El arranque de Dos Bocas: la carta de L¨®pez Obrador para dejar de importar gasolina
El Gobierno inaugura la primera refiner¨ªa en d¨¦cadas sin certeza sobre cu¨¢ndo empezar¨¢ a producir carburante ni cu¨¢nto costar¨¢ el proyecto
M¨¦xico dar¨¢ este viernes el banderazo a su primera nueva refiner¨ªa en m¨¢s de cuatro d¨¦cadas. Dos Bocas, un complejo de casi 600 hect¨¢reas en un antiguo manglar, es la baza del Gobierno para lograr la ¡°autosuficiencia energ¨¦tica¡± y dejar de importar gasolinas. La inauguraci¨®n de este proyecto estrella del presidente Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador servir¨¢ para mostrar m¨²sculo. Sin embargo, la refiner¨ªa a la que se cortar¨¢ el list¨®n no est¨¢ terminada y su costo ya supera las proyecciones. El anunciado renacimiento de Pemex arranca a medias.
El municipio de Para¨ªso vive un frenes¨ª de actividad. En el Hotel Antares, a un par de kil¨®metros de la principal entrada a Dos Bocas, trabajadores de la refiner¨ªa y de Pemex entran y salen con cascos y grandes bolsas de ropa. ¡°Estamos al 100% de ocupaci¨®n¡±, avisa Yadira Palma, la gerente, a quien se acerca a preguntar. Desde que empezaron las obras, esto es lo normal. Hay d¨ªas en que est¨¢n ¡°al 150%¡± y subarriendan otras viviendas. Han puesto smart TVs en los cuartos, cambiado los aires acondicionados y est¨¢n construyendo una ampliaci¨®n con m¨¢s habitaciones. ¡°Se podr¨ªa decir que Para¨ªso entr¨® a la modernidad hace tres a?os¡±, afirma Palma.
Hubo un momento, durante el sexenio de Enrique Pe?a Nieto, en que el hotel estuvo a punto de cerrar. La reforma energ¨¦tica de 2013 le quit¨® a Pemex el monopolio sobre la explotaci¨®n petrolera para abrirla a la inversi¨®n privada. La terminal portuaria de Para¨ªso, que abastece a las plataformas mar¨ªtimas de Pemex, vio c¨®mo la actividad ca¨ªa a la mitad. De albergar 100 barcos en temporada de tormentas, de repente no llegaban a 50. En el Antares, la ocupaci¨®n cay¨® al 15% y se redujo el personal al m¨ªnimo.
El sue?o petrolero de L¨®pez Obrador los salv¨®. Al llegar al Gobierno, el presidente se propuso ¡°rescatar¡± a Pemex, la petrolera m¨¢s endeudada del mundo, de lo que consideraba era un intento por privatizarla o incluso desaparecerla. La construcci¨®n de Dos Bocas buscaba apuntalar esa estrategia. En 2019, el Gobierno empez¨® a cortar el manglar donde las quincea?eras del pueblo antes iban a sacarse fotos. ¡°Nos dimos cuenta de que algo quer¨ªan hacer cuando los osos hormigueros se salieron para la carretera¡¡±, dice Palma, desde la azotea del hotel. ¡°Antes se ve¨ªa todo verde y ahora es una ciudad¡±. Una ciudad de gr¨²as y torres para quemar el gas.
Los planes para Dos Bocas se han tenido que amoldar a dos obsesiones del mandatario: rapidez y bajo costo. L¨®pez Obrador la quer¨ªa tener construida en tres a?os y con un presupuesto de unos 8.000 millones de d¨®lares. Invitaron a cuatro empresas especialistas en refiner¨ªas a una licitaci¨®n restringida. Al final, el concurso se declar¨® desierto. Una de las empresas renunci¨® a participar y las propuestas de las otras tres no cumplieron con los requisitos. ¡°Estaban pidiendo mucho, se pasaron, y en el tiempo de construcci¨®n¡±, dijo L¨®pez Obrador. ¡°Nosotros no vamos a hacer ninguna obra que no vayamos a terminar en el sexenio¡±. En su lugar, le encarg¨® la obra a la Secretar¨ªa de Energ¨ªa, encabezada por Roc¨ªo Nahle.
A tres a?os del inicio, la construcci¨®n a¨²n no est¨¢ terminada. Es decir, se inaugurar¨¢ una refiner¨ªa que todav¨ªa no es capaz de producir gasolina. El presidente ha asegurado que a finales de 2022 ya estar¨¢ en marcha, pero los especialistas estiman que esto no suceder¨¢ hasta finales de 2023 o inicios de 2024. Alcanzar su capacidad m¨¢xima de procesamiento -340.000 barriles diarios de crudo- puede tardar m¨¢s. Al finalizar la construcci¨®n, debe iniciar un periodo de pruebas que demora entre seis y nueve meses.
A la hora del almuerzo, el puesto de tacos de do?a Moni no da la impresi¨®n de que la obra est¨¦ tocando a su fin. En hora y media, los nueve kilos de carnitas, tinga de pollo y cochinita pibil que trajo se han esfumado. Unos treinta trabajadores, empleados por contratistas del Gobierno, devoran los ¨²ltimos tacos sentados en dos largas mesas. Hace un calor sofocante, y llevan el overol naranja arremangado en los brazos y abierto hasta el pecho. Bromean sobre la inminente visita del presidente: ¡°Habr¨¢ que ponerse el overol del domingo, ?eh?¡±. Casi todos los clientes son ¡°for¨¢neos¡±, llegados de otros Estados del pa¨ªs atra¨ªdos por los mejores salarios.
¡°?Qu¨¦ le ponemos, don R¨®ber?¡±, pregunta M¨®nica Becerril, que apenas hace unos meses era ama de casa. ¡°P¨®ngame tres de tinga, por favor¡±, responde Roberto Vald¨¦s. Originario de Ciudad de M¨¦xico, este cristalero de 35 a?os lleg¨® a Para¨ªso hace seis meses con una cuadrilla de amigos. Le avisaron de que los cristales de los laboratorios de la refiner¨ªa ten¨ªan que estar terminados en junio, a tiempo para la inauguraci¨®n. Durante los primeros cuatro meses, trabaj¨® 15 horas diarias sin descanso. ?ltimamente le han dado los domingos libre. Aunque ya solo faltan algunos ¡°detalles¡±, no le agradan las prisas en el proyecto. ¡°Roma no se construy¨® en un d¨ªa¡±, reflexiona, mientras se acaba su tercer taco.
El top¨®grafo Luis Guadarrama, veracruzano de 46 a?os, ha sido uno de los ¨²ltimos en llegar al puesto. Se quita el casco blanco y deja al descubierto una frente cargada de sudor. Estaba trabajando en la torre de desfogue, la construcci¨®n m¨¢s alta de la refiner¨ªa con sus 182 metros. La empresa le ha dicho que cuentan con ¨¦l para al menos otros seis meses. ¡°Uff. Queda obra met¨¢lica, de instrumentaci¨®n, se deben hacer pruebas¡ Yo creo que va a ser m¨¢s¡±, dice. ¡°Esto no es como entregar una alberca. Se debe comprobar que funcione bien¡±.
Igual de incierto que la fecha real de t¨¦rmino de las obras es su costo final. Los 8.000 millones de d¨®lares originales est¨¢n descartados. El mandatario reconoci¨® la semana pasada que pod¨ªa llegar hasta los 12.000, un 50% m¨¢s. Fuentes conocedoras de la obra, citadas por Bloomberg, lo elevan a 18.000 millones, m¨¢s del doble. De confirmarse, Dos Bocas ser¨¢, con gran diferencia, la obra m¨¢s cara del sexenio, por encima del Tren Maya o del Aeropuerto Internacional Felipe ?ngeles. Los c¨¢lculos han terminado por dar la raz¨®n a las empresas a las que L¨®pez Obrador acus¨® de ¡°pasarse¡± de presupuesto.
La autosuficiencia en gasolinas: un objetivo por verse
Una vez terminada, Dos Bocas tendr¨¢ capacidad para refinar 340.000 barriles diarios de petr¨®leo, alrededor de una quinta parte de lo extra¨ªdo por Pemex. El Gobierno ha afirmado que el volumen de refinaci¨®n ser¨ªa suficiente para lograr la autosuficiencia energ¨¦tica. Actualmente, M¨¦xico importa la mayor¨ªa de la gasolina que utiliza el sector transporte -alrededor del 70% de los 715.000 barriles diarios consumidos en promedio en los primeros seis meses del a?o pasado, seg¨²n datos de la Secretar¨ªa de Energ¨ªa-.
Desde su llegada al Gobierno, L¨®pez Obrador ha tratado de reducir esa dependencia como parte de una agenda de corte nacionalista que propugna la ¡°soberan¨ªa¡± energ¨¦tica y el ¡°rescate¡± de Pemex. ¡°Cuando llegamos, ya estaban vendiendo las plantas. Como lo hicieron con la petroqu¨ªmica, la convirtieron en chatarra. Quer¨ªan lo mismo para la refinaci¨®n¡±, declar¨® hace dos semanas. ¡°Hay un viraje, no vamos a seguir con la misma pol¨ªtica neoliberal en el sector energ¨¦tico¡±
El ¡°viraje¡± incluye un programa de rehabilitaci¨®n de las seis refiner¨ªas ya existentes que estaban procesando un volumen de barriles muy inferior a su capacidad debido a la falta de inversi¨®n. Ahora producen, seg¨²n el Ejecutivo, a un promedio del 60% y se quiere llegar a un 80%. De producir 198.000 barriles diarios de gasolina para veh¨ªculos en 2018, Pemex sac¨® 225.000 en 2021. Adem¨¢s, el Gobierno compr¨® la participaci¨®n que ten¨ªa la multinacional Shell en las instalaciones de Deer Park, en Texas. En l¨ªnea con esa mayor producci¨®n y pese a los compromisos ambientales, las emisiones contaminantes de Pemex se han duplicado en tres a?os.
Si opera al tope de su capacidad, un escenario poco realista, Dos Bocas podr¨ªa inyectar alrededor de 170.000 barriles de gasolina, estiman los expertos consultados. Si se suma a lo ya producido por las otras seis refiner¨ªas y los alrededor de 110.000 barriles de Deer Park, Pemex todav¨ªa necesitar¨ªa m¨¢s de 200.000 barriles para cubrir la demanda. Sin embargo, el exconsejero de la petrolera Fluvio Ruiz cree que s¨ª es posible a mediano plazo: ¡°Cuando se terminen de rehabilitar las seis refiner¨ªas y se concluyan las dos plantas coquizadoras, la producci¨®n de Pemex, considerando Deer Park, pr¨¢cticamente va a cubrir el total de la demanda nacional¡±.
En un pa¨ªs con apenas 1.189 estaciones de carga y donde solo el 4% de los veh¨ªculos vendidos en 2021 fueron el¨¦ctricos o h¨ªbridos, todav¨ªa no se atisba un futuro sin gasolina. Sin embargo, el debate en torno a Dos Bocas se centra en la conveniencia de importar gasolina o producirla en M¨¦xico. Los defensores de la autosuficiencia apuntan a un blindaje del pa¨ªs frente a las tensiones geopol¨ªticas y sostienen que la refinaci¨®n es parte fundamental de la cadena de valor. ¡°Decir que Pemex solo se debe enfocar en la extracci¨®n, es como decir que la carne es nutritiva. Si solo comes carne, te vas a morir¡±, dice Fluvio Ruiz. ¡°Tiene que diversificar¡±.
Del otro lado, los detractores se?alan que esta agenda no tiene sentido econ¨®mico porque es m¨¢s barato importar de fuera que producirla dentro, debido a la pesadez del crudo mexicano. De hecho, en 2014 el expresidente Enrique Pe?a Nieto cancel¨® un proyecto para construir otra refiner¨ªa en Tula por considerar que no era rentable. Aunque el margen de ganancias ha mejorado en 2022, la filial encargada de refinaci¨®n ha reportado un promedio de 116.000 millones de pesos en p¨¦rdidas anuales en la ¨²ltima d¨¦cada, de acuerdo a un an¨¢lisis del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
La petrolera gana m¨¢s con sus actividades de extracci¨®n de crudo que con la refinaci¨®n. ¡°La refinaci¨®n es una actividad marginal donde Pemex ha perdido much¨ªsimos millones de pesos. Si lo ves fr¨ªamente lo que m¨¢s convendr¨ªa ser¨ªa enfocarse en la extracci¨®n para financiar la transici¨®n energ¨¦tica futura¡±, dice Sergio Pimentel, excomisionado de la Comisi¨®n Nacional de Hidrocarburos.
Dejar de exportar petr¨®leo para refinarlo en el pa¨ªs implica un ¡°costo de oportunidad¡±, seg¨²n ?scar Ocampo, investigador del IMCO. ¡°Lo deber¨ªas colocar donde mejor te lo paguen y eso no necesariamente es vend¨¦rselo al propio Pemex¡±, se?ala. Sobre las preocupaciones geopol¨ªticas, el investigador apunta que el gran suministrador de gasolinas de M¨¦xico es EE UU, un socio confiable al que le une un tratado de libre comercio. ¡°Es muy distinto depender de Rusia que de Texas. Pensar que EE UU nos va a cortar de un d¨ªa para el otro el suministro no es algo que se antoje posible¡±, apunta el analista.
En Para¨ªso, esperan que la refiner¨ªa deje, una vez terminada, menores precios de gasolina y algo de empleo. Vicente Jim¨¦nez, ingeniero industrial de 25 a?os, trabaja en una tienda donde los maniqu¨ªes lucen overoles, en lugar de vestidos. Los chalecos amarillos tienen un 10% de descuento. ¡°Cuando terminen, los for¨¢neos se van a regresar y no vamos a vender lo mismo¡±, dice. ?l espera poder colocarse en la refiner¨ªa. Su padre y abuelo son trabajadores de Pemex y a ¨¦l le gustar¨ªa seguir la tradici¨®n, aunque lo ve complicado. ¡°Antes, los padres les heredaban las plazas a sus hijos. Ahora ya no¡±, se?ala. ¡°Si no se puede, ya buscaremos otros horizontes¡±.
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