El ejemplo alem¨¢n

Las fuerzas pol¨ªticas progresistas y de centro alemanas han alcanzado un acuerdo cuyo resultado ser¨¢ un Gobierno tripartito que pondr¨¢ fin a los 16 a?os de los democristianos liderando el poder con Angela Merkel en la Canciller¨ªa. La coalici¨®n entre socialdem¨®cratas (SPD), Verdes y liberales (FDP), con el socialdem¨®crata Olaf Scholz a la cabeza, es el fruto de un proceso negociador de concesiones mutuas extraordinarias motivadas por una visi¨®n compartida sobre la necesidad de cerrar una etapa en la historia de Alemania y modernizar el pa¨ªs.

Se trata de una buena noticia tanto para Alemania, donde el Ejecutivo estar¨¢ respaldado por una s¨®lida mayor¨ªa parlamentaria de 420 esca?os frente a los 320 de todas las fuerzas de oposici¨®n juntas, como para la Uni¨®n Europea. La aspiraci¨®n a un proyecto m¨¢s integrador figura entre las m¨¢ximas prioridades del acuerdo, plasmado en un documento de 181 p¨¢ginas donde, significativamente, la palabra ¡°Europa¡± aparece citada en 254 ocasiones, muchas m¨¢s que ¡°Alemania¡±. La renuncia de los socialdem¨®cratas a extender la suspensi¨®n temporal del Pacto de Estabilidad y optar por impulsar su reforma, como ped¨ªan los liberales, tiene importantes repercusiones tambi¨¦n en el futuro de la toda la Uni¨®n.

La llamada coalici¨®n sem¨¢foro ha marcado su hoja de ruta sobre cuatro pilares: protecci¨®n social, digitalizaci¨®n, descarbonizaci¨®n y modernizaci¨®n. El programa pactado busca la radical transformaci¨®n que necesita Alemania en su sistema econ¨®mico y productivo, pero promueve que no se realice penalizando a los sectores m¨¢s vulnerables de la sociedad, ya sea por razones de renta o de edad. Algunos de los compromisos alcanzados son muy ambiciosos, como el objetivo de que en 2030 el 80% de la producci¨®n el¨¦ctrica provenga de energ¨ªas renovables, la aceleraci¨®n de la salida del mercado de combustibles f¨®siles y el impulso investigador a nuevas fuentes, como el llamado hidr¨®geno verde. Todo ello se emplaza en un marco de fuertes inversiones para la pr¨®xima d¨¦cada y sin renunciar por completo a la caracter¨ªstica ortodoxia fiscal alemana. El apartado social, por su parte, marca una importante diferencia frente a la anterior gesti¨®n conservadora: entre las medidas acordadas destaca una importante subida del salario m¨ªnimo y la construcci¨®n de 400.000 viviendas nuevas al a?o, 100.000 de las cuales ser¨¢n de protecci¨®n oficial. En su conjunto, el acuerdo env¨ªa un claro mensaje a Europa sobre la necesidad de actuar con eficacia en un momento en el que la ultraderecha antieurope¨ªsta trata de capitalizar el descontento generado por la crisis e imponer una visi¨®n retr¨®grada de los valores de la Uni¨®n.