El olor pestilente persiste en Chalco tras las inundaciones de agosto
Como siempre ocurre en M¨¦xico, son las personas las que acaban uni¨¦ndose para solucionar una crisis, ante la ineficiencia de las autoridades
¡°?Todav¨ªa sigue!¡±, exclaman ambos al un¨ªsono, al otro lado de la l¨ªnea. ¡°Hasta la fecha. Ya es menos, pero s¨ª. Todav¨ªa se ve el agua: se abre la coladera y se ve como a la mitad. Y el c¨®ncavo que est¨¢ ah¨ª, est¨¢ el agua ah¨ª estancada¡±, me cuenta un vecino acompa?ado de su esposa, ambos solicitan el anonimato. Hablan del olor en Chalco donde viven, de la peste en las colonias Culturas de M¨¦xico, Jacalones y calles aleda?as que permanecieron durante m¨¢s de un mes inundadas de aguas negras.
La temporada de lluvias en el verano ha sido complicada siempre para los habitantes del municipio de Chalco, en el Estado de M¨¦xico. Pero la noche del jueves 1 de agosto pasado se volvi¨® una aut¨¦ntica pesadilla: en varias colonias el agua de lluvia se acumul¨® hasta llegar a m¨¢s de metro y medio de altura, y ah¨ª se estanc¨®. El colector Solidaridad, principal desag¨¹e de ese municipio, se tap¨® y las aguas negras se mezclaron con las pluviales, sin poder fluir hacia ninguna parte.
Para la madrugada del viernes 2, ya era una inundaci¨®n general, hoy se cumplen 100 d¨ªas de aquella ma?ana. Los chalquenses amanecieron bajo el agua y as¨ª permanecieron por mes y medio: aunque el nivel fue bajando con los trabajos de desazolve y el esfuerzo de la poblaci¨®n que la sacaba con sus propios recursos, la inundaci¨®n dur¨® al menos 40 d¨ªas y no volvieron a ver el pavimento sino hasta mediados de septiembre.
La causa oficial fue una obstrucci¨®n en el colector Solidaridad, de 120 metros y 500 toneladas de basura y desechos. Pero los vecinos de Chalco agregan un factor a ese diagn¨®stico: la basura que tap¨® el colector no fue solamente la de las calles, sino ¡ªprincipalmente, seg¨²n sus testimonios¡ª el resultado de las obras del Troleb¨²s Chalco-Santa Martha. A decir de las personas, la lluvia s¨ª fue intensa y el drenaje s¨ª es deficiente en Chalco, pero esta inundaci¨®n inusual fue causada por esa obra del Gobierno.
¡°Todos lo achacan a ra¨ªz de que empezaron a fincar el transporte nuevo. Tiraron cascajo, todo el tap¨®n ese que est¨¢ ah¨ª lo hicieron, que ah¨ª donde hicieron su base, al lado de la caseta, hab¨ªa un c¨®ncavo y eso lo taponeaba para hacer su base del Metrob¨²s. Sus talleres, creo. Ah¨ª estaba un c¨®ncavo. A ra¨ªz de que empezaron a escarbar, se empez¨® a inundar¡±, me cuenta un habitante de Chalco. Y es que una cosa llevaba a la otra: ¡°Tambi¨¦n dejaron mucho desperdicio de cascajo en varios lados, montones de tierra, montones de piedras, y yo digo ?cu¨¢ndo lo van a limpiar? Porque eso mismo hace que la gente deje montoncitos, con una basura que vean, siguen aventando, ya cuando ven ya est¨¢ el cerro de basura otra vez¡±, agrega su esposa, quien pidi¨® omitir su nombre, pues conocen casos de vecinos a los que el gobierno municipal les ha negado apoyos por haberse quejado p¨²blicamente.
Durante la primera semana de inundaci¨®n el gobierno municipal se limit¨® a decir a los vecinos que ¡°ya hab¨ªa mandado un escrito a la gobernadora¡± Delfina G¨®mez, para pedirle apoyo estatal. Mientras, la ¨²nica soluci¨®n fueron las lanchas para evacuar a las personas: algunas de la Cruz Roja, otras del municipio, otras de la propia gente. Los intentos por desazolvar eran infructuosos. La gente dej¨® todo y perdi¨® todo.
Fue hasta que los vecinos irrumpieron en la Coordinaci¨®n de Protecci¨®n Civil, donde el presidente municipal, Jos¨¦ Miguel Guti¨¦rrez, sosten¨ªa una reuni¨®n con Delfina G¨®mez, que esta se decidi¨® a salir a las calles anegadas de Chalco a atender a la poblaci¨®n: 19 d¨ªas despu¨¦s. Por su parte, el todav¨ªa presidente Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador se neg¨® a acudir al municipio bajo el ya bien conocido pretexto de los opositores. ¡°No voy, por lo mismo que no fui a Acapulco, porque est¨¢n como buitres, es temporada de zopilotes, tengo que cuidar la investidura presidencial. No me puedo exponer, porque si digo ¡®voy a ir a Chalco¡¯ ah¨ª va a ir la provocaci¨®n de los conservadores, entonces tengo que cuidar eso, pero eso no quiere decir que no se est¨¢ atendiendo¡±, dijo cuando se cumplieron 22 d¨ªas de la inundaci¨®n.
La entonces presidenta electa y hoy en funciones, Claudia Sheinbaum se comprometi¨® a resolver de forma estructural las inundaciones en el municipio, para lo cual propuso recurrir al T¨²nel Emisor Oriente y aplicar un programa especial de agua y saneamiento con la Ciudad de M¨¦xico y el estado de Hidalgo.
Como siempre ocurre en M¨¦xico, son las personas las que acaban uni¨¦ndose para solucionar una crisis, ante la ineficiencia de las autoridades. Porque adem¨¢s del agua estancada que no ten¨ªa un drenaje libre por d¨®nde irse, segu¨ªa lloviendo.
La inundaci¨®n severa dur¨® poco m¨¢s de un mes y el agua sigui¨® en varias calles otro m¨¢s, pero la peste permanece hasta la fecha: el olor de las aguas negras perme¨® todo y no se ha ido, seg¨²n me cuenta este matrimonio cuya vivienda no est¨¢ dentro de las colonias afectadas, pero s¨ª su negocio, que no pudieron abrir durante casi dos semanas.
100 d¨ªas despu¨¦s, las coladeras se siguen tapando. ¡°Si llueve, por muy leve que sea, llega a tope el agua, eso quiere decir que el drenaje sigue igual, aunque hayan desazolvado con esas mangueras que trajeron¡±, advierte la mujer.
Adem¨¢s, contin¨²an todas las afectaciones que dej¨® la inundaci¨®n y que no se van con el agua: los da?os en inmuebles, veh¨ªculos y muebles; los d¨ªas de trabajo perdidos por atender la emergencia, los da?os a la salud que se quedan por meses. En el caso de este matrimonio, el no haber podido abrir su negocio en una quincena les represent¨® una p¨¦rdida de 15 mil pesos, pero el gobierno no los consider¨® para las ayudas econ¨®micas porque su inmueble no es una casa, sino un local, no se meti¨® el agua porque no lo abrieron en esos d¨ªas ¡ªni siquiera pod¨ªan pasar¡ª y su casa est¨¢ en una colonia del mismo Chalco, pero que no se inund¨®.
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