Tatiana Cuevas, directora del MUAC: ¡°Hay que acercar m¨¢s a los j¨®venes al museo¡±

Es mitad de una ma?ana nublada en Ciudad de M¨¦xico y las primeras visitas ya se pasean por las salas del Museo Universitario de Arte Contempor¨¢neo (MUAC). La mayor¨ªa son j¨®venes, llevan ropas primaverales a pesar de que el cielo amenaza con desatar una de esas trombas t¨ªpicas de la ¨¦poca lluviosa de esta capital de clima desbocado, y caminan como si ya hubieran visitado decenas de veces estas salas y conocieran a la perfecci¨®n los rincones de una de las colecciones de Arte Contempor¨¢neo m¨¢s importantes de M¨¦xico y de Am¨¦rica Latina. Pasan muy cerca de Tatiana Cuevas (Ciudad de M¨¦xico, 49 a?os), quien posa sonriente para la c¨¢mara de la fot¨®grafa, minutos despu¨¦s de una charla con este peri¨®dico en la que ha recalcado que toma las riendas del MUAC con dos ideas muy fijas: la continuidad en la estrategia de un museo que ha cumplido 15 a?os atento a las tendencias que marcan el paso en el arte y con el inter¨¦s de atraer a las juventudes en momentos cuando las redes sociales y los dispositivos tecnol¨®gicos acaparan su atenci¨®n. ¡°Queremos que vuelvan a relacionarse con la realidad m¨¢s all¨¢ de las pantallas, a ejercitar esa capacidad de observar una obra¡±, afirma.

Cuevas lleva apenas seis semanas al frente del MUAC y est¨¢ en pleno proceso de transici¨®n. El museo tiene ya una programaci¨®n establecida para lo que resta del a?o y la nueva directora se muestra satisfecha con eso, porque, afirma, algunas de las exhibiciones ella las hubieras querido proponer. ¡°Es un museo que tiene tan clara su misi¨®n y sus alcances, que la primera seguridad que tuve es que no hay que hacer mucho m¨¢s, hay que continuar. Y eso tambi¨¦n me gener¨® una enorme tranquilidad, porque normalmente cuando uno toma un puesto de este tipo se suele pensar que tienes que cambiar las cosas, pero algo que he aprendido en mi trayectoria es que lo mejor que uno puede hacer es continuar y potenciar¡±, explica Cuevas, historiadora del Arte por la Universidad Iberoamericana y con una especialidad como curadora de arte contempor¨¢neo en el Royal College of Art de Londres. Ha trabajado en la Galer¨ªa Nacional de Arte Brit¨¢nico y Arte Moderno; el Museo de Arte de Lima, en Per¨²; y el Museo Tamayo y Museo de Arte Carrillo Gil, en Ciudad de M¨¦xico. Cuevas sustituye al frente del MUAC a Amanda de la Garza, nombrada subdirectora art¨ªstica del prestigioso Museo Reina Sof¨ªa, de Madrid.

La nueva directora cuenta, adem¨¢s, con un equipo con una gran experiencia, siempre dispuesto a esforzarse al m¨¢ximo porque cada muestra sea un ¨¦xito. Y es que la curadur¨ªa de este museo hace que sea placentera la visita a las exposiciones, como ocurre actualmente con la de la colombiana Beatriz Gonz¨¢lez, titulada Guerra y paz: una po¨¦tica del gesto, que con su arte presenta el desgarro de la violencia, la esperanza de la paz y la importancia de la memoria. Cuevas dice que eso es lo que quiere potenciar en el museo: que se convierta en un espacio para la reflexi¨®n. Y un lugar donde los j¨®venes puedan encontrarse para discutir sobre temas que los provoquen.

El 40% de las visitas del museo, dice Cuevas, son precisamente j¨®venes, porque el MUAC tiene la ventaja de formar parte de la Universidad Nacional Aut¨®noma de M¨¦xico (UNAM), pero ella quiere ampliar esas fronteras. ¡°Suelen considerarse los museos como una alternativa aparte de todos las otras posibilidades de esparcimiento. El MUAC es uno de los museos donde los j¨®venes se acercan casi de manera natural, vienen y ven las exposiciones y est¨¢n tambi¨¦n en presentaciones de libros, pero sin duda hay que acercarlos m¨¢s, y eso sin dejar el equilibrio o el contraste que ha manejado siempre la programaci¨®n del museo: entre revisiones historiogr¨¢ficas, otras m¨¢s documentales, pr¨¢cticas que son mucho m¨¢s seductoras en t¨¦rminos visuales y otras que son m¨¢s seductoras en t¨¦rminos acad¨¦micos, pero tambi¨¦n ser m¨¢s sensibles a nuevas posibilidades de creaci¨®n art¨ªstica. No son las grandes trayectorias las ¨²nicas que debemos presentar¡±, afirma la directora.

Para lograr una nueva generaci¨®n de espectadores, Cuevas ha pensado en dos estrategias: llevar el arte a las escuelas, bachilleratos y preparatorias y acercarse a artistas j¨®venes, que pueden sentir que los grandes recintos del arte les dan la espalda. ¡°Es una generaci¨®n que est¨¢ en ese momento en el que puede descubrir muchas cosas, ya sea a trav¨¦s del arte, simplemente por el inter¨¦s de acercarse y encontrar nuevas maneras de ver el mundo, pero tambi¨¦n como quehacer, como reflexi¨®n, como posibilidad¡±, explica. La directora ha pensado en retomar el proyecto El MUAC en tu casa, que el museo desarroll¨® con una comunidad del sur de Ciudad de M¨¦xico. El recinto entregaba una obra a una familia y sus integrantes se encargaban de cuidarla y compartirla con los vecinos. ¡°Queremos llevarlo ahora a las escuelas y que los alumnos y las alumnas se encarguen de toda esa gesti¨®n. Tambi¨¦n queremos acercarlos al quehacer de un museo haci¨¦ndolo ellos mismos, mediar la pieza con sus compa?eros. Hacer talleres, conversaciones, temas que surjan a partir de nuestras obras para poder enriquecer las preocupaciones que tienen los chicos. Lo que todo museo busca no es un visitante de una vez, sino un visitante recurrente, que est¨¦ aqu¨ª varias veces al a?o¡±, recalca Cuevas.

A Cuevas le ha preocupado de forma sensible un reciente estudio sobre el consumo de informaci¨®n en medios digitales del Instituto Reuters, que revela de que los medios tradicionales est¨¢n siendo desplazados por las redes sociales, sobre todo por TikTok, aplicaci¨®n de videos a la que cada vez m¨¢s j¨®venes acuden para informarse, con los riesgos que eso puede implicar en un mundo virtual donde abundan los bulos y las informaciones falsas. Es decir, estamos frente a una generaci¨®n cada vez m¨¢s pegada a la pantalla. Cuevas dedica parte de sus horas de trabajo a entender lo que ella llama esa ¡°vor¨¢gine de consumo de informaci¨®n digital¡± y de redes sociales para hacer que los p¨²blicos ¡°vuelvan a relacionarse con la realidad¡±. Entiende la importancia de las redes ¡ªde hecho el museo las usa para atraer visitas¡ª, pero tambi¨¦n le gustar¨ªa que las personas encuentren en el MUAC un momento para desconectar. ¡°Creo en el ejercicio de detenerse ante una pieza de video, pict¨®rica, escult¨®rica, pero detenerte, no estar consumiendo y navegando, poder ejercitar de nuevo esa capacidad de observar y descifrar qu¨¦ es lo que esta imagen me est¨¢ diciendo y no tomarla digerida como lo tienes en todas las dem¨¢s plataformas¡±, dice Cuevas.

La otra estrategia, enfocada en la nueva generaci¨®n de artistas, pasa por dedicar una sala para exponer a esos nuevos realizadores, ayudarlos a desarrollar sus proyectos art¨ªsticos con el respaldo del equipo del museo. Y es que Cuevas dice que ve el arte contempor¨¢neo en M¨¦xico ¡°con una riqueza y una una energ¨ªa que creo es incluso inabarcable¡±, pero que sigue necesitando del respaldo de instituciones de prestigio como el MUAC para que esas nuevas propuestas puedan visualizarse. ¡°La colaboraci¨®n de las generaciones m¨¢s j¨®venes de artistas es un mecanismo de reconocimiento a lo que est¨¢ haciendo cada uno de ellos¡±, reconoce. La directora advierte, sin embargo, que no se trata de cuotas, como en alg¨²n momento se pens¨® para abrir mayores espacios a artistas mujeres y de la comunidad LGBTI. ¡°S¨ª, evidentemente continuar¨¢ la lucha por una mayor igualdad, un mayor equilibrio, pero ya no con base en la comunidad que necesita ser visibilizada. Creo que m¨¢s bien se trata de las propuestas, que tu propuesta sea relevante. Fue muy err¨®neo en alg¨²n momento esto de cuotas que tenemos que cubrir, aunque lo que nos debe conducir s¨ª es una conciencia de no cargar la mano a un lado o al otro¡±, argumenta.

Cuevas afirma de que se siente ¡°emocionada¡± con el nuevo reto que significa llevar las riendas del MUAC y todos los proyectos culturales que giran al rededor del museo. Lo ve, dice, como un reconocimiento a su trayectoria. ¡°Cuando me llamaron para formar parte de la terna, sent¨ª absoluta emoci¨®n, decir que todo el trabajo que he hecho ha valido la pena, se ha visto. Cuando me pidieron preparar un anteproyecto para ver qu¨¦ har¨ªa yo con este museo, me sent¨¦ a trabajarlo y de pronto dije ¡®s¨ª, s¨¦ qu¨¦ hacer¡¯. Creo que si esta oportunidad me hubiera llegado antes, no s¨¦ si hubiera podido responder con tanta facilidad y ciertamente la experiencia del Carrillo Gil fue como para m¨ª la vuelta de tuerca en entenderme desde otra perspectiva, no ya no solo de lo curatorial, sino poder gestionar, conducir y construir a mayor escala¡±, reconoce la nueva directora del MUAC.

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