El sacerdote Filiberto Vel¨¢zquez asegura que Los Tlacos y La Familia Michoacana pactaron una tregua
El director del Centro de Derechos Humanos Minerva Bello afirma que el acuerdo alcanzado este mi¨¦rcoles tiene como principal prop¨®sito el desarme
El sacerdote Filiberto Vel¨¢zquez, director del Centro de Derechos Humanos Minerva Bello, en Guerrero, ha asegurado la tarde de este jueves que los grupos criminales Los Tlacos y la Familia Michoacana han pactado una tregua este mi¨¦rcoles. ¡°El d¨ªa de ayer hubo este acuerdo y aclararte que es iniciativa de estos grupos y esto pone un precedente inclusive para los pol¨ªticos porque si entre los malos saben ponerse de acuerdo y dejan de pelearse y atacarse por el bien del pueblo, creo que tambi¨¦n los pol¨ªticos deber¨ªan de hacer lo mismo¡±, ha dicho el religioso en entrevista al periodista Jaime N¨²?ez.
La tarde de este jueves, las declaraciones del sacerdote a varios medios de comunicaci¨®n inundaron las redes sociales y los portales de noticias, despu¨¦s de que hace solo un par de d¨ªas las im¨¢genes que se repet¨ªan y difund¨ªan eran las de un enfrentamiento entre esos dos grupos, escenas de una masacre que mostraba el horror de asesinos que volv¨ªan a disparar a cuerpos ya sin vida, que luego ard¨ªan en una pira. ¡°El acuerdo tiene que ver con el desarme de estos grupos, no es cualquier cosa que depongan las armas, esto es lo principal. Ya de territorios o de reparticiones desconozco totalmente porque participaron exclusivamente los grupos, simplemente es la informaci¨®n que me han dicho y que me han permitido decir, es esa, que es verdad y que esperemos que dure y que el di¨¢logo contin¨²e¡±, dijo Vel¨¢zquez.
El enfrentamiento del lunes, en la comunidad de Las Tunas, en la zona colindante entre la Tierra Caliente y la sierra de Tlacotepec, ha dejado hasta ahora un saldo confirmado por las autoridades de 12 personas muertas, seg¨²n el ¨²ltimo reporte que ha hecho el propio presidente L¨®pez Obrador. Los Tlacos y La Familia Michoacana pelean desde hace m¨¢s de un a?o ese territorio. Un d¨ªa despu¨¦s del enfrentamiento, personal de la Sedena, Polic¨ªa estatal y Fiscal¨ªa de Guerrero lleg¨® al lugar en donde desplegaron un operativo que a¨²n se mantiene en la zona.
Tan solo cinco d¨ªas antes del enfrentamiento, varios obispos del Estado anunciaron un acuerdo paz entre dos de los c¨¢rteles que operan en el Estado. La Familia Michoacana qued¨® fuera del pacto. Seg¨²n el sacerdote, el acuerdo alcanzado este mi¨¦rcoles, se dio entre los dirigentes de la Familia Michoacana, los hermanos Jhonny y Jos¨¦ Alfredo Hurtado Olascoaga, y el de Los Tlacos, tambi¨¦n llamado C¨¢rtel de la Sierra, On¨¦simo Marquina.
Los religiosos: la vanguardia de los intentos de paz
A mediados de enero, los cuatro obispos de Guerrero ya se hab¨ªan citado en Ciudad Altamirano, en la regi¨®n de Tierra Caliente, con el objetivo de dialogar en persona con los l¨ªderes del grupo criminal La Familia Michoacana, Johnny Hurtado Olascoaga, alias El Pez, y su hermano, Alfredo, alias La Fresa, para tratar de sentar las bases de una tregua con el grupo criminal contrario, Los Tlacos, que dominan parte de la regi¨®n Centro y la sierra. Pese al intento, fracasaron.
La negociaci¨®n frustrada de Tierra Caliente contrastaba entonces con el acuerdo alcanzado en Chilpancingo para que Los Tlacos y otro grupo criminal con intereses en la zona, Los Ardillos, dejaran de pelear por las rutas de transporte locales, situaci¨®n queconfirm¨® el sacerdote Vel¨¢zquez. Con respecto a la tregua alcanzada este mi¨¦rcoles, Vel¨¢zquez apunta: ¡°No hubo ninguna intervenci¨®n de nadie, lo de los obispos en su tiempo fue una iniciativa, pero antes ellos ya ten¨ªan conversaciones. Todos hemos puesto de nuestra parte¡±.
Filiberto Vel¨¢zquez tiene 39 a?os y dirige desde hace cinco el Centro de Derechos Humanos Minerva Bello, cerca de Chilpancingo. Su nombre ha cobrado protagonismo este enero, por las denuncias que ha hecho de ataques armados en la sierra de Tlacotepec, inmersa en una disputa entre grupos criminales. El religioso despacha cada d¨ªa desde el centro, que levant¨® gracias a la venta de unos terrenos de su padre. Lleg¨® a Guerrero atra¨ªdo por el caso de los 43 estudiantes desaparecidos de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, que funciona en el municipio de Tixtla, no muy lejos del Minerva Bello. Pronto, estableci¨® un servicio de apoyo legal a los estudiantes de la escuela. A la vez, empez¨® a contactar a familiares de personas desaparecidas del Estado, con la idea de armar un frente com¨²n ante las autoridades.
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