Purificadoras de agua en Segalmex: la estafa de la inversi¨®n privada dentro del organismo p¨²blico
La paraestatal acord¨® con empresarios la instalaci¨®n de las plantas, perdi¨® dinero en hacerlas funcionar a cambio de quedarse con ellas en 2024, pero las instalaciones quedaron abandonadas, seg¨²n una investigaci¨®n de EL PA?S
En algunas de las comunidades apartadas de M¨¦xico, la ¨²nica bebida potable es un refresco. ¡°Entonces se necesita ofrecer una alternativa, pero una barata¡±. Las palabras sal¨ªan de la boca de Ignacio Ovalle, entonces director de Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex). Era junio de 2020 y el funcionario, una especie de padrino pol¨ªtico del presidente Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, presentaba su ¨²ltimo gran proyecto: iban a instalar 274 plantas purificadoras de agua en los almacenes que tiene la enorme red de abasto de alimentos para personas con menos recursos. Detr¨¢s, como en numerosas iniciativas que se gestaron con Ovalle al frente de este organismo, se escond¨ªa una trama corrupta. Un grupo de empresarios hab¨ªa acordado con la paraestatal montar un negocio que cre¨ªan iba a rendir frutos millonarios. Sin embargo, los inversores nunca recuperaron su dinero y la paraestatal perdi¨® fondos p¨²blicos que hab¨ªa invertido en servicios para que las plantas funcionaran. A cambio iba a quedarse con esas instalaciones en 2024, pero pasado el primer a?o de producci¨®n, las purificadoras quedaron completamente abandonadas.
¡°Ya iniciamos el establecimiento de 25 plantas, para abastecer de agua purificada a las comunidades donde estamos establecidos¡±, celebraba Ovalle en esa conferencia de prensa acompa?ado por el secretario de Agricultura y presidente del Consejo de Administraci¨®n de Segalmex, V¨ªctor Villalobos. La presentaci¨®n se hac¨ªa en 2020, pero el programaba se hab¨ªa gestado por lo menos un a?o antes. Documentos a los que tuvo acceso EL PA?S, se?alan que el acuerdo por las plantas de agua se logr¨® el 29 de julio de 2019, apenas ocho meses despu¨¦s de que L¨®pez Obrador llegara al poder. El convenio lo firm¨® Diconsa, el organismo encargado del abasto de alimentos que el presidente fusion¨® junto a la dependencia a cargo de la leche, Liconsa, bajo el nombre de Segalmex.
El titular de Administraci¨®n y Finanzas, Ren¨¦ Gavira Segreste, detenido la semana pasada por uso il¨ªcito de atribuciones y facultades, era el representante de Diconsa. Junto a ¨¦l firm¨® Manuel Lozano Jim¨¦nez, el exdirector comercial del organismo, ahora en prisi¨®n domiciliaria en Argentina. El contrato, bajo el nombre de convenio general de colaboraci¨®n, fue firmado con las empresas Grupo Andareya y MSG Minerales Sint¨¦ticos Granulados. Quien manejaba los hilos de esas compa?¨ªas era el empresario Fernando Zurita, ahora detenido por una compra fraudulenta de az¨²car. Su enviado, quien firmaba como representante legal del consorcio, era Eduardo Murillo Landeros, tambi¨¦n detenido en la causa judicial de Segalmex.
Uno de los documentos a los que tuvo acceso este peri¨®dico es un convenio para levantar 137 plantas purificadoras en la regi¨®n norte y centro del pa¨ªs. All¨ª ten¨ªan previsto producir garrafones de 20 litros de agua para vender en las tiendas de Diconsa. En el negocio, la subsidiara de Segalmex aportaba el espacio, se hac¨ªa cargo de los gastos por servicios como energ¨ªa el¨¦ctrica y agua potable de la red p¨²blica, el almacenamiento, la distribuci¨®n del producto, la recuperaci¨®n de los garrafones vac¨ªos y el suministro inicial de 500.000 envases de 20 litros vac¨ªos. Las empresas tendr¨ªan que poner ¡°la tecnolog¨ªa de modificaci¨®n molecular dise?ada para tratar aguas con contaminantes diversos¡±, llenar los envases con el agua tratada y ejecutar controles de calidad. Las ganancias iban a parar a los bolsillos privados.
La previsi¨®n de Diconsa era vender unos 10 garrafones de 20 litros por d¨ªa en cada tienda solo en la regi¨®n norte-centro, de acuerdo al Anexo A del Convenio General de Colaboraci¨®n. Luego gestaron otro convenio similar por la regi¨®n sur y centro de M¨¦xico. Para cada acuerdo, decidieron que iban a iniciar con un m¨ªnimo de producci¨®n de 3,9 millones de garrafones al mes. Las ventas que tuvieron, sin embargo, estuvieron muy por debajo de lo previsto: entre 2020 y 2021 vendieron en todo el pa¨ªs apenas 4,9 millones de pesos. Una aproximaci¨®n hecha por este peri¨®dico, con la idea de que los garrafones se vend¨ªan en 15.75 pesos, se?ala que el total de las ventas podr¨ªa haber sido de 314.300 en todo el pa¨ªs.
El acuerdo firmado establec¨ªa que el dise?o de los productos estaba a cargo tanto de Diconsa como de la empresa, mientras que la manufactura solo era responsabilidad de la parte privada. Segalmex se hac¨ªa cargo de comprar inicialmente garrafones para ¡°ser donados a los beneficiarios del programa¡±, una adquisici¨®n a trav¨¦s de la cual tambi¨¦n desfalcaron las arcas p¨²blicas, tal y como lo cont¨® este peri¨®dico.
Pese a que la fabricaci¨®n de las plantas purificadores se hizo a trav¨¦s de las empresas Grupo Andareya y MSG Minerales Sint¨¦ticos Granulados, la compra del agua se manejaba con otras dos compa?¨ªas vinculadas a Zurita: Gainmate Comedores Industriales y Servicios Integrales Carregin, esta ¨²ltima utilizada en un fraude con az¨²car. A estas dos empresas tambi¨¦n las representaba legalmente Murillo Landeros. La conexi¨®n entre las empresas puede verse incluso los documentos que registran el desarrollo de la instalaci¨®n de las plantas, que tienen el logo de Servicios Integrales Carregin.
La empresa Gainmate Comedores Industriales, fundada en 2008, cambi¨® su objeto como sociedad a inicios de 2021 para agregar justamente los negocios con el agua e incluy¨®: ¡°Otorgar servicios de almacenamiento de agua potable para consumo humano, aguas tratadas o derivados del agua para cualquier persona f¨ªsica o moral ya sea del ¨¢mbito privado o cualquier ente p¨²blico¡±. En ese mismo movimiento, nombraron como apoderado de la compa?¨ªa a Eduardo Murillo Landeros. Antes de 2020 no hab¨ªa recibido ninguna licitaci¨®n p¨²blica. No era el caso de Servicios Integrales Carregin, fundada en octubre de 2018, que en enero de 2020 obtuvo por adjudicaci¨®n directa un contrato con la alcald¨ªa de Iztapalapa.
Los primeros encargos que hizo Segalmex de garrafones de agua a estas empresas comenzaron en mayo de 2020, por lo menos dos meses antes del anuncio oficial, y los ¨²ltimos llegaron en septiembre de 2021. Para finales de ese a?o, las plantas purificadoras ya hab¨ªan dejado de producir y comenzaban a quedar abandonadas. M¨¢s all¨¢ de la desidia, el convenio en papel tiene vigencia hasta el 30 de septiembre de 2024, fecha en la que se supone que las empresas tienen que ceder las plantas a Diconsa.
Para garantizar que cumplir¨ªan con el servicio, las empresas dieron a Diconsa una fianza equivalente al 10% del monto m¨ªnimo mensual del convenio, es decir, por 391.200 garrafones o 6,1 millones de pesos, que en teor¨ªa quedaron en manos de Diconsa. De no cumplir las privadas con sus responsabilidades, el documento se?ala que no habr¨¢ necesidad de acudir a tribunales o exigir el cumplimiento forzoso o el pago de da?os sin que medie resoluci¨®n judicial. Este peri¨®dico consult¨® a Segalmex sobre las plantas, aunque no recibi¨® respuesta. Adem¨¢s se comunic¨® con el tel¨¦fono de las dos empresas asociadas para la fabricaci¨®n de las plantas, y la persona que atendi¨® cambi¨® de versi¨®n sobre si conoc¨ªa a las compa?¨ªas, primero dijo que s¨ª y luego que no, finalmente asegur¨® que era n¨²mero equivocado.
Empresarios que perdieron su inversi¨®n
Todas las plantas que s¨ª se levantaron se hicieron con dinero de empresarios privados. El costo de levantar cada una rondaba los 170.000 pesos. Fuentes conocedoras del acuerdo, que prefieren mantener el anonimato, se?alan que Zurita convenci¨® a tres hombres cercanos para invertir en este proyecto. Uno de ellos fue Hugo Rosales Badillo, exsecretario de Gobierno del Estado de Durango, quien seg¨²n esas versiones aport¨® dos millones de d¨®lares en efectivo. Posteriormente, y siempre de acuerdo a las mismas fuentes, se quej¨® ante la falta de avances en el proyecto y logr¨® recuperar 10 millones de pesos a trav¨¦s de una transferencia bancaria. Ese movimiento bancario lo ha dejado vinculado a la causa judicial.
El segundo inversor fue un empresario maderero del Estado de Chihuahua, que entreg¨® a trav¨¦s de una transferencia bancaria unos 18 millones de pesos, de acuerdo a estas fuentes que aseguran que Gonz¨¢lez no volvi¨® a ver ese dinero. El ¨²ltimo en invertir fue Luis Molleda C¨¢mara, un empresario que fue contratista regular del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) y falleci¨® en 2022. En su caso, el monto puesto fue de 160 millones de pesos, de acuerdo a personas conocedoras de las negociaciones. Este peri¨®dico intent¨® sin ¨¦xito comunicarse con los dos primeros y la familia del tercero.
La estafa de los garrafones
Como establec¨ªa el acuerdo de las plantas purificadoras, Segalmex estaba a cargo de comprar los garrafones vac¨ªos. Para eso firm¨® un convenio por 99,9 millones de pesos por alrededor de 1,8 millones de envases, de los cuales solo recibi¨® un tercio. EL PA?S revel¨® en marzo pasado un desfalco de al menos 51,6 millones de pesos en la adquisici¨®n de este producto en 2019. Los c¨¢lculos internos de la paraestatal se?alan que del total de los envases adquiridos solo se utilizaron unos 214.000. La raz¨®n radica en que la venta de agua estaba prevista que se hiciese en botellones de 20 litros. A pesar de eso, la paraestatal compr¨® envases m¨¢s peque?os: 605.850 piezas de 11 litros y 605.850 piezas de cinco litros.
El esquema de pagar todas las compras por adelantado y pedir el producto luego fue una medida que se impuso en la Administraci¨®n de Ovalle. No es un mecanismo regular en las contrataciones p¨²blicas y sirvi¨® para que los proveedores no entregaran en muchos casos la totalidad de lo comprado, generando un da?o a la Hacienda p¨²blica. As¨ª el desfalco dentro de Segalmex super¨® los 15.000 millones de pesos, seg¨²n la Auditor¨ªa Superior de la Federaci¨®n. La estafa se repiti¨® con la carne, el az¨²car y hasta las pilas, de acuerdo a lo que han revelado numerosas investigaciones period¨ªsticas. En el caso de la compra de los garrafones, solo se entregaron los de 20 litros, que eran los que se necesitaban para cumplir con el acuerdo. Un an¨¢lisis interno reconoce que Segalmex no sabe cu¨¢ntos garrafones recibi¨® en total, porque la paraestatal no llevaba un inventario completo con sus productos.
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