Ilegales y peligrosos: el Gobierno proh¨ªbe por decreto vapeadores y cigarrillos electr¨®nicos en M¨¦xico

No vapear, no calentar tabaco, pero tampoco fumar. El presidente de M¨¦xico, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, ha firmado este martes un decreto que proh¨ªbe la ¡°circulaci¨®n y comercializaci¨®n¡± de vapeadores y cigarrillos electr¨®nicos. Primero, el Gobierno vet¨® la importaci¨®n de estos dispositivos, una medida tumbada posteriormente por la Suprema Corte de Justicia de la Naci¨®n. Despu¨¦s, otras instituciones se sumaron a la batalla. Hace algunas semanas, el Senado aprob¨® la Ley de Impuestos Generales de Importaci¨®n y Exportaci¨®n, con lo que estos productos quedaron nuevamente prohibidos a su importaci¨®n legal, ya que actualmente ni vapeadores ni calentadores se producen en el pa¨ªs. Hoy, finalmente, el presidente ha prohibido su venta legal.

La decisi¨®n se ha adoptado tambi¨¦n despu¨¦s de que la Comisi¨®n Federal para la Protecci¨®n contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) declarara una alerta sanitaria m¨¢xima por los riesgos para la salud que representan todas las modalidades de productos alternativos al tabaco. Adicionalmente, la Secretar¨ªa de Gobernaci¨®n y entidades locales han emprendido varias campa?as para localizar y decomisar estos dispositivos en al menos una decena de Estados.

Estas alertas y ahora las medidas adoptadas han alentado un debate sobre los riesgos de la incursi¨®n en el mercado negro de vaporizadores que llegan al pa¨ªs de contrabando. ¡°Estamos dejando en manos del mercado negro la distribuci¨®n, en lugar de permitir que algunas empresas los importen, paguen impuestos y sueldos, estamos dejando ese tema en la informalidad y en la ilegalidad¡±, dijo el senador Luis Ortiz durante la discusi¨®n de la ley de impuestos.

Aunque el mercado legal de los vaporizadores o calentadores de tabaco hab¨ªa crecido en el pa¨ªs, segu¨ªa siendo una fracci¨®n m¨ªnima en comparaci¨®n con el de los cigarrillos convencionales. Philip Morris Internacional, uno de los comercializadores de estas alternativas, pas¨® de tener 35.000 a cerca de 42.000 usuarios de calentadores de tabaco. Paralelamente, en los ¨²ltimos cinco a?os, la industria del tabaco aument¨® sus ventas de 878 a 1.246 millones de pesos al a?o, de acuerdo con estimaciones del Inegi. A nivel mundial, el uso de alternativas para consumir nicotina crece velozmente, aumentando su valor conforme los usuarios cambian de preferencias.

Al mismo tiempo, el mercado ilegal del tabaco representa el 19% del total del mercado, seg¨²n un estudio realizado por la Confederaci¨®n de C¨¢maras Industriales de M¨¦xico. Entre 2019 y 2020, aunque hubo un incremento de los impuestos al tabaco por el Impuesto Especial a Productos y Servicios (IEPS), la recaudaci¨®n se contrajo debido al comercio de productos ap¨®crifos de tabaco.

Uno de los argumentos que se dio para prohibir cualquier tipo de dispositivo vaporizador, ya sea que se trate de productos con o sin nicotina, es que se usan varios saborizantes para ¡°enganchar a los ni?os y adolescentes que despu¨¦s ser¨¢n consumidores de otras drogas¡±, dijo la senadora Lilia Valdez antes de la aprobaci¨®n de la ley.

Andrea Constantini, jefa de relacionamiento cient¨ªfico para Latinoam¨¦rica y Canad¨¢ de Philip Morris Internacional, asegura que la prohibici¨®n en general origina m¨¢s canales para que los menores lleguen a los productos no regulados. ¡°Las prohibiciones solo llevan a una mayor cantidad de il¨ªcitos, falta de control, de mercado negro y de no saber qu¨¦ es lo que consume la poblaci¨®n, sobre todo para los menores, quienes adquieren productos por canales donde no existe ning¨²n control¡±, dice en entrevista.

Regulaci¨®n o prohibici¨®n total

De acuerdo con datos de varios comercializadores de productos alternativos con y sin nicotina, estos productos contienen hasta un 95% menos de sustancias nocivas para la salud, causantes de Enfermedad Pulmonar Oclusiva Cr¨®nica (EPOC) y varios tipos de c¨¢ncer. Pese a ello, la Organizaci¨®n de Naciones Unidas (ONU) ha sido enf¨¢tica en decir que, aunque se puede tratar de una alternativa para los fumadores ya existentes, no se trata de productos que est¨¦n exentos de causar da?os a la salud.

El principal argumento de las empresas que comercializan productos alternativos al tabaco es que, a diferencia de los cigarrillos, estos no necesitan combusti¨®n para funcionar. Varios organismos regulatorios de salud en el mundo se han valido de este argumento para regularlo, entre ellos la Agencia de Salud P¨²blica de Reino Unido, la Administraci¨®n de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en ingl¨¦s) de Estados Unidos y el Ministerio de Salud de Nueva Zelanda. ¡°La decisi¨®n se debe de tomar con base en evidencia cient¨ªfica, no sobre dogmas o desconocimiento de las alternativas¡±, dice Constantini.

Aunque tampoco en todos los pa¨ªses donde se ha regulado se ha podido proteger a los adolescentes del consumo de sustancias prohibidas. En Estados Unidos, donde la FDA regula los cigarrillos electr¨®nicos desde 2016, se estima que poco m¨¢s de dos millones de j¨®venes de entre 14 y 17 a?os, vapean.

Para la industria regulada, dejar fuera a los menores de edad no es la discusi¨®n, sino que se trata de una opci¨®n para adultos que debe dejar fuera el mercado negro de cigarrillos. ¡°Es fundamental regular para que los productos de calidad est¨¦n a mano de los adultos que ya fuman, al mismo tiempo que se protege a los menores de edad y a las personas que no fuman, alej¨¢ndolos del humo da?ino del tabaco¡±, finaliza Constantini.

Suscr¨ªbase aqu¨ª a la newsletter de EL PA?S M¨¦xico y reciba todas las claves informativas de la actualidad de este pa¨ªs