El esc¨¢ndalo de la tesis de Yasm¨ªn Esquivel pone en duda su idoneidad como ministra de la Suprema Corte

El esc¨¢ndalo por el plagio de la tesis de licenciatura de Yasm¨ªn Esquivel Mossa se agrava cada minuto que permanece en su puesto como ministra de la Suprema Corte. El cerco sobre la magistrada se ha vuelto m¨¢s estrecho despu¨¦s de que la Universidad Nacional Aut¨®noma de M¨¦xico, la UNAM, diera la raz¨®n a quienes se?alaban que el trabajo presentado por Esquivel en 1987 es un plagio de otro publicado un a?o antes por el abogado ?dgar Ulises B¨¢ez. La Facultad de Estudios Superiores (FES) Arag¨®n, perteneciente a la UNAM, determin¨® que se trata de una ¡°copia sustancial de la original presentada en 1986 por el exalumno de la Facultad de Derecho¡±, ha se?alado en un comunicado este mi¨¦rcoles. ¡°Est¨¢ fuera de lugar que contin¨²e en el puesto y mina la legitimidad de la Suprema Corte de Justicia de la Naci¨®n¡±, dice el abogado e investigador de la UNAM Tito Garza Onofre, en entrevista con este peri¨®dico.

La acusaci¨®n del plagio llegaba pocos d¨ªas antes de la elecci¨®n del nuevo presidente de la Suprema Corte, cargo que Esquivel disputaba y que acab¨® ganando Norma Pi?a, actual presidenta y la primera mujer en ocupar ese puesto. Esquivel lleg¨® a la segunda ronda de votaciones muy herida por el esc¨¢ndalo. En la segunda votaci¨®n obtuvo solo un apoyo, frente a los seis de Pi?a. La ministra, muy cercana al presidente L¨®pez Obrador, siempre se ha defendido de las acusaciones de plagio insistiendo en que el trabajo es de su autor¨ªa. El propio mandatario lleg¨® a defenderla y relacion¨® el esc¨¢ndalo de la tesis con un ataque a su Gobierno. ¡°El golpe tiene que ver con nosotros [el Gobierno] porque sostienen que ella es nuestra candidata, cosa que no es cierta¡±, dijo L¨®pez Obrador en una de sus conferencias matutinas.

Una a una, las pruebas que Esquivel ha presentado en su defensa le han ido explotando en las manos, hasta que el caso se ha derrumbado como si fuera un castillo de naipes. Adem¨¢s del se?alamiento de la UNAM, este viernes la prensa local publicaba que el notario Amando Mastachi rechaz¨® haber dado su aval al documento en el que supuestamente B¨¢ez declaraba que tom¨® varias referencias y texto de la tesis de Esquivel. Un documento que la ministra hab¨ªa presentado en diciembre como una de las pruebas a su favor. ¡°Ha perdido uno de los requisitos para ser ministra de la Suprema Corte, que es el de gozar de buena reputaci¨®n¡±, se?ala el abogado especializado en derechos humanos, Luis Tapia y agrega: ¡°Ha perdido toda credibilidad porque dijo que la tesis es original y minti¨®¡±.

Los expertos consultados por EL PA?S consideran que se trata del peor esc¨¢ndalo en la historia contempor¨¢nea de la Corte. ¡°Mantener a una ministra que no tiene los requisitos m¨ªnimos para ser licenciada en Derecho ser¨ªa un mensaje muy grave que estar¨ªa enviando la Corte a la sociedad mexicana y a la comunidad jur¨ªdica¡±, insiste Tapia.

En pleno debate sobre la idoneidad de Yasm¨ªn Esquivel para ocupar una silla en el Tribunal Supremo mexicano, el esc¨¢ndalo no ha hecho m¨¢s que crecer y cada vez son m¨¢s las voces que piden la dimisi¨®n de la magistrada. El Consejo General de la Abogac¨ªa Mexicana (CGAM) exigi¨® su renuncia inmediata. ¡°Por respeto a la sociedad mexicana, la Suprema Corte de Justicia de la Naci¨®n (SCJN) y al Estado de Derecho, se estima que la ministra Esquivel Mossa debe renunciar en los t¨¦rminos del art¨ªculo 98, tercer p¨¢rrafo de la Constituci¨®n Pol¨ªtica de los Estados Unidos Mexicanos¡±, reza el comunicado. A esta demanda tambi¨¦n se ha sumado la Asociaci¨®n Nacional de Abogados de Empresa (ANADE), la Barra Mexicana Colegio de Abogados (BMA), el Colegio de Abogados de M¨¦xico (INCAM) y otras organizaciones de la sociedad civil.

El art¨ªculo de la Constituci¨®n que recoge la renuncia de un ministro del Tribunal se?ala que solo podr¨¢n dimitir ¡°por causas graves y ser¨¢n sometidas al Ejecutivo, y si este las acepta, las enviar¨¢ para su aprobaci¨®n al Senado¡±. Javier Mart¨ªn Reyes, profesor e investigador del Instituto del Investigaciones Jur¨ªdicas de la UNAM, asegura que el caso se trata de una causa grave. ¡°No solo porque estemos ante un plagio, sino porque lo que plagi¨® fue la tesis que le permiti¨® obtener el t¨ªtulo profesional, que a su vez constituye uno de los requisitos que la Constituci¨®n marca para ser ministra de la Suprema Corte¡±, se?ala. Algo en lo que coincide Tapia.

El Comit¨¦ de Integridad Acad¨¦mica y Cient¨ªfica de la FES Arag¨®n que evalu¨® el plagio, turn¨® el caso a las autoridades universitarias, sin embargo, el rector, Enrique Graue, asegur¨® horas despu¨¦s que la UNAM no tiene competencias para retirar el t¨ªtulo de Esquivel, una decisi¨®n que recaer¨¢ en todo caso en la Secretar¨ªa de Educaci¨®n P¨²blica (SEP), dependencia encargada de emitir las c¨¦dulas profesionales. ¡°La normatividad universitaria carece de los mecanismos para invalidar un t¨ªtulo expedido por la Universidad Nacional, a¨²n y cuando el plagio de una tesis est¨¦ documentado¡±, explicaba el rector Graue en una carta.

¡°La actitud de la oficina de la Abogac¨ªa General de la UNAM fue pasar r¨¢pido la p¨¢gina¡±, critica Garza Onofre. ¡°Si se descubre que hubo fraude para tener el t¨ªtulo, por m¨¢s que no exista normatividad, es necesaria una reflexi¨®n sobre cu¨¢les ser¨ªan las v¨ªas para poder llegar a sancionar o tomar una determinaci¨®n¡°, refuta el investigador. ¡°Es un p¨¦simo antecedente no solo para la UNAM, sino para lo que significa la universidad y sienta un precedente negativo de que no pasa nada si plagias una tesis¡±, espeta. Por otro lado, el investigador critica que Esquivel no haya reaccionado ante el se?alamiento de que su tesis es un plagio: ¡°Me parece una sinverg¨¹enza¡±, dice con contundencia. ¡°Ella misma dijo que iba a acatar lo que dijera la UNAM¡±.

Tres d¨ªas despu¨¦s de conocerse el fallo de la UNAM, la ministra no ha presentado su renuncia ni ha hecho ninguna declaraci¨®n al respecto. Por el contrario, el jueves acudi¨® a la Suprema Corte en la ma?ana, se puso la toga y sesion¨® junto al resto de sus compa?eros como en un d¨ªa normal. Hizo uso de la palabra para votar, pero no dijo nada sobre el tema. Mientras la opini¨®n p¨²blica, juristas, pol¨ªticos y sociedad civil reclaman respuestas, la ministra permanece en silencio. ¡°Cada d¨ªa que pasa y en cada asunto que participe como jueza constitucional va a haber un desgaste de su imagen, de la imagen de la Suprema Corte y del poder judicial¡±, cuestiona Mart¨ªn Reyes.

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