De la expectaci¨®n period¨ªstica a la realidad
Varios lectores piden m¨¢s rigor para entender qu¨¦ ocurre entre el Rey, su padre, Moncloa y los partidos
El futuro de la Monarqu¨ªa tras los esc¨¢ndalos protagonizados por Juan Carlos I origina abundantes informaciones, pero algunos lectores ponen en duda que EL PA?S les informe de manera adecuada para interpretar bien lo que ocurre. Consideran que noticias presentadas con gran relieve ¡ªa veces aparentemente contradictorias¡ª se basan solo en declaraciones de pol¨ªticos y en la generaci¨®n de expectativas que luego no se corresponden con la realidad.
En las semanas previas al discurso navide?o de Felipe VI, el peri¨®dico public¨® una docena de informaciones para contar qu¨¦ opinaban el Gobierno, los partidos o los expertos respecto a lo que deb¨ªa decir Felipe VI sobre su padre. El diario amplific¨® la expectaci¨®n con iniciativas propias, como una encuesta con pol¨ªticos, juristas e historiadores, que inclu¨ªa esta pregunta: ¡°?Debe el rey Felipe VI mencionar los esc¨¢ndalos de su padre y pedir perd¨®n por ellos?¡±.
Pues bien, el Monarca dedic¨® al asunto solo 87 de las 1.697 palabras de su mensaje ¡ªas¨ª lo reflej¨® el diario¡ª y ni mencion¨® a Juan Carlos I. Por eso, algunos lectores acusaron al peri¨®dico de caer en el ¡°amarillismo¡± (Germ¨¢n L¨®pez de Segura), ¡°engordar el tema¡± (Enriqueta Fuentes) o limitarse a ¡°poner altavoces a los pol¨ªticos¡± (?ngeles Indurain).
Tambi¨¦n el mes pasado, el peri¨®dico difundi¨® informaciones sobre una noticia adelantada por El Mundo el 7 de diciembre en relaci¨®n con un supuesto deseo de Juan Carlos I de regresar a Espa?a por Navidad. Pues bien, el rey em¨¦rito no hizo ese viaje y los lectores desconocen si hubo un proyecto de tal visita o si simplemente se pospuso, puesto que la Casa del Rey asegur¨® que era ¡°prematuro¡± hacerlo en Navidad, que fue la primera noticia al respecto que public¨® EL PA?S el 11 de diciembre. No solo eso, sino que el peri¨®dico difundi¨® el d¨ªa 14 algunas relevantes afirmaciones no basadas en fuente alguna. Como estas: ¡°Cuentan que all¨ª [en la casa de la infanta Elena] le gustar¨ªa pasar a don Juan Carlos la Navidad¡±; ¡°no es f¨¢cil que el em¨¦rito logre su prop¨®sito, pero si lo consigue dif¨ªcilmente ser¨¢ que comparta mesa con los Reyes y con do?a Sof¨ªa, posicionada junto a su hijo¡±; Elena de Borb¨®n ya le hizo una visita en Abu Dabi, pero ¡°podr¨ªan haber sido m¨¢s¡±.
Los lectores observan estos d¨ªas un tercer caso similar. Se inici¨® el 24 de diciembre, cuando Unidas Podemos anunci¨® que presentar¨ªa una propuesta de ¡°ley de la Corona¡±. Cinco d¨ªas despu¨¦s, EL PA?S public¨® una cr¨®nica titulada S¨¢nchez abre la puerta a una ley de la Corona para profundizar la modernizaci¨®n.
Ese titular estaba basado en esta parte de la cr¨®nica: ¡°En todo momento [el presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez] ha trasladado la sensaci¨®n de que las novedades son inminentes, aunque no ha querido profundizar. ¡®A lo largo del reinado de Felipe VI ha dado pruebas de caminar hacia una Monarqu¨ªa adaptada a la Espa?a del siglo XXI. Ese ¨¢nimo de renovaci¨®n va a continuar. En lo que podamos ayudar, el Gobierno estar¨¢ a disposici¨®n de la Corona¡¯, ha se?alado cuando le han preguntado si est¨¢n trabajando en una ley o ser¨¢ la propia Casa Real la que se autorregule¡±. S¨¢nchez, por tanto, no pronunci¨® las palabras ¡°ley de la Corona¡±. Ese concepto estaba en la pregunta.
Pues bien, una semana despu¨¦s, todo pareci¨® quedar en una nueva noticia alejada de la realidad, como se reflejaba en este titular del pasado d¨ªa 5: El Gobierno promueve transparencia en la Corona, pero sin una ley propia. La cr¨®nica empezaba as¨ª: ¡°El Ejecutivo echa agua al debate sobre la ley de la Corona¡±. Y en el texto se insist¨ªa en que S¨¢nchez ¡°dio a entender¡± lo de la ley, pero que en realidad se trataba ahora de ¡°reformas concretas pactadas con La Zarzuela¡±. Nuevo despiste para los lectores.
El subdirector Jos¨¦ Manuel Romero justifica que el peri¨®dico cubra con amplitud y detalle todo lo relacionado con la Corona. ¡°Hay dos hechos in¨¦ditos y coincidentes¡±, comenta, ¡°que la ponen en primera l¨ªnea de actualidad: esos esc¨¢ndalos que rodean a Juan Carlos I ¡ªpresent¨® una declaraci¨®n fiscal complementaria a comienzos de diciembre¡ª y el debate entre Monarqu¨ªa y Rep¨²blica que alimenta, entre otros, Unidas Podemos, hoy socio del Gobierno de coalici¨®n¡±.
En esta columna se recuerda a menudo que EL PA?S debe ofrecer una informaci¨®n veraz y de alta calidad, ¡°de manera que ayude al lector a entender la realidad y a formarse su propio criterio¡±. De los comentarios de los lectores se deduce que no les estamos ayudando lo suficiente para entender qu¨¦ est¨¢ ocurriendo entre La Zarzuela, el Gobierno, Juan Carlos I y los partidos, porque algunas versiones que difundimos chocan luego con la realidad.
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