El apoyo de los sindicatos a las candidaturas revive fantasmas del corporativismo mexicano
El l¨ªder sindical de Pemex ha pedido el voto para Claudia Sheinbaum en un nuevo contexto pol¨ªtico que no ahuyenta del todo el desprestigio que lastra a las dirigencias obreras
El apoyo del l¨ªder sindical de Pemex a la candidata de Morena, Claudia Sheinbaum, es un arma de doble filo. El sindicato petrolero no se ha deshecho a¨²n de su aura priista, es decir, de a?os de espurio matrimonio con el partido en el poder, de la corrupci¨®n, fraude y enriquecimiento que caracterizaron a su ¨²ltimo l¨ªder, Carlos Romero Deschamps, durante 26 a?os, cuando las elecciones llevaban el sello de los acarreados, millones de trabajadores que se ve¨ªan impelidos a dar su voto por un presidente bajo las amenazas sindicales mientras los l¨ªderes de estas organizaciones viv¨ªan como millonarios. Hoy, Ricardo Aldana, sucesor de aquel, ha reunido a sus huestes y ha pedido el voto por Sheinbaum, ¡°no por Morena, no somos Morena¡±, ha dicho.
Los expertos consultados para este reportaje son conscientes de lo que pesa el s¨ªmbolo corporativista del gran sindicato petrolero para una opci¨®n pol¨ªtica, pero se muestran confiados en un ¡°nuevo contexto¡± emanado de las reformas laborales de este sexenio, que han abierto las puertas a la democracia sindical. Como ocurre en cualquier pa¨ªs occidental, explican, los sindicatos pueden exigir a los candidatos compromisos en favor de los trabajadores y prestarles su apoyo a cambio. Qu¨¦ tanto sea cautivo ese voto depende, de nuevo, de la democracia y autonom¨ªa que hayan ido conquistando los trabajadores.
Romero Deschamps renunci¨® al cargo en 2019 acosado por las presiones del nuevo Ejecutivo de Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador y la Fiscal¨ªa, lo que se interpret¨® como un s¨ªmbolo de que algo se estaba moviendo. Acuciado por Estados Unidos y el Tratado de Libre Comercio, la reforma laboral mexicana estableci¨®, entre otras garant¨ªas, un nuevo sistema de voto libre y secreto para los trabajadores sindicados que tuvo algunos momentos esperanzadores, sobre todo en el sector automotriz. La expectaci¨®n era m¨¢xima cuando se celebraron las elecciones sindicales en la paraestatal Pemex, pero el resultado dej¨® fr¨ªo a quien esperaba cambios sustanciales. Ricardo Aldana, tesorero y del c¨ªrculo cercano al antiguo l¨ªder, se alz¨® con el 70% de los votos y cerca de 200 quejas de irregularidades reportadas ante la Secretar¨ªa del Trabajo. El asunto segu¨ªa oliendo al viejo sistema cocinado durante d¨¦cadas priistas.
La novedad es que hoy no hay un partido ¨²nico y el PRI integra una alianza con las derechas del PAN para conquistar las urnas. ?A qui¨¦n van a apoyar los grandes sindicatos? La pr¨¢ctica de las democracias m¨¢s s¨®lidas indica que pueden hacerlo por quien quieran. ¡°Que desde Pemex se env¨ªe una se?al de voto corporativo ser¨ªa algo negativo, sugiere tiempos que ya se quisieron dejar atr¨¢s, pero eso no quiere decir que los sindicatos no tengan opciones pol¨ªticas como en cualquier parte del mundo¡±, empieza Graciela Bensus¨¢n, experta en sindicalismo de la Universidad Aut¨®noma Metropolitana en el campus de Xochimilco. ¡°Es consustancial el intercambio pol¨ªtico y sindical, el di¨¢logo para conseguir mejoras para los trabajadores¡±, afirma, ¡°ya no estamos en aquellas ¨¦pocas en las que hab¨ªa un v¨ªnculo org¨¢nico, un compromiso recogido en los estatutos. Aldana puede sugerir un voto por Sheinbaum, algo que quiz¨¢ veremos por parte de otros sindicatos y quiz¨¢ por otros partidos. Lo que hay que analizar es qu¨¦ efecto tenga entre los trabajadores aludidos, si ser¨¢ respetado este reclamo del l¨ªder¡±, explica.
Si as¨ª fuera, la candidata morenista se garantizar¨ªa m¨¢s de medio mill¨®n de votos, pero, como inform¨® el diario Reforma, cuando Aldana pidi¨® el apoyo para Sheinbaum en una reuni¨®n reciente con la direcci¨®n sindical y los l¨ªderes seccionales a puerta cerrada, recibi¨® algunos abucheos. Eso tambi¨¦n es significativo de cierto aperturismo entre los trabajadores, que ya no se someten a la disciplina f¨¦rrea que antes impon¨ªa la dirigencia. Pero todo est¨¢ por verse. Los empleados de Pemex y sus familias gozan de unas condiciones en el terreno laboral y de servicios sanitarios y pensiones muy distintas de otros sectores, que se han ido ganando en ese intercambio pol¨ªtico y sindical, un contrato colectivo privilegiado.
El asunto es qu¨¦ alternativas pol¨ªticas pueden considerar los millones de empleados en M¨¦xico. ¡°Este sexenio ha sido muy destacado en las pol¨ªticas laborales, quiz¨¢ las m¨¢s progresistas de todas¡±, opina Bensus¨¢n, y menciona los salarios m¨ªnimos por encima de la inflaci¨®n, as¨ª como las pensiones, que quieren reformarse para alcanzar el 100% de lo cobrado en la vida activa, sin olvidar la reforma laboral y el aperturismo sindical. ¡°Votar libremente no quiere decir que haya mejores opciones para hacerlo. Ahora hay debate pol¨ªtico, pero ?alternativas?¡±, se?ala la autora de m¨¢s de 20 libros sobre sindicalismo en M¨¦xico.
Muy parecido opina Alfonso Bouzas Ortiz, coordinador del Observatorio Ciudadano de la Reforma Laboral e investigador de Estudios del Trabajo de la UNAM, quien tambi¨¦n habla de un ¡°nuevo contexto¡± pol¨ªtico y sindical en M¨¦xico. Aldana, dice, ¡°ya no habla desde el partido [¨²nico] sino desde su lugar sindical y vende su apoyo a cambio de di¨¢logo que contemple los intereses de los trabajadores¡±. ¡°Lo veo con buenos ojos, tambi¨¦n los candidatos tienen el derecho de tocar todas las puertas en busca de votos y de perseguir su mayor¨ªa electoral¡±, sugiere. A su parecer, ¡°el escenario de fondo ahora es el desmoronamiento del sindicalismo tradicional, donde las organizaciones han sido bien tratadas. Ahora negociar¨¢n su papel en la construcci¨®n de la pol¨ªtica nacional¡±.
Los expertos opinan que es el electorado, sindicalizado o no, quien tiene que transitar hacia una democracia plena, como ocurre tambi¨¦n con las elecciones sindicales, un cambio cultural, en definitiva.
La inc¨®gnita de la CNT
Hay que observar, adem¨¢s, si en el transcurso de la campa?a electoral, los diversos sindicatos se decantan por otras opciones pol¨ªticas. En los ¨²ltimos comicios de Coahuila, por ejemplo, el gran l¨ªder de la Confederaci¨®n de Trabajadores de M¨¦xico (CNT), Carlos Aceves del Olmo, apoy¨® al priista Manolo Jim¨¦nez Salinas, que logr¨® la gubernatura. No en vano, el hist¨®rico dirigente de la CNT, con 83 a?os, es senador del PRI, aunque en su calidad de l¨ªder sindical se sienta a la mesa con el presidente del Gobierno el d¨ªa del Trabajo. Combinar un puesto pol¨ªtico con uno sindical y reunirse con el presidente de turno en lugar de acudir a las manifestaciones del 1 de mayo son algunas de las peculiaridades del sindicalismo mexicano. El propio Aldana declar¨® en esa fecha el a?o pasado: ¡°No hay ning¨²n problema con el Ejecutivo federal, estamos perfectos¡±.
La relaci¨®n de los sindicatos con el priismo ha sido tan estrecha que la nueva coyuntura pol¨ªtica puede deparar sorpresas. El PRI y el PAN caminan ahora juntos y cabe la posibilidad de que algunas centrales sindicales decidan apoyar esta alianza, mientras que otras opten por Morena. Si se atiende a la trayectoria de los grandes sindicatos, puede esperarse de ellos cualquier cosa, acostumbrados, como estaban, a poner gobernadores y apoyar al candidato que fuera a resultar ganador. Esa era la inercia de la que todav¨ªa no est¨¢n libres del todo.
El abogado y experto en sindicalismo Arturo Alcalde es de los que opinan que los trabajadores no deben ponerse del lado de la derecha, ¡°sino contrarrestar su fuerza¡± y cree que en este momento hay una corriente pol¨ªtica en M¨¦xico que les beneficia, Morena, por lo que ve ¡°positiva¡± la definici¨®n del l¨ªder de Pemex a favor de la candidata Sheinbaum. Pero es consciente del desprestigio que arrastran algunos sindicatos y alerta de que ¡°tanto quienes acepten estos apoyos como quienes los ofrezcan deben respetar la autonom¨ªa sindical y dejar claro que no pretenden reproducir viejos esquemas, para que no sea contraproducente¡± en t¨¦rminos pol¨ªticos. ¡°Se trata de preservar la autonom¨ªa entre los partidos pol¨ªticos y sindicatos, pero estos pueden coincidir con ciertos programas electorales que les son m¨¢s favorables a sus intereses como trabajadores¡±.
Defensor de la llamada Cuarta Transformaci¨®n del presidente Obrador, Alcalde cree que el actual sexenio ha roto obst¨¢culos del pasado en este ¨¢mbito y ha avanzado ¡°hacia la protecci¨®n salarial, la justicia y la libertad de los trabajadores. Sheinbaum est¨¢ en esa misma l¨ªnea, en clara alianza con los intereses populares, no en las viejas alianzas falsas que eran m¨¢s con los l¨ªderes que con los empleados¡±, afirma. ¡°El voto libre hay que preservarlo¡±, dice, y no le incomoda ¡°un posicionamiento pol¨ªtico por parte de las organizaciones sindicales, sea Pemex o no sea Pemex¡±. Preguntado por la imagen que esto pueda dar, opina: ¡°Claro que hay riesgo, es f¨¢cil que [estos apoyos] se asocien con el viejo esquema de las organizaciones sindicales vinculadas al Estado¡±.
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