ¡°rezagados¡± siguen form¨¢ndose para que se les aplique la vacuna en el ¨²ltimo momento.

El Gobierno mexicano empez¨® la aplicaci¨®n de vacunas de refuerzo el 7 de diciembre para personas mayores de 60 a?os. Despu¨¦s se extendi¨® la cobertura a trabajadores sanitarios y del sector m¨¦dico, pero las autoridades tardaron varias semanas m¨¢s en ofrecer estad¨ªsticas sobre el avance y los datos no se han compartido con la misma transparencia que el resto de pa¨ªses del continente.

Durante la conferencia semanal sobre el estado de la pandemia del pasado martes, se dio a conocer que 7,8 millones de adultos mayores contaban con su refuerzo. La vacunaci¨®n de habitantes mayores de 40 a?os empieza este lunes y representa el mayor reto de las autoridades sanitarias en las pr¨®ximas semanas: solo 2,1 millones de personas entre los 40 y 59 a?os ha recibido una vacuna. Los adultos de mediana edad son un grupo que ha sufrido desproporcionadamente el impacto del virus en M¨¦xico en comparaci¨®n con otros pa¨ªses, probablemente por las comorbilidades predominantes en el pa¨ªs que agravan los cuadros de covid, como la obesidad, la diabetes y la hipertensi¨®n. En las ¨²ltimas semanas tambi¨¦n se ha inoculado a adolescentes de 14 a 17 a?os, al menos con una dosis, uno de los ¨²ltimos grupos etarios en hacerlo.

Una de las principales cr¨ªticas del grueso de los especialistas a las autoridades mexicanas es que la vacunaci¨®n de refuerzo lleg¨® m¨¢s tarde que en otros pa¨ªses. Mientras ¨®micron ya dejaba una huella de su impacto en Europa y Estados Unidos, el Gobierno mexicano tom¨® m¨¢s tiempo para definir la estrategia de vacunaci¨®n para esta etapa. Se anunci¨®, por ejemplo, la distribuci¨®n de vacunas para adultos de m¨¢s de 40 a?os hasta mediados de enero, cuando otros pa¨ªses de la regi¨®n ya hab¨ªan administrado dosis adicionales para esa franja de edad e, incluso, m¨¢s j¨®venes.

La vacunaci¨®n de refuerzo finalmente arranc¨®. Las primeras semanas del a?o han visto un repunte de las dosis administradas cada d¨ªa, de la mano de la necesidad de abatir los contagios y los casos graves provocados por la expansi¨®n de ¨®micron, as¨ª como la disponibilidad de vacunas que tiene el pa¨ªs. M¨¦xico tiene m¨¢s de 201 millones de dosis recibidas, pero ha aplicado poco menos de 165 millones: un colch¨®n de alrededor de 35 millones de reservas que a¨²n pueden aprovecharse.

En M¨¦xico, ¨®micron no implic¨® la imposici¨®n de restricciones a la movilidad ni la vuelta a un confinamiento como el que se vivi¨® en las primeras etapas de la pandemia. El ritmo de actividad cotidiana se ha recuperado poco a poco durante el a?o pasado. Uno de los indicadores m¨¢s claros de esta recuperaci¨®n se est¨¢ viendo en la actual temporada de gripe, como siempre coincidente con las ¨¦pocas invernales. ¡°No es raro que en las ¨¦pocas de fr¨ªo se incrementen los episodios de enfermedades respiratorias, no porque el fr¨ªo en s¨ª mismo sea el que nos enferme, sino porque, como ha sido claro en esta pandemia, la gente se encierra m¨¢s, empieza a respirar el mismo aire ¡®viciado¡¯ y si alguien tiene el virus, lo est¨¢ ¡®compartiendo¡¯ con los dem¨¢s e infecta a otras personas¡±, explica Mac¨ªas.

¡°Entre que es gripa o es covid, aqu¨ª andamos, es la duda que tenemos todos¡±, dec¨ªa Jonathan Puebla, un hombre de 33 a?os, mientras esperaba a aplicarse una prueba de covid a principios de enero en Ciudad de M¨¦xico. La llegada de ¨®micron marc¨® el inicio de un invierno complicado, en medio de la ca¨ªda de las temperaturas, el aumento de otras enfermedades respiratorias, las reuniones por las fiestas decembrinas y la necesidad de recuperar millones de econom¨ªas hogare?as maltrechas.

Durante la ola de ¨®micron, la misma pregunta ha flotado entre las personas contagiadas con s¨ªntomas leves o moderados: ?ser¨¢ ¨®micron o gripe? La duda est¨¢ fundamentada en datos: el ritmo de casos positivos por influenza detectados por el sistema de vigilancia epidemiol¨®gica mexicano est¨¢ volviendo en la temporada 2021-2022 a ritmos y niveles similares a los previos a la pandemia. En cambio, en la temporada 2020-2021 los contagios de este virus aparec¨ªan totalmente planos.

Cabe la posibilidad de que esta diferencia tan abrupta no s¨®lo obedezca a la naturaleza del ritmo de contagio sino tambi¨¦n, al menos en una peque?a parte, a la dificultad de mantener una detecci¨®n pareja de dos virus de alto contagio con las capacidades de vigilancia existentes en M¨¦xico. En los primeros meses de pandemia el pa¨ªs emple¨® su red de centros Centinela para detectar el SARS-CoV-2, lo que produjo resultados sub¨®ptimos en detecci¨®n. La hip¨®tesis de un grupo de investigadores de Nuevo Le¨®n es que el confinamiento tambi¨¦n ayud¨® a ver menos casos de influenza en 2020, ya sea porque se quedaron en casa o porque optaron por salir menos a hacerse una prueba que confirmara su contagio, como publicaron en la revista Nature.

¡°Es plausible que la regi¨®n se est¨¦ acercando al fin de la pandemia¡±, dijo Hans Kluge, el director de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) para Europa, en declaraciones que han resonado fuerte en Latinoam¨¦rica. ¡°Una vez que la ola de ¨®micron disminuya, habr¨¢ una inmunidad general durante algunas semanas y algunos meses, ya sea por la vacuna o porque las personas ser¨¢n inmunes debido a la infecci¨®n, y tambi¨¦n una disminuci¨®n debido a la estacionalidad¡±, ha defendido Kluge, aunque la OMS ha matizado sus afirmaciones y ha dicho que es ¡°peligroso suponer que ¨®micron es la ¨²ltima variante¡±.

La Organizaci¨®n Panamericana de la Salud (OPS), la representaci¨®n continental de la OMS, sigui¨® la misma l¨ªnea de cautela y no se anim¨® a dar un pron¨®stico de si la transici¨®n a la endemia se dar¨¢ en las pr¨®ximas semanas. ¡°Ninguno de nosotros tiene una bola de cristal y es demasiado temprano para decir que estamos acerc¨¢ndonos al final de la pandemia¡±, dijo el mi¨¦rcoles Carissa ?tienne, la directora de la OPS.

El pron¨®stico de varios epidemi¨®logos es que ¨®micron puede convertirse en una fase de transici¨®n hacia que el covid se convierta en una enfermedad estacional por la inmunidad adquirida por los contagios y la vacunaci¨®n. Sylvain Aldighieri, uno de los principales epidemi¨®logos de la OPS, dijo que en M¨¦xico y otros pa¨ªses de clima templado es posible que esa estacionalidad se de justamente en invierno. ¡°A¨²n necesitamos varias temporadas de observaci¨®n para establecer este patr¨®n¡±, se?al¨®.

Mac¨ªas advierte de que esta posible transici¨®n con ¨®micron no quiere decir que ¡°sea una situaci¨®n libre de riesgo¡± porque, aunque sea una enfermedad m¨¢s leve la que produce, se contamina muy r¨¢pidamente y puede ser un problema para el sistema sanitario. ¡°Si bien ¨®micron puede acelerar la salida de la epidemia, puede hacerlo de una manera explosiva, llenar todav¨ªa las terapias intensivas y los hospitales, y colapsar sectores enteros de la econom¨ªa¡±, afirma.

El bi¨®logo Antonio Lazcano, uno de los expertos m¨¢s reconocidos en el estudio del origen de la vida, pide no caer en excesos de confianza. ¡°?micron es la mejor prueba de que la pandemia sigue activa y dando sorpresas¡±, dice el acad¨¦mico de la Universidad Nacional Aut¨®noma de M¨¦xico, que recientemente se ha dedicado a estudiar la evoluci¨®n del virus. Lazcano dice que es ¡°pr¨¢cticamente imposible¡± que el virus se elimine por completo y que un error com¨²n es asumir que pasar a una fase end¨¦mica, donde los casos sean tan bajos que no saturen el sistema de salud, implique que el virus que sea menos agresivo. ¡°La evoluci¨®n biol¨®gica es multifactorial y no se puede predecir c¨®mo ser¨¢, pero una vez que un virus se instala en una poblaci¨®n, se pueden ver las tendencias¡±, comenta. ¡°La malaria mata al a?o un n¨²mero enorme de personas y es end¨¦mica¡±, ejemplifica.

Uno de los puntos de coincidencia de los especialistas es que el tr¨¢nsito hacia la endemia y a que el coronavirus se convierta en una enfermedad estacional trae consigo retos para el sistema de vigilancia epidemiol¨®gica, sobre todo en cuanto al monitoreo de diferentes virus que est¨¦n circulando al mismo tiempo y que provocan catarros en ¨¦pocas de fr¨ªo. Lazcano subraya la importancia de entender que las estructuras del coronavirus y la influenza, por ejemplo, son diferentes, aunque los s¨ªntomas sean similares y se transmitan por v¨ªa a¨¦rea. Eso implica afinar las herramientas de detecci¨®n que ya se tienen con el modelo Centinela y el aparato para responder a la incidencia, agrega.

¡°El reto principal es la carga conjunta que podr¨ªamos observar durante el periodo de invierno en los servicios de salud¡±, complementa Aldighieri, partiendo del supuesto de que esa estacionalidad se d¨¦ en invierno, algo que no est¨¢ del todo confirmado. El mundo llegar¨ªa a esa estacionalidad con m¨¢s experiencia y medidas que han probado ser efectivas y que son muy probables que hayan llegado para quedarse. ¡°Jam¨¢s vamos a tener un virus que taladre un cubrebocas bien colocado ni un coronavirus que resista el agua y el jab¨®n¡±, dice Lazcano.

¡°No existe una estrategia post-omicr¨®n de parte del Gobierno mexicano¡±, reclama, sin embargo, Lazcano. El especialista insiste en que se debe definir claramente cu¨¢l va a ser la pol¨ªtica para la compra de vacunas y si se van adquirir f¨¢rmacos dise?ados espec¨ªficamente contra ¨®micron, as¨ª como si se recular¨¢ sobre la decisi¨®n de no vacunar a ni?os. El cient¨ªfico ve urgente fortalecer el sistema de salud, retomar la estrategia de antibi¨®ticos y crear una base de datos con las personas inmunocomprometidas y de grupos de riesgo que tengan una atenci¨®n focalizada e, incluso, una dosis de refuerzo adicional.

M¨¦xico necesita, en su opini¨®n, un esfuerzo multidisciplinario y de convergencias pol¨ªticas para tener planes de supervisi¨®n y prevenci¨®n antes de que surja una variante o virus nuevo, que permita una mejor respuesta. ¡°Las estrategias pospandemia deber¨ªan ser vistas como una prioridad nacional¡±, remata Lazcano.

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