Regular nuevas herramientas de espionaje
La investigaci¨®n sobre el ¡®software¡¯ Pegasus evidencia la necesidad de un mejor control sobre la venta de ciertas tecnolog¨ªas
Una investigaci¨®n llevada a cabo por el consorcio de periodistas Forbidden Stories ¡ªen cooperaci¨®n con una quincena de medios internacionales¡ª y la organizaci¨®n Amnist¨ªa Internacional apunta a un inquietante escenario de masivo espionaje a periodistas, activistas de los derechos humanos, disidentes o l¨ªderes pol¨ªticos por parte de numerosos gobiernos. La informaci¨®n publicada aporta convincentes elementos de prueba de lamentables actividades perpetradas a trav¨¦s del software Pegasus, un programa capaz de penetrar tel¨¦fonos m¨®viles desarrollado por una empresa privada israel¨ª ¡ªNSO Group¡ª y vendido a un amplio n¨²mero de Ejecutivos. NSO sostiene que la investigaci¨®n contiene acusaciones no bien fundamentadas. En realidad, las alegaciones presentadas son s¨®lidas, incluidas verificaciones materiales llevadas a cabo por prestigiosos laboratorios t¨¦cnicos en 37 casos concretos.
En cualquier caso, el esc¨¢ndalo evidencia la necesidad de mejorar la regulaci¨®n del comercio de semejante tipo de productos. Es notorio que gobiernos de medio mundo se emplean en actividades de espionaje con escasos escr¨²pulos, y que incluso en democracias avanzadas se ha cruzado el l¨ªmite aceptable de la vigilancia a fines de garantizar la seguridad en un transparente marco legal y de control judicial. Lo que debe evitarse es que programas de vanguardia como Pegasus faciliten las cosas a Ejecutivos malintencionados y que no tendr¨ªan semejante capacidad tecnol¨®gica por su cuenta. Esto es especialmente importante en pa¨ªses autoritarios donde periodistas y disidentes se hallan en una posici¨®n muy fr¨¢gil.
Pegasus es capaz de tener acceso a todos los rincones de los tel¨¦fonos y de activar micr¨®fonos y c¨¢maras sin que el due?o lo sepa. Alegar que el programa se desarroll¨® con el objetivo leg¨ªtimo de combatir al crimen organizado o a organizaciones terroristas no es suficiente. Es preciso garantizar que tanto este como otros programas parecidos no terminen siendo utilizados para fines inaceptables. Entre los casos m¨¢s graves revelados figuran el periodista marroqu¨ª Omar Radi, cr¨ªtico con el poder, detenido en julio de 2020 y condenado el lunes a seis a?os de c¨¢rcel; as¨ª como personas cercanas a Jamal Khashoggi, el opositor saud¨ª asesinado en Estambul en 2018.
No es la primera vez que el nombre Pegasus aparece relacionado con la obtenci¨®n il¨ªcita de datos. Una investigaci¨®n de EL PA?S y The Guardian revel¨® ya en julio de 2020 que fue la herramienta elegida para atacar en 2019 los tel¨¦fonos de tres l¨ªderes independentistas catalanes. Tanto el ministerio espa?ol de Interior como la Polic¨ªa y la Guardia Civil aseguraron entonces que nunca han contratado los servicios de NSO Group.
La tarea para asegurar un mejor control no es simple. Ello no es excusa para renunciar a intentarlo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.