La complicada misi¨®n de llevar la reforma judicial a tribunales internacionales
Un grupo de jueces mexicanos logra una primera una audiencia con la Comisi¨®n Interamericana para exponer sus razones jur¨ªdicas contra la enmienda a la Constituci¨®n que ya ha sido validada por la Suprema Corte
La batalla de los jueces para frenar la reforma que altera su carrera profesional no ha visto su fin. La resoluci¨®n de la Suprema Corte mexicana, que ha dejado intacta la enmienda y con ello la elecci¨®n de jueces, magistrados y ministros por votaci¨®n popular, no es la ¨²ltima trinchera. El camino jur¨ªdico en M¨¦xico es largo, aunque con pocas posibilidades de obtener un resultado distinto. La Corte a¨²n deber¨¢ resolver las controversias constitucionales y recursos de amparo antes de dar carpetazo al asunto. En paralelo, los juzgadores han iniciado la complicada misi¨®n de llevar la enmienda a tribunales internacionales. Juana Fuentes Vel¨¢zquez, directora de la Asociaci¨®n Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito del Poder Judicial de la Federaci¨®n (JUFED), ha conseguido, junto con un pu?ado de representantes de otros sectores judiciales, una audiencia este martes ante la Comisi¨®n Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), con sede en Washington. En el encuentro p¨²blico, los interesados fundamentar¨¢n sus argumentos en dos ejes: la independencia judicial, los derechos de los ciudadanos y los laborales de los cientos de jueces y magistrados que han sido destituidos de sus cargos para someterlos a voto popular.
En una primera instancia, ser¨¢ la comisi¨®n la que se encargar¨¢ de analizar e investigar la controversia. Posteriormente y en caso de avanzar, ser¨ªa la Corte interamericana la que podr¨ªa llegar a ordenar al Estado mexicano frenar los efectos de la reforma. Los juzgadores mantienen la esperanza, entre otras cosas, porque existe antecedente de casos similares en Am¨¦rica Latina que han tenido ¨¦xito. ¡°Otros jueces y magistrados han acudido a la Corte interamericana a impugnar los actos de su Estado, por ejemplo Per¨². Hay una clara expectativa de que tras el di¨¢logo con la comisi¨®n pudi¨¦ramos establecer un punto de acuerdo con el Estado mexicano. Puede pasar un buen tiempo, s¨ª, cinco, siete, diez a?os. Pero hay precedentes de reparaci¨®n integral, algo que se impondr¨ªa al Estado mexicano a favor de los jueces y magistrados que estamos siendo destituidos de esa forma¡±, explica Fuentes.
Los juzgadores no han quitado el dedo del rengl¨®n para que los recursos jur¨ªdicos que a¨²n faltan en M¨¦xico lleguen a buen puerto, pese a la votaci¨®n del martes que les cay¨® como balde de agua helada. El ministro Alberto P¨¦rez Day¨¢n, con su voto en contra, sepult¨® la primera y m¨¢s fuerte esperanza de matizar la elecci¨®n judicial y suspender una buena parte de la reforma. ¡°Tenemos pendientes las controversias constitucionales, lo que resolvimos el martes fueron acciones de inconstitucionalidad que promovieron los partidos. Sin embargo, debo ser muy franco y no despertar falsas expectativas¡±, dijo el ministro Javier Laynez Potisek en una entrevista transmitida en Milenio. La ¨²ltima batalla se encamina a que sea en tribunales fuera del pa¨ªs, coincide. ¡°Quedan, en lo individual o de manera colectiva, acciones que podemos interponer a nivel internacional. Los jueces y magistrados lo hicieron desde hace meses ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos¡±.
A la audiencia de este martes, adem¨¢s de la directora de la JUFED, tambi¨¦n asisten Rosa Elena Alonzo, en representaci¨®n del Colegio de Secretarios y Actuarios; V¨ªctor Manuel Rodr¨ªguez, del Instituto Internacional de Responsabilidad Social y Derechos Humanos, as¨ª como un representante del Estado, de nombre a¨²n desconocido. Las cartas que los jueces han preparado para exponer ante la Corte interamericana son dos: ¡°La independencia judicial como un derecho humano no solo de los juzgadores, sino de la ciudadan¨ªa, afectada al establecer la elecci¨®n popular para los jueces y magistrados. Por otro lado, los derechos adquiridos que tenemos de que no se nos destituya¡±, a?ade Fuentes.
La audiencia ser¨¢ el primer paso de un largo camino. Queda un largo proceso para llegar a la Corte Interamericana. ¡°De prevalecer la violaci¨®n y si no hay conciliaci¨®n o una pl¨¢tica que lleve a minimizar el da?o a jueces y magistrados, entonces se abre la puerta para promover ante la Corte interamericana las acciones jur¨ªdicas, el equivalente a una demanda¡±, explica la jueza, una de las voces m¨¢s activas en defensa de los derechos de los impartidores de justicia.
Adriana Greaves, experta en Derecho Internacional y cofundadora de Tojil, organizaci¨®n sin fines de lucro integrada, en su mayor¨ªa, por abogadas contra la impunidad, reconoce que la audiencia ya es por s¨ª sola importante. ¡°Tienen un pie dentro¡±, pero es apenas el inicio de un proceso que depender¨¢ de m¨²ltiples factores para que pueda tener repercusiones en favor de los afectados. ¡°Va a depender mucho de c¨®mo sea planteada la petici¨®n. Lo que s¨ª puedo adelantar es que los efectos de cumplimiento van a ser muy complicados¡±, refiere.
A la esperanza de los jueces se suman los antecedentes, la Corte Interamericana ya se ha pronunciado respecto a esta reforma judicial y no en los mejores t¨¦rminos. En septiembre manifest¨® su ¡°grave preocupaci¨®n¡± por la aprobaci¨®n de la enmienda, sus argumentos se han encaminado a los posibles impactos negativos en el derecho de acceso a la justicia, en las garant¨ªas de independencia judicial y en la vigencia del Estado de derecho. ¡°Ya tienen una audiencia p¨²blica, es un gran camino y lo hicieron de manera muy expedita, se ve que s¨ª hay inter¨¦s de la comisi¨®n por escuchar en d¨®nde puede estar la violaci¨®n a los derechos humanos. Tienen un pie dentro¡±, concluye Greaves.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.