Derrotar la ¡®mafiocracia¡¯ en Colombia
Por primera vez la ¡®mafiocracia¡¯ que nos comanda desde hace rato, la misma que se ha apoderado de los organismos de control, la que pone presidentes y fiscales mientras quita honras, siente que corre el riesgo de ser sacada del poder
Hace rato en Colombia no se sent¨ªa un ambiente preelectoral tan gr¨¢vido, tan pesado y tan cargado de malos presagios. Y todo porque muchos colombianos presienten que se viene un revolc¨®n del carajo en las elecciones de 2022. Si nos atenemos a las encuestas, todo apunta a que esos comicios se van a convertir en un plebiscito no solo contra el uribismo sino contra los clanes mafiosos que han cogobernado este pa¨ªs a sus anchas.
Es decir, por primera vez la mafiocracia que nos comanda desde hace rato, la misma que se ha apoderado de los organismos de control, de los ministerios, de las cuotas de poder, la que pone presidentes y fiscales mientras quita honras, la que nos dice c¨®mo hablar y qu¨¦ preguntar, esa mafiocracia corrupta e impune, siente que corre el riesgo de ser sacada del poder.
Las mafias, por su naturaleza, nunca est¨¢n dispuestas a ceder ni un ¨¢pice de su poder y esta que se nos trep¨® en Colombia con la ayuda de tantos en el establecimiento, menos va a aceptar ser desplazada por unos pol¨ªticos malolientes y alternativos que creen en la reforma agraria.
De ese tama?o es la pelea que se va a dar en las urnas en las pr¨®ximas elecciones.
La mafiocracia que se instal¨® en Colombia tiene un poder que envidiar¨ªa hasta Pablo Escobar. No solo han logrado lavar sus fortunas mal habidas sin mayor problema, sino que hoy tienen ministerios y cuotas de poder escriturados a su cargo. Su gran poder se deriva de que se han apoderado de los organismos de control. Ellos controlan la fiscal¨ªa, la procuradur¨ªa, la contralor¨ªa y hasta la registradur¨ªa, que es la entidad encargada de dirigir y organizar las elecciones. Son parte de su bot¨ªn. La Fiscal¨ªa se ha convertido en la mejor sepultura para los verdaderos responsables de los esc¨¢ndalos ¨Ccomo el de Odebrecht o como el de Canal Isabel II¨C y es el refugio preferido de los pol¨ªticos corruptos del r¨¦gimen con procesos penales. All¨¢ se sienten a salvo, protegidos, como le ha sucedido al expresidente ?lvaro Uribe con su proceso por manipulaci¨®n de testigos en el que la Fiscal¨ªa se ha convertido en el fort¨ªn de su defensa. La justicia, da grima decirlo, se volvi¨® un asunto sicarial que se utiliza no para luchar contra el crimen, sino para acabar moralmente a los opositores o para acallar las voces de los periodistas que denunciamos. Le temen a Petro porque ven en el una amenaza populista que puede acabar con la propiedad privada y con nuestro estado de derecho, pero no les import¨® convertirnos en una autocracia.
Hace cuatro a?os los miembros del cartel de la toga, una mafia que se encargaba de montar procesos a los opositores para sacarlos del camino, le mont¨® la perseguidora a dos candidatos; a Sergio Fajardo y a Gustavo Petro. Ahora, cuatro a?os despu¨¦s, la historia vuelve a repetirse. A Sergio la contralor¨ªa le colg¨® de manera injusta y desproporcionada la lapida del esc¨¢ndalo de Hidroituango, una represa que ha tenido serios problemas en su construcci¨®n y le revivieron en la Fiscal¨ªa una investigaci¨®n de cuando era gobernador porque no tuvo el don de adivinar que el d¨®lar iba a fluctuar luego de haber hecho un pr¨¦stamo en d¨®lares. A Gustavo Petro, el candidato que sigue punteando en las encuestas, tambi¨¦n le tienen prendida la perseguidora y lo tienen en la mira.
El hecho de que el clan Char, un poderoso grupo familiar que fue se?alado por comprar votos en las elecciones pasadas, sea el due?o de la registradur¨ªa, tampoco ayuda a tranquilizar los temores que eso suscita en la oposici¨®n. Tampoco ayuda el cinismo con que el registrador Vega habla de las garant¨ªas electorales. En una comunicaci¨®n les dijo a los candidatos de la oposici¨®n que si no se sent¨ªan con garant¨ªas, era mejor que no se presentaran en la contienda.
A estos hechos preocupantes habr¨ªa que agregar la sorpresiva suspensi¨®n de la ley de garant¨ªas que le prohib¨ªa a gobernadores y alcaldes celebrar convenios interadministrativos para ejecutar recursos p¨²blicos durante los cuatro meses anteriores a cualquier elecci¨®n. Esta ley que se hizo para evitar que el gobierno y los partidos en el poder pudieran utilizar esos recursos para financiar las campa?as de sus candidatos, acaba de ser derogada en el congreso a petici¨®n del propio presidente Duque.
Sin esa ley, la mafiocracia tiene v¨ªa libre para invertir esos dineros en sus candidatos, lo que puede alterar seriamente el resultado electoral de las pr¨®ximas elecciones.
Es decir la mafiocracia va a usar su poder para incidir en estos comicios y se va a emplear a fondo para frenar el recambio en el congreso e imponer al nuevo presidente.
Sin embargo esta vez no les va a quedar f¨¢cil. El pa¨ªs pide a gritos un cambio de rumbo y ellos hastiados de tanto poder se han vuelto sordos. Por eso en las pr¨®ximas elecciones hay que ir a las urnas a votar por los nuevos liderazgos en el congreso y por el candidato presidencial que tenga la valent¨ªa de desnudar este contubernio. Esa es la ¨²nica manera como podemos extirpar del poder a esta mafiocracia. Demostr¨¢ndoles que les perdimos el miedo y que estamos dispuestos a emprender una batalla por la recuperaci¨®n de nuestra democracia.
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