Fiscal¨ªa y Gobierno silencian la cacer¨ªa de la Armada en Nuevo Laredo en 2018
De las 34 investigaciones abiertas por la desaparici¨®n de 47 personas en el primer cuatrimestre de aquel a?o en la ciudad, unas se estancan en los despachos y otras se caen en los juzgados
A mediados del mes pasado, un tribunal federal tumb¨® uno de los casos de la Fiscal¨ªa federal contra la Armada mexicana, por la cacer¨ªa que marinos emprendieron contra presuntos integrantes del crimen local, a principios de 2018, en Nuevo Laredo, en el Estado de Tamaulipas. Por mayor¨ªa de tres votos, los magistrados decidieron que las pruebas que hab¨ªan presentado los fiscales no daban siquiera para procesar a los marinos. Los acusados eran nueve y la dependencia les acusaba de la desaparici¨®n forzada de Julio C¨¦sar Viramontes.
El caso Viramontes, que vuelve al punto de inicio, con el joven todav¨ªa en paradero desconocido, ilustra el desastre del Estado mexicano en uno de los casos paradigm¨¢ticos de violencia organizada desde las instituciones, en la historia moderna del pa¨ªs. Entre febrero y mayo de aquel a?o, 2018, elementos de la Armada desaparecieron a decenas de j¨®venes en la ciudad norte?a, situaci¨®n que provoc¨® la intervenci¨®n de la ONU y la posterior disculpa del mismo Estado, que enton¨® el mea culpa en un acto solemne en 2021 en la ciudad.
La Fiscal¨ªa General de la Rep¨²blica (FGR) abri¨® 34 investigaciones por la desaparici¨®n forzada de al menos 47 personas. La Secretar¨ªa de Marina anunci¨® la detenci¨®n de 30 elementos. La impresi¨®n es que el Gobierno entrante, comandado por Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, se tomaba en serio la situaci¨®n. Pero han pasado los a?os y aquel inter¨¦s se difumina, m¨¢s seg¨²n avanza el calendario y las elecciones se adivinan ya en el horizonte pol¨ªtico.
Este mi¨¦rcoles, las familias de ocho de los desaparecidos, han comparecido ante la prensa para denunciar la par¨¢lisis de sus casos y las sospechas sobre la impunidad de los marinos. El caso Viramontes no es el ¨²nico. El Comit¨¦ de Derechos Humanos de Nuevo Laredo, que representa a las v¨ªctimas, se?ala que de las 34 investigaciones abiertas, apenas ¡°cinco o seis¡± se han presentado al juzgado. Y que por los casos de 13 de las 47 v¨ªctimas, la FGR ni siquiera ha pedido la detenci¨®n de los marinos que supuestamente participaron en su desaparici¨®n.
No solo eso. El presidente del Comit¨¦ de Nuevo Laredo, una oeneg¨¦ local, Raymundo Ramos, se?ala que de los 30 marinos que la Armada detuvo en 2018, solo siete siguen en prisi¨®n. La Comisi¨®n Nacional de Derechos Humanos (CNDH), que public¨® un informe sobre el caso y pidi¨® al Estado reparase el da?o causado a las familias, explica Ramos, no ha dado seguimiento a sus propias recomendaciones. Y la Comisi¨®n Ejecutiva de Atenci¨®n a V¨ªctimas, a?ade, ¡°no ha hecho una sola reparaci¨®n¡±.
El caso Viramontes es paradigm¨¢tico. Su caso, de febrero de 2018, fue el primero en llegar al juzgado. Tambi¨¦n el primero en caerse. Ah¨ª, la culpa es repartida. El 19 de febrero de 2018, a la hora de comer, el carro en que circulaba Viramontes choc¨® con un veh¨ªculo de la Armada. Al parecer, los marinos les persegu¨ªan. Dos de los ocupantes del veh¨ªculo civil huyeron, no as¨ª el muchacho, que trat¨® de refugiarse en una casa cercana, seg¨²n consta en la sentencia del tribunal, a la que ha tenido acceso EL PA?S.
A partir de ah¨ª, lo ocurrido es un misterio. Se sabe qu¨¦ marinos estuvieron all¨ª, partiendo del teniente a cargo del convoy, Salvador Rodr¨ªguez. Se sabe que el choque existi¨®, como lo atestiguaron agentes de tr¨¢nsito de la ciudad. Pero las pruebas a partir de ah¨ª languidecen. En su d¨ªa, la Fiscal¨ªa defendi¨® en el juzgado que los marinos hab¨ªan llevado al joven a la base de Laguitos, por la ubicaci¨®n de su celular. Su familia encontr¨® adem¨¢s el veh¨ªculo chocado cerca de la instalaci¨®n de la Armada, situaci¨®n que los fiscales no alcanzaron a corroborar.
En su sentencia, los magistrados afean a la FGR una ¡°pasividad notable¡± en su investigaci¨®n, lo que consideran ¡°inadmisible¡± ?Tienen raz¨®n al estimar que las pruebas que ha entregado las Fiscal¨ªa son insuficientes? Sea como sea, el caso figura ahora fuera de la agenda pol¨ªtica. Su madre, la se?ora Erika Arredondo, dec¨ªa este mi¨¦rcoles que ya no espera justicia. ¡°Pero por lo menos que me regrese a mi hijo¡±, dijo.
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