Quer¨ªan prensa cr¨ªtica. Ahora ya no
Personas que antes pensaban que el periodismo cr¨ªtico e independiente era una condici¨®n necesaria para la democracia, ahora consideran que reportajes sobre corrupci¨®n u opacidad en el Gobierno son un intento golpista para derrocarlo
En diciembre de 2017, el acad¨¦mico John Ackerman public¨® un art¨ªculo deplorando el alto n¨²mero de periodistas asesinados ese a?o en M¨¦xico al tiempo que elogiaba investigaciones period¨ªsticas que hab¨ªan revelado el desv¨ªo de recursos p¨²blicos para favorecer al PRI en las elecciones. La importancia de un periodismo libre e independiente era un tema recurrente para el investigador de la UNAM.
Dos a?os y medio despu¨¦s, en un mensaje en Twitter el mismo Ackerman compar¨® a periodistas con sicarios. D¨ªas antes, una investigaci¨®n period¨ªstica revel¨® detalles de propiedades de su esposa, la secretaria de la Funci¨®n P¨²blica, Irma Er¨¦ndira Sandoval.
De igual forma, en 2017, la periodista Sanjuana Mart¨ªnez, en una entrevista lamentaba la ¡°indefensi¨®n absoluta¡± en la que trabajan los periodistas mexicanos. Las palabras de Mart¨ªnez ganaban peso por los reconocimientos internacionales que hab¨ªa recibido por su trabajo: Reporteros Sin Fronteras la distingui¨® como Periodista del A?o en 2014; EL PA?S, con el premio Jos¨¦ Ortega y Gasset en 2008.
Dos a?os despu¨¦s, como directora de Notimex, la agencia de noticias del Estado mexicano, Mart¨ªnez ha sido se?alada como impulsora de una campa?a de desprestigio en redes sociales contra extrabajadores de la agencia y periodistas cr¨ªticos de su gesti¨®n al frente.
Si algo ha transformado la Cuarta Transformaci¨®n que abandera el presidente, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, son las visiones de simpatizantes o funcionarios de su Gobierno sobre el periodismo independiente que investiga y revela lo que el poder quiere oculto.
El mismo presidente es el ejemplo m¨¢s visible de ese cambio. En 2014, desde la oposici¨®n, celebraba el reportaje que descubri¨® la casa que un contratista le hab¨ªa vendido a la esposa del entonces presidente, Enrique Pe?a Nieto. Pero en 2019, ya en el Gobierno, el reportaje sobre la posesi¨®n de m¨¢s de 20 propiedades del director de la Comisi¨®n Federal de Electricidad, Manuel Bartlett, mereci¨® su condena no por las acciones de su subordinado sino por el hecho de que fue investigado.
Los mismos periodistas que antes eran libres y valientes porque investigaban a los gobiernos en turno, ahora son conservadores y adversarios.
L¨®pez Obrador dice que ¨¦l respeta la libertad de expresi¨®n y al menos en lo personal es cierto. Pero sus actitudes, sobre todo los mensajes que manda desde las conferencias ma?aneras est¨¢n cargados de hostilidad contra la prensa cr¨ªtica.
El presidente mexicano bien puede ser reconocido como el inventor del ¡°insulto respetuoso¡±. La proclama de tolerancia a sus cr¨ªticos antes de despotricar contra ellos. Una declaraci¨®n de hace unos d¨ªas es una joya.
¡°Lo que recomiendo es que haya respeto¡±, dijo ante una pregunta sobre las acusaciones de ¡°sicariato medi¨¢tico¡± que lanz¨® Ackerman. Pero acto seguido, sin duda con el mismo respeto que recomendaba, dijo: ¡°Est¨¢n muy molestos los conservadores, adem¨¢s de la hipocres¨ªa que los caracteriza, de ser muy corruptos, son fan¨¢ticos¡podr¨ªa yo decir algo m¨¢s fuerte¡±.
En estas acrobacias, L¨®pez Obrador ha elevado la disonancia cognitiva a toda una categor¨ªa filos¨®fica. En una conferencia reciente, cuestionado sobre el reportaje que exhib¨ªa la red de bots y troles de Notimex, el presidente dijo que le cre¨ªa tanto a la directora se?alada, Sanjuana Mart¨ªnez, como a la periodista Carmen Aristegui, quien difundi¨® la investigaci¨®n de Art¨ªculo19 y Signa Lab.
Este desprecio por la labor period¨ªstica cr¨ªtica permea a otros niveles de Gobierno. Un ejemplo reciente es el de los distintos conflictos que ha tenido con la prensa el subsecretario de Salud, Hugo L¨®pez-Gatell, encargado de las acciones del Gobierno mexicano ante la pandemia de covid-19. En junio, L¨®pez Gatell sugiri¨® que hay periodistas alineados con los intereses de la industria farmac¨¦utica y que ¡°quieren desprestigiar¡± las acciones del Gobierno. En d¨ªas anteriores, varios medios hab¨ªan cuestionado las cifras del subsecretario sobre las muertes por covid-19 en el pa¨ªs.
Fue hace dos a?os que empezamos a observar la transformaci¨®n: personas que antes pensaban que el periodismo cr¨ªtico e independiente era una condici¨®n necesaria para la democracia, ahora consideran que reportajes sobre corrupci¨®n u opacidad en el Gobierno son un intento golpista para derrocarlo. Personas que cuestionaban los malos indicadores econ¨®micos o de seguridad en gobiernos anteriores, ahora se ofenden cuando las mismas fuentes oficiales indican ca¨ªdas del PIB o el alza en homicidios.
Pero esa transformaci¨®n no se dio en un vac¨ªo. Desde hace a?os se advierte un deterioro en la cultura de la libertad de expresi¨®n en M¨¦xico, que se materializa principalmente en la violencia contra periodistas, desde los homicidios hasta las amenazas y desde el espionaje digital hasta el acoso legal.
2017 fue el a?o con m¨¢s periodistas asesinados en M¨¦xico, 12 seg¨²n la organizaci¨®n Art¨ªculo 19. Pero esa violencia no se fren¨® y en 2019, el primer a?o completo del Gobierno de L¨®pez Obrador, 10 periodistas murieron por hacer su trabajo. Otras formas de violencia se aceleraron: en 2018, tambi¨¦n seg¨²n reportes de Art¨ªculo 19, un periodista fue agredido en M¨¦xico cada 26 horas; en 2019 ese lapso se recort¨® casi a la mitad, cada 15 horas.
El Gobierno de L¨®pez Obrador no se ha dado cuenta. En su embestida contra los fideicomisos p¨²blicos, para desaparecerlos e incorporar ese dinero al gasto del Gobierno, estuvieron a punto de desaparecer el que sostiene el Mecanismo de Protecci¨®n de Periodistas. La Fiscal¨ªa que persigue delitos contra periodistas no ha aumentado su presupuesto a pesar del aumento en las agresiones.
A este panorama, que se arrastraba de a?os anteriores a la llegada de L¨®pez Obrador al poder, se a?ade ahora la estigmatizaci¨®n del periodismo cr¨ªtico. Quien revele un acto de corrupci¨®n en el actual Gobierno es tachado de corrupto y sujeto a los intereses de los adversarios. Desde el Gobierno federal se activan embestidas en redes sociales que impiden un estudio mesurado y cuidadoso de cualquier reportaje ¡°ofensivo¡±. Los mismos funcionarios utilizan sus cuentas en redes sociales para estigmatizar a periodistas.
Muchos de ellos, empezando por el propio presidente, fueron actores clave en las luchas para lograr en M¨¦xico m¨¢s libertades pol¨ªticas, incluyendo la de prensa y la de expresi¨®n. Quer¨ªan una prensa cr¨ªtica y en buena medida la lograron. Ahora que ya la tienen, la quieren destruir.
Javier Garza Ramos es periodista en Torre¨®n, Coahuila.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.