Frida Kahlo Corporation: la batalla legal por una marca millonaria
La familia de la artista mexicana lleva casi 10 a?os enzarzada en una disputa legal con la sociedad paname?a que controla el 51% de la marca. Las herederas acusan a la empresa de haber ¡°incumplido sistem¨¢ticamente¡± los acuerdos
Los derechos sobre la marca Frida Kahlo son un bot¨ªn en liza. La familia de la artista mexicana y una sociedad paname?a se lo disputan desde hace casi una d¨¦cada. La historia empieza en 2004, cuando la ¨²nica heredera de la pintora, Isolda Pinedo, cedi¨® la marca a Frida Kahlo Corporation, una empresa con sede en Panam¨¢ en la que la familia tiene un 49% de participaci¨®n y un empresario venezolano, el resto. Entre ellos no hubo problemas hasta que las descendientes de Pinedo, Mara Romeo y Mara de Anda, consideraron que el acuerdo que hab¨ªan firmado se estaba ¡°incumpliendo sistem¨¢ticamente¡±. Desde entonces, han intentado recuperar el control sobre la firma.
Ya son casi 10 a?os de demandas, amparos y acusaciones cruzadas. El caso m¨¢s sonado ocurri¨® en 2018, cuando la familia de la artista consigui¨® frenar la comercializaci¨®n de una mu?eca Barbie de figura esbelta y pelo recogido en trenzas que la empresa Mattel hab¨ªa inspirado en la artista con la autorizaci¨®n de Frida Kahlo Corporation. La justicia impuso medidas cautelares y la venta se detuvo en M¨¦xico, aunque la mu?eca, una edici¨®n limitada, se agot¨® en el resto del mundo. ¡°Frida no era una Barbie, era una mujer con defectos¡±, defendi¨® Mara de Anda, sobrina bisnieta de la pintora, durante una entrevista en mayo con EL PA?S.
Un juez mexicano finalmente levant¨® las medidas contra Frida Kahlo Corporation porque el tribunal se declar¨® ¡°incompetente¡± para resolver el caso, seg¨²n la sentencia de diciembre de 2021 consultada por este peri¨®dico. Los procesos, sin embargo, siguen en diferentes frentes en pa¨ªses como Panam¨¢ o Espa?a. Mientras tanto, las dos partes se atribuyen el resguardo del patrimonio marcario de la artista ¨Csolo el marcario, porque el de su obra est¨¢ gestionado por el Banco Nacional de M¨¦xico¨C y se acusan mutuamente de querer ¡°confundir a la gente¡±.
En 2004, un empresario venezolano del sector cambiario, Carlos Dorado, busc¨® a la familia de la artista para hacer negocios. El 15 de diciembre de ese a?o qued¨® conformada Frida Kahlo Corporation, una sociedad an¨®nima creada en Panam¨¢ con un capital de 90.000 d¨®lares, seg¨²n el registro p¨²blico del pa¨ªs centroamericano. Los due?os de la compa?¨ªa son los paname?os Harmodio Herrera Villareal y Carolina Tejada de Carney, que aparecen vinculados a sociedades en Seychelles, Bahamas, Malta, entre otros, seg¨²n el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigaci¨®n (ICIJ). Carlos Dorado es el presidente y Mara Romeo, sobrina nieta de la artista, figura como secretaria.
Romeo, en representaci¨®n de su madre, Isolda Pinedo, firm¨® un contrato de asociaci¨®n con la sociedad en 2005. EL PA?S ha tenido acceso solo a algunos fragmentos de ese convenio. En el documento, se establece que ¡°las marcas¡± son cedidas ¡°no reserv¨¢ndose derecho alguno sobre las mismas¡± mientras dure la sociedad. Seg¨²n Frida Kahlo Corporation, la familia se comprometi¨® a ceder ¡°todas las marcas y derechos que pose¨ªa, as¨ª como los que pudiera tener en el futuro, a nivel mundial y sin limitaci¨®n alguna¡± a cambio de una cifra de dinero que no se detalla. La empresa defiende que el acuerdo ¡°es v¨¢lido y est¨¢ en plena vigencia¡±.
El equipo que representa a las descendientes de la artista, en cambio, precisa que el contrato solo prev¨¦ el uso de la marca en relaci¨®n a cuatro categor¨ªas de productos: bisuter¨ªa; preparaciones para blanquear, pulir y desengrasar; papel, cart¨®n y productos de imprenta; bebidas alcoh¨®licas. Esas marcas ¡°pueden ser ampliadas bajo el control y la aceptaci¨®n de la familia¡±, asegura un portavoz de la familia. Sin embargo, seg¨²n su versi¨®n, la empresa paname?a ¡°solicit¨® marcas que la familia no autoriz¨®¡±. ¡°Hacen un uso completamente ilegal¡±, afirma el vocero. En M¨¦xico, solo siete de las 49 marcas asociadas a Frida Kahlo est¨¢n registradas por la familia en el Instituto de la Propiedad Intelectual.
Desde que se firm¨® el acuerdo, la sociedad ha otorgado licencias para el uso de la marca a diferentes compa?¨ªas. Hace a?os, el icono trascendi¨® a la artista y la mercadotecnia convirti¨® a la pintora latinoamericana m¨¢s cotizada en caf¨¦, tequila, playeras, mu?ecas, tenis, velas o pendientes. Los convenios m¨¢s recientes que ha comunicado la compa?¨ªa son con la firma de joyer¨ªa brit¨¢nica Tatty Devine, con la marca de ropa deportiva Puma o con el vi?edo chileno Vi?a Carmen. La familia, por su parte, asegura que ha firmado contratos para crear series de televisi¨®n, musicales de Broadway o espect¨¢culos inmersivos.
Una nueva demanda en Panam¨¢
Aunque la explotaci¨®n de la firma ha sido ¡°intensiva y absolutamente rentable¡±, dice el equipo legal que representa a Romeo y a De Anda, ¡°la sociedad est¨¢ en una situaci¨®n de insolvencia patrimonial¡±. Es decir, no es capaz de hacer frente a las deudas que contrajo. ¡°Al menos de acuerdo con la contabilidad que se nos fue presentada¡±, aseguran los letrados ¡ªEL PA?S no ha tenido acceso a esos documentos¡ª. ¡°Nosotros estar¨ªamos encantados de recibir el 49%¡±, dice uno de los abogados. Pero la empresa, asegura, solo ha reportado ¡°p¨¦rdidas¡± a la familia.
El equipo jur¨ªdico que representa a las descendientes de Kahlo parte de la supuesta mala situaci¨®n financiera de la compa?¨ªa para dise?ar una estrategia legal que les permita recuperar ¡°la propiedad exclusiva¡± de la marca. Este a?o presentaron una nueva demanda en Panam¨¢ con ese fin. Los abogados consideran que de acuerdo con la ley paname?a la sociedad ¡°tendr¨ªa que haberse disuelto¡± porque su ¡°patrimonio neto [es] negativo¡±. Si se disuelve la sociedad, dicen los letrados, el convenio firmado en 2005 establece que ¡°es condici¨®n indispensable que todo el patrimonio marcario se devuelva a la familia¡±.
La corporaci¨®n, sin embargo, defiende que ¡°no hay forma de quitar algo que se vendi¨®¡±. ¡°La se?ora Isolda [Pinedo] y su familia pusieron a Frida a la venta y nosotros la compramos porque para nosotros era una forma de proteger el legado cultural de un pa¨ªs al que le tenemos cari?o, en el que hemos hecho much¨ªsimos negocios¡±, sostiene Beatriz Alvarado, vocera del accionista mayoritario de la sociedad. Alvarado asegura que la parte que ella representa ¡°ha cumplido con todo lo pactado en los acuerdos¡± y que en cambio existe una ¡°campa?a de desprestigio medi¨¢tico¡± contra la empresa. ¡°Han iniciado una batalla legal y tienen la clara intenci¨®n de inducir a error sobre la capacidad de Frida Kahlo Corporation para entablar negociaciones para el uso de los derechos cedidos¡±, afirma.
La disputa continuar¨¢ en los tribunales, y las posturas de las partes parecen irreconciliables: la familia defiende que Mara Romeo es ¡°la ¨²nica persona que puede solicitar y ceder las marcas relacionadas con Frida Kahlo¡± y que es la responsable de difundir una imagen de marca que sea ¡°congruente¡± con la artista, ¡°con su estilo de vida, con sus valores, con lo que ella representa¡±; el accionista mayoritario sostiene que ¡°la marca es de Frida Kahlo Corporation¡± y que la empresa se ha ¡°dedicado a cultivar el legado¡± de la pintora y ¡°a llevar al mundo la imagen de una mujer que es un icono¡±. Mientras tanto, el valor de la firma crece ¡°indiscutiblemente¡±. Eso es quiz¨¢s lo poco en lo que coinciden las dos partes; ese es el bot¨ªn que se disputan.
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