Nace una ciudad

El Senado respald¨® ayer en comisi¨®n el ¡°hito¡± y el ¡°ejemplo¡± ¡ªt¨¦rminos repetidos por casi todos los portavoces¡ª de la fusi¨®n de las localidades pacenses de Don Benito y Villanueva de la Serena, aprobada por sus vecinos en refer¨¦ndum hace casi un mes. Ambos alcaldes (socialistas) repasaron en la C¨¢mara de representaci¨®n territorial, invitados de forma conjunta por PP y PSOE, una uni¨®n que desde hoy pone en marcha cinco comisiones de trabajo, entre ellas la paritaria de 14 expertos que en dos meses propondr¨¢ un nombre para la nueva ciudad. La uni¨®n es el mayor proceso de este tipo registrado en democracia y cuenta con un evidente aval ciudadano: el list¨®n autoimpuesto por ambos regidores para que la iniciativa siguiese adelante (66% de apoyo en cada localidad) se super¨® en Don Benito por menos de tres d¨¦cimas y gracias al voto anticipado. La voluntad de los residentes fue clara con 90,49% de s¨ªes en Villanueva y 66,27% en Don Benito.

Nacer¨¢ as¨ª la tercera ciudad de Extremadura (m¨¢s de 63.000 residentes, solo tras las dos capitales provinciales) y la segunda en PIB tras Badajoz. Ganar tama?o tendr¨¢ repercusiones econ¨®micas, ya detalladas en el informe que los alcaldes solicitaron a la Universidad de Extremadura antes de plantear la consulta: crecimiento del empleo de al menos un 5%, primera poblaci¨®n extreme?a en producci¨®n agr¨ªcola y ganadera (19,7%) e industrial (8,1%) y segundo n¨²cleo comercial (16%). O un aumento de la renta de los hogares del 2,75%. M¨¢s poblaci¨®n se traducir¨¢ en m¨¢s fondos estatales. El proceso para fusionar dos poblaciones que ya compart¨ªan servicios culminar¨¢ en el primer trimestre de 2027 y las municipales de ese a?o. Cinco a?os es un plazo suficiente para ejecutar las actuaciones necesarias, evaluar el funcionamiento y corregir posibles duplicidades.

La fusi¨®n se inscribe en las pol¨ªticas de racionalizaci¨®n de la planta local desarrolladas en Europa en las ¨²ltimas d¨¦cadas, que han implicado notables reducciones del n¨²mero de municipios. Cuando crecen las propuestas localistas, este debate resulta necesario en Espa?a: el 84% de sus 8.131 municipios tiene menos de 5.000 vecinos, la misma planta en el siglo XXI que a principios del XIX. La fusi¨®n voluntaria de localidades contribuye a racionalizar sus estructuras y a superar la atomizaci¨®n, como destaca la ley de 2013 que ha servido de paraguas legal. Esa fragmentaci¨®n y una p¨¦rdida de poblaci¨®n que afecta a las tres cuartas partes de las localidades les impide desarrollar todas sus capacidades. Esta fusi¨®n, que tanto pol¨ªticos como ciudadanos han defendido como una apuesta por el futuro de las j¨®venes generaciones, puede servir de acicate para revertir uno de los procesos que est¨¢ vaciando amplias zonas de Espa?a. El refer¨¦ndum que lo acord¨® no era un tr¨¢mite necesario, pero s¨ª ha cargado de sentido democr¨¢tico una propuesta respaldada ¡ªayer de nuevo¡ª de forma un¨¢nime por los partidos.