El ¡®nearshoring¡¯ no va a ser para todos
La pr¨®xima administraci¨®n en M¨¦xico deber¨¢ implementar una serie de medidas que garanticen condiciones m¨¢s propicias para atraer mayores flujos de inversi¨®n
En un art¨ªculo reciente me refer¨ª a la creciente heterogeneidad de Am¨¦rica Latina. All¨ª, alud¨ª a las diferentes trayectorias de crecimiento y de estabilidad macroecon¨®mica que caracterizan a los pa¨ªses de la regi¨®n. Ahora me referir¨¦ a otra dimensi¨®n importante: a la forma de insertarse en la econom¨ªa global, es decir, con qui¨¦n y qu¨¦ tipo de bienes se comercian. En esta dimensi¨®n, de manera paulatina pero constante, tambi¨¦n se ha manifestado una mayor heterogeneidad entre los pa¨ªses de la regi¨®n.
Considero que esto es relevante debido a que la forma de insertarse en la econom¨ªa global ser¨¢ crucial para entender qu¨¦ pa¨ªses son los que tienen el mayor potencial para beneficiarse del proceso de relocalizaci¨®n de actividades (nearshoring) que observaremos en los pr¨®ximos a?os. Considerando las motivaciones geopol¨ªticas que dieron lugar a la relocalizaci¨®n, existen dos indicadores clave a monitorear en los distintos pa¨ªses: qui¨¦n es su principal socio comercial y cu¨¢nta especializaci¨®n manufacturera existe en el sector exportador.
En cuanto a qui¨¦nes son los socios comerciales m¨¢s importantes, Am¨¦rica Latina se divide pr¨¢cticamente en dos grandes grupos: en aquellos que comercian predominantemente con Estados Unidos (entre par¨¦ntesis el porcentaje de todo su comercio exterior con Estados Unidos), como M¨¦xico (60%), Costa Rica (41%), Nicaragua (41%), Honduras (39%), El Salvador (34%), Guatemala (32%), Colombia (26%) y Ecuador (23%); y aquellos que comercian predominantemente con China, como Brasil, Chile, Per¨², Panam¨¢, Argentina, Bolivia y Paraguay (en estos tres ¨²ltimos casos su principal socio en realidad es Brasil, aunque seguido por China, por lo que los consideramos dentro de la esfera de influencia comercial de China).
Por otro lado, en cuanto a su especializaci¨®n exportadora, nuevamente los pa¨ªses de la regi¨®n se dividen en dos grandes grupos. Por un lado, est¨¢n aquellos con un porcentaje de exportaciones manufactureras superior al 35% de sus exportaciones totales. En este grupo se encuentran M¨¦xico (76%), El Salvador (76%), Costa Rica (60%), Guatemala (47%) y Nicaragua (38%). Todos los dem¨¢s pa¨ªses de la regi¨®n se han especializado en la exportaci¨®n de materias primas. De hecho, en varios de estos casos la participaci¨®n de las exportaciones manufactureras dentro del total exportado es inferior incluso al 15%, como en el caso de Venezuela, Bolivia, Ecuador, Panam¨¢, Per¨², Paraguay, Argentina y Chile.
En resumen, a los pa¨ªses de Am¨¦rica Latina los podemos clasificar en tres grandes grupos en cuanto a su forma de insertarse a la econom¨ªa global. Por un lado, est¨¢n aquellos que le venden m¨¢s a China que a Estados Unidos y que, por lo dem¨¢s, todos ellos se especializaron fundamentalmente en la exportaci¨®n de materias primas: Argentina, Brasil, Chile, Per¨², Bolivia, Paraguay y Panam¨¢. En un segundo grupo est¨¢n aquellos pa¨ªses que mantienen fuertes lazos comerciales con Estados Unidos, pero cuyo sector exportador se mantuvo especializado en materias primas. En este grupo se ubica a Ecuador, Colombia, Venezuela y Honduras. Finalmente, un tercer grupo de pa¨ªses se mantuvo conectado comercialmente con Estados Unidos y se ha especializado en la exportaci¨®n de productos manufacturados. En este grupo se encuentran M¨¦xico, El Salvador, Costa Rica, Guatemala y Nicaragua.
La clasificaci¨®n anterior sugiere que no todos los pa¨ªses de la regi¨®n estar¨¢n igualmente preparados para beneficiarse del proceso de relocalizaci¨®n industrial. De hecho, algunos pa¨ªses enfrentar¨¢n la doble desventaja de haber optado por un tipo de inserci¨®n en la globalizaci¨®n que los llev¨® a comerciar m¨¢s con China que con Estados Unidos, al tiempo que optaron por hacerlo a trav¨¦s de la especializaci¨®n exportadora de materias primas y no de productos manufacturados. Esto implica que para ellos no necesariamente habr¨¢ friend o ally-shoring, mientras que su sector exportador no parece tener las caracter¨ªsticas id¨®neas, en t¨¦rminos de calificaci¨®n de la mano de obra o de la participaci¨®n en las cadenas globales de valor, como para volverse receptor de flujos importantes de inversi¨®n extranjera. Por otra parte, existe un segundo grupo de pa¨ªses latinoamericanos que tendr¨¢n una cierta desventaja al no tener un sector exportador especializado en actividades manufactureras, a pesar de haberse mantenido como socios comerciales importantes de los Estados Unidos.
Finalmente, los pa¨ªses que parecer¨ªan estar mejor preparados para beneficiarse del nearshoring son M¨¦xico y algunos pa¨ªses centroamericanos como El Salvador, Costa Rica y Guatemala. Aunque Nicaragua pareciera tener condiciones de inserci¨®n a la globalizaci¨®n similares a las de sus vecinos centroamericanos, la realidad es que su r¨¦gimen dictatorial dif¨ªcilmente lo har¨¢ atractivo como para beneficiarse del proceso de reorganizaci¨®n de la globalizaci¨®n.
Evidentemente, M¨¦xico, tanto por su mayor cercan¨ªa geogr¨¢fica a Estados Unidos como por su tama?o de mercado interno, su capital humano y su mayor experiencia en la participaci¨®n en las cadenas globales de valor, es quien podr¨¢ beneficiarse en mayor medida de la relocalizaci¨®n industrial. Para que esto realmente ocurra, la pr¨®xima administraci¨®n deber¨¢ implementar una serie de medidas que garanticen condiciones m¨¢s propicias para atraer mayores flujos de inversi¨®n, tanto dom¨¦stica como extranjera.
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