Los esc¨¢ndalos de la vicepresidenta

El Gobierno de Iv¨¢n Duque lleg¨® al poder prometiendo una lucha feroz contra el narcotr¨¢fico y el crimen. Para ellos, toda la criminalidad se explicaba por el acuerdo de paz entre el Estado colombiano y la entonces guerrilla de las FARC, hoy convertida en partido pol¨ªtico. Adem¨¢s, culpaban al Gobierno de Juan Manuel Santos de tener mano blanda contra el crimen y, por tanto, una vez ellos llegaran a la Casa de Nari?o todo se arreglar¨ªa de forma r¨¢pida. Casi dos a?os despu¨¦s de la posesi¨®n del presidente Duque, lo cierto es que la cosas en lugar de mejorar, han empeorado. Por ejemplo, Colombia tiene la cifra m¨¢s alta de cultivos de hoja coca en su historia, con 212.000 hect¨¢reas seg¨²n el Departamento de Estado de los Estados Unidos.

Pero m¨¢s all¨¢ de los pobres resultados en materia de lucha contra las drogas, el Gobierno de Iv¨¢n Duque se ha visto envuelto en una serie de esc¨¢ndalos que tiene que ver con el tema del narcotr¨¢fico y que, si bien algunos no son de la ¨®rbita del presidente, lo han tocado y afectado. El primero es lo que se conoce como la ?e?epol¨ªtica. Hace varias semanas el periodista Gonzalo Guill¨¦n dio a conocer que, en medio de una investigaci¨®n por homicidio, se intercept¨® el celular de un hombre llamado Jos¨¦ Guillermo Hern¨¢ndez Aponte, conocido como El ?e?e. El di¨¢logo fue con la exasesora del senador ?lvaro Uribe, quien pertenec¨ªa al c¨ªrculo cercano de la campa?a electoral del ahora presidente Duque. Para algunos, esa conversaci¨®n suger¨ªa compra de votos. El ?e?e, al parecer, era un narcotraficante y testaferro, fue asesinado en mayo de 2019 en Brasil y el propio expresidente y actual senador Uribe manifest¨® en un trino que ¡°causa mucho dolor el asesinato de Jos¨¦ Guillermo Hern¨¢ndez, asesinado en un atraco en Brasil donde asist¨ªa a una feria ganadera¡±. Un hombre cercano a la campa?a de Duque.

El segundo esc¨¢ndalo fue cuando en una finca ubicada en el municipio de Guasca, departamento de Cundinamarca, a pocos kil¨®metros de la capital colombiana, se encontr¨® un laboratorio que procesaba clorhidrato de coca¨ªna que era enviada a Estados Unidos y Europa. La finca era propiedad del entonces embajador colombiano en Uruguay. A pesar del esc¨¢ndalo, el embajador permaneci¨® en el cargo y no fue retirado de forma inmediata cuando se conoci¨® la noticia. No se sabe por qu¨¦ el presidente lo mantuvo en el cargo tanto tiempo.

El tercer y cuarto esc¨¢ndalos involucran a la actual vicepresidenta de la Rep¨²blica, Marta Luc¨ªa Ram¨ªrez. Adem¨¢s del famoso caso de Memo Fantasma, en los ¨²ltimos d¨ªas se revel¨® tambi¨¦n por el periodista Guill¨¦n que un hermano de la vicepresidenta fue condenado en Estado Unidos por temas de narcotr¨¢fico. Bernardo Ram¨ªrez Blanco fue capturado cuando recib¨ªa una carga de hero¨ªna que hab¨ªa sido ingresada por dos ¡°mulas¡± que fueron reclutadas por el hermano de la vicepresidenta. Esto significa que el hermano de la vicepresidenta era un narcotraficante y no una v¨ªctima. V¨ªctima podr¨ªa considerarse a las mulas.

La palabra mula hace referencia a las personas que trasladan la droga de forma camuflada, muchas veces trag¨¢ndosela en bolsas o en maletas. Generalmente, son personas que se reclutan con muchas necesidades, y los traficantes se aprovechan de su vulnerabilidad. El hermano de la vicepresidente fue condenado a poco menos de 5 a?os de prisi¨®n, y ella y su esposo pagaron una fianza.

Obviamente, no hay delitos de sangre, pero en este ¨²ltimo caso lo que se cuestiona a la vicepresidenta son, al menos, tres cosas. Por un lado, que lo hubiese ocultado. De hecho, todo indica que tanto los expresidentes Pastrana como Uribe sab¨ªan del tema (ella trabaj¨® con ambos), y el ¨²nico que no sab¨ªa era el actual presidente Duque. Lo cual podr¨ªa confirmar muchos rumores que dicen que literalmente se lo pasan por encima. Lo segundo que se cuestiona es lo que ser¨ªa su doble discurso. Por ejemplo, ella lleg¨® a proponer que se prohibiera la participaci¨®n en listas colegiadas de familiares de condenados y hablaba duro contra el narcotr¨¢fico. Pero lo tercero que se cuestiona es su papel en el Gobierno, pues es el segundo esc¨¢ndalo que en menos de seis meses la cobija, lo cual afecta sustancialmente la imagen del presidente.