Claves del revocatorio: Claudia Sheinbaum se juega su futuro

La gran movilizaci¨®n del obradorismo de este domingo arrojar¨¢ m¨²ltiples saldos. Varias son las cosas que est¨¢n en juego. Una de las m¨¢s destacadas es el futuro pol¨ªtico de la jefa de Gobierno de Ciudad de M¨¦xico. Claudia Sheinbaum est¨¢ obligada a borrar la derrota electoral de 2021 en la capital, enclave que en su momento catapultara a su jefe, l¨ªder y protector. De no ser as¨ª, de registrarse ah¨ª en la consulta del 10 de abril una baja votaci¨®n, las posibilidades presidenciales de la acad¨¦mica se complicar¨¢n.

La vida en M¨¦xico se mide en sexenios. Durante el de Carlos Salinas de Gortari a Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador le naci¨® ¡ªpara citar a Rigoberta Mench¨²¡ª la conciencia. En los seis a?os de ese periodo el tabasque?o inici¨® su ruta hacia la dimensi¨®n nacional. Es el inicio de su marcha por el poder en los dos planos que le hicieron relevante. Busc¨® la democratizaci¨®n de su estado natal y se fue convirtiendo en una pieza clave del perredismo que Cuauht¨¦moc C¨¢rdenas, junto con otros, fundara en 1989.

Al final de ese sexenio le toc¨® padecer, en la elecci¨®n estatal de 1994, una competencia en total disparidad. El priista Roberto Madrazo rebas¨® burdamente los topes presupuestales de la ley electoral. Ni el presidente Ernesto Zedillo, llegado al poder en diciembre de ese a?o, pudo remover al ganador fraudulento. La derrota, sin embargo, fue aprovechada por AMLO para evidenciar la podredumbre del r¨¦gimen, al que desnud¨® en pleno Z¨®calo capitalino al exhibir las facturas de los excesivos e ilegales gastos de su paisano.

As¨ª se consagr¨® Andr¨¦s Manuel como figura nacional. De ah¨ª brincar¨ªa a la presidencia del PRD y de ¨¦sta a la alcald¨ªa de la capital mexicana, que conquist¨® en 2000, puesto que le volvi¨® presidenciable en 2006, a?o de su dolorosa derrota frente a Felipe Calder¨®n.

En el correr de los sexenios, sin embargo, habr¨ªa para ¨¦l una constante: la capital se hab¨ªa vuelto su basti¨®n. Le acogi¨® y ¨¦l la convirti¨® en march¨®dromo personal, laboratorio de apoyos sociales, territorio en el que sucesivos gobiernos le daban su lugar. No por nada en 2018, adem¨¢s del triunfo nacional, esa victoria tuvo el plus de arrebatarle al PRD la capital misma para Morena, que gan¨® con Sheinbaum en la boleta. Sin embargo, tres a?os despu¨¦s algo de eso cambi¨®.

En los comicios de hace casi un a?o las clases medias y altas de la capital cobraron a L¨®pez Obrador, entre otros, ciertas pol¨¦micas y la lejan¨ªa que el presidente mostr¨® frente a la ca¨ªda de la L¨ªnea 12 del Metro, ocurrida un mes antes de las elecciones del 6 de junio. La p¨¦rdida de la mitad de las alcald¨ªas capitalinas y de diversas diputaciones radicadas en la ciudad trastorn¨® a Andr¨¦s Manuel, quien durante semanas mostr¨® un humor funerario.

Esas derrotas impidieron la mayor¨ªa parlamentaria en el Congreso federal y, m¨¢s simb¨®lico pero igualmente crucial, machacaron el triunfalismo de AMLO: la disminuida oposici¨®n demostr¨® que pod¨ªa no solo pegarle, sino derrotarlo en donde m¨¢s le duele. ?Cu¨¢nto influy¨® en ese rev¨¦s el desempe?o de Claudia Sheinbaum?

Desde el arranque de su Gobierno, Sheinbaum ten¨ªa un reto que ning¨²n otro militante de Morena ha vivido. Desde 1997 y hasta 2018 quien gobernara la capital fue visto como el alter ego de la Presidencia de la Rep¨²blica. Si bien el ¨²ltimo representante del perredismo en el ayuntamiento de Ciudad de M¨¦xico se pleg¨® sin disimulo ni brillo a la Administraci¨®n de Pe?a Nieto, fue por defecto de aqu¨¦l antes que por virtud de ¨¦ste que tal capitulaci¨®n ocurri¨®.

Pero Claudia deb¨ªa ganarse su espacio como jefa de la ciudadan¨ªa que se ve a s¨ª misma como m¨¢s moderna y participativa, sin que ese liderazgo eventualmente se tradujera en distancia o disenso ante el presidente, al que consagra desde el a?o 2000 su carrera. Puesto al rev¨¦s: deb¨ªa encontrar el margen preciso para convertirse en la m¨¢s leal, eficiente y cercana colaboradora de Andr¨¦s Manuel, sin dar la espalda a una sociedad cr¨ªtica del mandatario federal en turno, sin importar el color de ¨¦ste. No lo ha logrado.

Aunque ha emprendido m¨²ltiples obras de rescate urbano, intervenido la movilidad e iniciado una modernizaci¨®n digital de los servicios, el andar de Sheinbaum como gobernante tuvo un tropiezo inicial, y una circunstancia tan imprevista como descomunal (la pandemia), que lastraron su proyecto. El error autoinfligido fue paralizar en el primer a?o al sector de la construcci¨®n, una turbina del desarrollo econ¨®mico de la capital. Lo hizo para combatir la corrupci¨®n. Pero ni acab¨® con ¨¦sta ni ha podido reactivar aqu¨¦l.

En ning¨²n otro lugar mexicano fue m¨¢s letal el SARS-CoV-2 que en la mancha urbana de la metr¨®polis. En medio de esa tragedia se debe acreditar a Claudia una actitud responsable si hablamos de: su promoci¨®n del uso del cubrebocas ¡ªa contrapelo de la irracional postura al respecto de las autoridades federales¡ª, su gesti¨®n de centros complementarios de atenci¨®n respiratoria y, sobre todo, de su plan de vacunaci¨®n, donde a favor de sus gobernados sac¨® jugo de la condici¨®n de favorita del presidente L¨®pez Obrador.

Lo anterior sin embargo qued¨® eclipsado con la ca¨ªda del Metro el 3 de mayo, en un percance que cobr¨® la vida de 26 personas y dej¨® heridas a un centenar. L¨®pez Obrador no apreci¨® la magnitud del desastre y cuatro semanas despu¨¦s los votantes capitalinos castigaron esa indolencia y m¨²ltiples agravios verbales del presidente a diversos colectivos y movimientos: desde?¨® reclamos de mujeres y v¨ªctimas de la violencia; y atac¨® reiteradamente a acad¨¦micos, al gremio de la medicina y a la clase media, entre otros.

Antes del 6 de junio, frente a esas descalificaciones Claudia Sheinbaum tuvo un papel vacilante. Nunca contradijo al presidente pero tampoco se sumaba a todas las cr¨ªticas ni necesariamente asum¨ªa el tono de las mismas. Esa actitud cambiar¨ªa despu¨¦s de la derrota electoral. Desde entonces se ha mimetizado y reinterpreta o incluso aumenta los desplantes del ocupante de Palacio.

Ese giro en la personalidad de la gobernante, ese enroscarse en el gen lopezobradorista que descalifica cualquier y toda disidencia, ella misma lo asumi¨® p¨²blicamente cuando tras ver c¨®mo le pagaba la ciudadan¨ªa su tibieza declar¨® que hab¨ªa llegado el momento de volver a los principios, o en sus palabras: ¡°Back to the basics¡±.

Esa vuelta al origen se ha traducido en una Sheinbaum desaforada: promotora puntual y cotidiana de Andr¨¦s Manuel, lo mismo al descalificar a los adversarios, al hacer bromas sobre las autoridades electorales y al invitar a ¡°conservadores¡± a ¡°que se vayan a vivir a un pa¨ªs autoritario¡±.

Si por buena conducta en los m¨ªtines fuera, Claudia tiene su futuro asegurado. Destapada como precandidata presidencial por el propio L¨®pez Obrador, ¨¦ste no deja de dispensarle cortes¨ªas y mimos. En retribuci¨®n ella ha subido los decibeles a la radicalidad de sus arengas y pr¨¢cticamente eliminado el esfuerzo (m¨ªnimo) que hac¨ªa para tener interlocuci¨®n con sectores o grupos que son abominados por su jefe. Pero incluso todo eso, sin territorio, para Andr¨¦s Manuel no ser¨¢ suficiente. Por eso la cita de este domingo es crucial.

En 2018 en Ciudad de M¨¦xico L¨®pez Obrador cosech¨® tres millones de votos, uno de cada 10 sufragios obtenidos en esas presidenciales se lo dio la capital que gobernara de 2000 a 2005. De ese tama?o es hoy el reto de Sheinbaum, quien cuatro a?os despu¨¦s buscar¨¢ darle al presidente una cantidad millonaria de apoyos en la consulta de revocaci¨®n convocada por el oficialismo para tonificar m¨²sculos pol¨ªticos y electorales.

Por eso, desde hace semanas el equipo de la doctora est¨¢ abocado d¨ªa y noche a forjar los acuerdos que le ayuden a llevar gente a las urnas este domingo. En unas pocas horas sabremos cu¨¢n exitosas fueron esas negociaciones. Pero lo que no sabremos en tan corto periodo es el costo de las mismas.

La capital es un territorio donde confluyen liderazgos de todo tipo. El morenismo, que succion¨® al perredismo que antes hab¨ªa desfondado al priismo, hab¨ªa marginado a algunos l¨ªderes que se hab¨ªan vuelto impresentables con el correr de los a?os. Sin embargo, en la hora en la que lo que lo ¨²nico importante es llenar de votos las urnas de la ratificaci¨®n de Andr¨¦s Manuel, la jefa de Gobierno podr¨ªa estar entregando la ciudad a grupos que, ya nos enteraremos en el debido tiempo y de mal modo, cobrar¨¢n los servicios de este domingo.

Porque la movilizaci¨®n de votantes en la cantidad que se pretende realizar no puede ocurrir sin dinero y/o sin comprometer favores presentes o futuros con due?os de clientelas u operaci¨®n. ?De d¨®nde saldr¨¢n los recursos para llevar a las urnas a quienes no acudir¨¢n por estricta voluntad propia? ?Qu¨¦ calles, qu¨¦ plazas, que prebendas o disimulos se comprometieron con quienes ayuden al acarreo? Back to the basics.

Vienen un par de a?os de medianos a buenos para la doctora Sheinbaum. La seguridad parece bajo control, algunos proyectos iniciados en el arranque del sexenio ir¨¢n cuajando e incluso en una de esas el a?o que entra, fuera del plazo pero qu¨¦ m¨¢s da, logra echar a andar de nuevo la L¨ªnea 12 del Metro.

Lo anterior no garantiza que la simpat¨ªa presidencial de alguien como AMLO se traduzca en hacerla candidata presidencial. Para lograr eso el tener proyectos de gobierno listos para presumir y una buena gesti¨®n en general ayudan, sin duda. Encendidos discursos a cada rato y abierto proselitismo de la revocaci¨®n sin respetar la ley, tambi¨¦n. ?Entonces qu¨¦ falta? Tres cosas: Territorio, territorio y territorio. Demostrar exactamente lo que no pudo en la elecci¨®n de hace 10 meses: que es una eficaz operadora electoral.

Ser¨¢ una dura prueba para esta alumna aplicada. Los liderazgos de Morena parecen haber heredado del perredismo la tendencia al canibalismo y la divisi¨®n. Todas y todos quieren a Andr¨¦s Manuel, pero muy pocos trabajan solo para ¨¦l. La jornada del domingo tambi¨¦n ser¨¢ una donde habr¨¢ quien busque avanzar haciendo quedar mal a¡­ sus compa?eros, y no ser¨ªa la primera vez en que a no pocos les interese que tropiece la persona que m¨¢s avanzada luce en la carrera por la candidatura presidencial.

Claudia Sheinbaum se juega su futuro pol¨ªtico el domingo. Este 10 de abril ha de demostrarle a su jefe que aprendi¨® del descalabro, que es capaz de sortear incluso las desavenencias internas del morenismo, y que su pragmatismo es de tal dimensi¨®n que no solo le lleva a desdibujarse hasta el punto de convertirse en una mini-me del tabasque?o, sino que lo necesario para aportar millones de votos capitalinos sin salir con ¡°el cuento de la ley¡±. Lo que luego pase en la ciudad que hasta hoy gobierna, ?ser¨¢ lo de menos?

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