Moralistas
J¨®zsef Sz¨¢jer no es el primer cargo p¨²blico que pierde su puesto en esta pandemia por no respetar las reglas, pero en su caso hay un agravante de hipocres¨ªa
Algunas vi?etas de la prensa h¨²ngara esta semana son para enmarcar. Szabolcs Panyi, reportero de investigaci¨®n en Budapest, me dice que se queda con la de Pap¨¢ Noel intentando entrar con los regalos por una chimenea mientras J¨®zsef Sz¨¢jer trata de huir. El europarlamentario del partido ultraconservador Fidesz, amigo personal del primer ministro, Viktor Orb¨¢n, ha dimitido poco antes de que se hiciera p¨²blica su participaci¨®n en una org¨ªa gay en Bruselas. Quiso escapar, pero la polic¨ªa lo atrap¨®. El caso ha sido un caramelo para la oposici¨®n: el estandarte de la familia tradicional magiar, miembro de un partido hom¨®fobo, salt¨¢ndose las reglas del confinamiento en compa?¨ªa de una veintena de hombres desnudos. Internet encendido. Mientras, Orb¨¢n, de visita en Varsovia, colgaba una foto de s¨ª mismo en Facebook rezando en la iglesia de los Carmelitas. M¨¢s parodias en redes sociales. Entrevistas al veintea?ero que organiza habitualmente las fiestas, que asegura que asisten pol¨ªticos de todas las nacionalidades, incluidos tambi¨¦n los polacos del ultraconservador Ley y Justicia.
No es el primer cargo p¨²blico que pierde su puesto en esta pandemia por no respetar las reglas, pero en su caso hay un agravante de hipocres¨ªa. ¡°A la mayor¨ªa nos da exactamente igual lo que haga en su vida privada, pero su fachada ya no se sostiene¡±, matiza Panyi. El pol¨ªtico quer¨ªa estar en misa y repicando: en 2011 particip¨® en la redacci¨®n de la nueva Constituci¨®n h¨²ngara, que define el matrimonio como la uni¨®n de un hombre y una mujer exclusivamente. Es uno de los grandes arquitectos ideol¨®gicos de Fidesz, predica una moral estricta. Los medios afines al Gobierno lamentan su ¡°error¡± y subrayan que se le ha tendido una trampa en un momento de m¨¢xima fricci¨®n entre Orb¨¢n y Bruselas. La UE est¨¢ buscando la manera de aprobar su presupuesto a pesar del veto de Hungr¨ªa y Polonia, que se niegan a vincular la recepci¨®n del fondo de recuperaci¨®n al respeto del Estado de derecho. Para el polit¨®logo G¨¢bor T?r?k, este es un golpe duro para Hungr¨ªa por la p¨¦rdida de un profesional valioso. La delegaci¨®n de Fidesz en el Parlamento Europeo ha dicho en un comunicado que Sz¨¢jer ha tomado la ¨²nica decisi¨®n correcta.
La pregunta ahora es si esto pasar¨¢ factura en los votantes de Fidesz, muy fieles en el campo. Para las elecciones generales a¨²n falta a?o y medio. En las ¨²ltimas municipales, Fidesz perdi¨® Budapest y otras seis ciudades importantes. Justo antes hab¨ªa salido a la luz un v¨ªdeo de uno de sus candidatos, padre de supuesta familia mod¨¦lica, en un yate con prostitutas y drogas. Mientras digiere el nuevo contratiempo, el partido de Orb¨¢n est¨¢ rematando una enmienda constitucional para apuntalar los llamados ¡°valores cristianos¡± y recortar m¨¢s derechos a los homosexuales en Hungr¨ªa.
@anafuentesf
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