La reforma judicial hiere de muerte a la oposici¨®n
La escasa ventaja legislativa del PRI, PAN y MC se ha deshecho en la discusi¨®n de la enmienda constitucional. Morena tiene ahora mayor¨ªa calificada en el Congreso y los liderazgos de la minor¨ªa han quedado en entredicho
La oposici¨®n mexicana ha quedado herida de muerte, tras la aprobaci¨®n de la reforma judicial este martes en el Senado. PAN, PRI y Movimiento Ciudadano (MC) han perdido la primera y m¨¢s importante de las batallas legislativas de una temporada reci¨¦n estrenada, una prueba de fuego despu¨¦s de la elecci¨®n del 2 de junio. Tres esca?os, incluso uno, eran suficientes para que la oposici¨®n detuviera la aplanadora de Morena y sus aliados, en una reforma constitucional como la que planteaba el oficialismo. Pero el frente opositor se deshizo. En un par de semanas perdieron tres senadores, cuatro si se cuenta a Daniel Barreda, de MC, ausente el martes a consecuencia de un extra?o episodio que, seg¨²n ¨¦l, le oblig¨® a quedarse en Campeche.
La oposici¨®n ha perdido la llave del Senado, el n¨²mero suficiente de legisladores (43), para evitar que Morena, el PVEM y el PT tengan mayor¨ªa calificada, necesaria para aprobar reformas constitucionales. A cambio de la llave perdida, PRI, PAN y MC, sobre todo los ¨²ltimos dos, se quedan ahora con el descr¨¦dito. Las viejas pr¨¢cticas para cooptar votos empleadas por el oficialismo para alcanzar la mayor¨ªa calificada quedan ahora en segundo plano. Nueve d¨ªas bastaron, desde el inicio de la 66 Legislatura, para doblegar al grupo de senadores opositores. El PAN y MC no supieron advertir sus puntos flacos, el mismo Barreda y el senador panista Miguel ?ngel Yunes, uno por ausente y el otro por votar a favor de la reforma. El desgaste y el desprestigio de ambos partidos han sido de mayores dimensiones, sobre todo porque la traici¨®n apuntaba org¨¢nicamente al PRI, el ¨²nico que ha resistido.
El voto del senador Miguel ?ngel Yunes M¨¢rquez y la sospechosa ausencia del legislador Daniel Barreda han dado un golpe mortal a la oposici¨®n. Las cartas parec¨ªan estar echadas desde que el nuevo Congreso iniciara labores, el 1 de septiembre, en la C¨¢mara de Diputados. Morena y sus aliados mostraron el m¨²sculo de su supermayor¨ªa a una disminuida oposici¨®n, visiblemente disgregada. En la C¨¢mara baja no se perfilaba un escenario distinto al que ocurri¨®. Con 364 legisladores, muy por encima de los dos tercios del parlamento ¡ªla mayor¨ªa calificada equivalente a 334 votos¡ª el bloque gobernante se garantizaba la aprobaci¨®n de la enmienda constitucional. Sin embargo, la falta de unidad en la cancha opositora era evidente. En ese momento el PAN se animaba y dec¨ªa que ellos eran ¡°la resistencia¡±, proclama que no pudieron sostener en el Senado.
Con un voto de ventaja, la ¨²nica esperanza de la oposici¨®n estaba en el Senado, y en que los 43 senadores ¡ª22 del PAN, 15 del PRI, cinco de MC y Manlio Fabio Beltrones¡ª resistieran los embates y las tentaciones, en v¨ªsperas de la discusi¨®n de la pol¨¦mica enmienda, que tiene como punto m¨¢s controvertido la elecci¨®n de jueces, ministros y magistrados en las urnas, por voto popular. La campa?a emprendida los ¨²ltimos d¨ªas por la Marea Rosa y Unid@s, movimientos que agrupan a organizaciones de la sociedad civil cr¨ªticas con Morena, para presionar a la oposici¨®n y comprometerlos a votar en contra de la reforma judicial, fue est¨¦ril.
El golpe ha calado por partida doble al dirigente del PAN y senador, Marko Cort¨¦s. La deslealtad, seg¨²n ¨¦l, ha venido de un militante y amigo, Yunes M¨¢rquez. ¡°Hubiera sido m¨¢s decente, querido amigo, que nos hubieras tomado la llamada y nos hubieras dicho ¡®voy a traicionarlos¡®. Hubiera sido m¨¢s decente¡±, dijo visiblemente afectado el l¨ªder panista, en una de sus intervenciones en el Senado.
Desde el otro flanco de la oposici¨®n, el de MC, las suspicacias aparecieron como un ventarr¨®n en medio de la resaca de la derrota. ¡°Pese al embate, la obligaci¨®n del senador Barreda era asistir a la sesi¨®n y votar en contra. Esa era la mejor forma de proteger la integridad de quienes sufren una injusticia en M¨¦xico¡±, ha publicado Jorge ?lvarez M¨¢ynez, excandidato presidencial de MC. El senador Barreda, que no asisti¨® a la votaci¨®n, presuntamente se mantuvo por horas en una sala de juicios orales en el Estado de Campeche, en apoyo a su padre detenido, de acuerdo con su declaraci¨®n. Mientras tanto, en Ciudad de M¨¦xico, el Senado ard¨ªa y su bancada expon¨ªa p¨²blicamente la supuesta detenci¨®n ilegal. Ya entrada la noche, coincidentemente con el inicio de la votaci¨®n en lo general de la reforma, el emecista pudo salir, sin posibilidades de llegar a la votaci¨®n.
Las m¨²ltiples declaraciones sobre los casos de Yunes y Barreda por parte del operador de Morena en el Senado, Ad¨¢n Augusto L¨®pez, han alimentado el recelo. En el momento de la votaci¨®n, L¨®pez dijo: ¡°Para servir al pueblo de M¨¦xico. Y con un saludo al escapista Daniel Barreda, a favor¡±. El senador lo dijo con el rostro sonriente, que provoc¨® m¨¢s de una atrevida carcajada entre sus correligionarios.
Las organizaciones de la sociedad civil, tambi¨¦n afectadas por la votaci¨®n en el Senado, se han unido en una especie de campa?a para exhibir a los tr¨¢nsfugas. ¡°Los traidores tienen un lugar reservado en el ¨²ltimo c¨ªrculo del infierno de Dante Alighieri. Porque la confianza rota es una herida que ni el tiempo sana. Ellos son: Jos¨¦ Sabino Herrera, Araceli Saucedo, y Miguel ?ngel Yunes Linares, por apu?alar a sus votantes y vender a M¨¦xico; y a Daniel Barreda, por haberse ausentado (ir a atender un ¡°asunto personal del pap¨¢¡± no justifica su ausencia)¡±, se lee en publicaciones que circulan en redes sociales y que han hecho suyas personajes como Claudio X. G¨®nzalez.
Con la imagen debilitada, la ¨²ltima ofensiva de la oposici¨®n ha pasado al terreno judicial. Con el 27% de representaci¨®n en la C¨¢mara de Diputados, est¨¢ imposibilitada para presentar acciones de inconstitucionalidad y tratar de detener la reforma. El art¨ªculo 105 de la Constituci¨®n establece que para interponer este recurso legal se deben reunir el 33% de las firmas de los legisladores de cada C¨¢mara. La misma regla y facultad aplica para las legislaturas de los Estados. Con este panorama jur¨ªdico la ¨²nica esperanza en el Legislativo recae nuevamente en el Senado. Con 41 esca?os (descontando a Yunes y Barreda), PAN, PRI y MC pueden presentar, previa aprobaci¨®n de al menos 17 congresos locales y su publicaci¨®n en el Diario Oficial de la Federaci¨®n, el recurso ante el Supremo mexicano, tambi¨¦n con facultades para atraerlo de oficio.
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