Basta ya de animar desde la grada

El presidente de Ucrania, Volod¨ªmir Zelenski, sabe c¨®mo tocarnos la fibra sensible. Invoc¨® a Winston Churchill ante los brit¨¢nicos, Pearl Harbor ante los estadounidenses, y record¨® a los alemanes que una vez hicieron una promesa: ¡°Nunca m¨¢s¡±.

Sin embargo, no conmovi¨® a Olaf Scholz. El canciller alem¨¢n decidi¨® no asistir al discurso de Zelenski ante el Bundestag. Despu¨¦s del radical giro pol¨ªtico que ha dado sobre el gaseoducto Nord Stream 2, el aumento del gasto en defensa y la entrega de armas a Ucrania, no quer¨ªa ser sermoneado por un pol¨ªtico estrella del rock. Me cae bien Scholz. El ataque de Rusia a Ucrania requiere un poco de pensamiento estrat¨¦gico y sangre fr¨ªa por parte de Occidente, en lugar de los gritos de ¨¢nimo que se est¨¢n produciendo en los medios de comunicaci¨®n y en las redes sociales en este momento.

No nos corresponde a nosotros aconsejar a Zelenski sobre lo que tiene que hacer sobre el terreno, y en qu¨¦ momento debe llegar a un acuerdo. M¨¢s bien, lo que deber¨ªamos hacer en Occidente es ser m¨¢s claros sobre qu¨¦ podemos hacer nosotros. Por ejemplo, no podemos acelerar la solicitud de adhesi¨®n de su pa¨ªs a la Uni¨®n Europea. Es realmente peligroso poner esta zanahoria ante los ucranios en un momento como este. Francia ha estado bloqueando la adhesi¨®n de Macedonia del Norte y Albania. No es posible que la UE pueda acelerar la adhesi¨®n de Ucrania sin acelerar la de los dem¨¢s. Varias rondas de ampliaci¨®n de la UE, sin la correspondiente profundizaci¨®n, han dejado a la UE en una posici¨®n desequilibrada. La defensa de la ampliaci¨®n de la UE ha sido y sigue siendo m¨¢s ruidosa entre los periodistas y acad¨¦micos del Reino Unido. Pero no parecen darse cuenta de que el Brexit realmente cambi¨® el debate sobre la ampliaci¨®n. Tambi¨¦n hay que tener en cuenta que si la UE se convirtiera en una uni¨®n de defensa, ?no nos arriesgar¨ªamos a un conflicto directo con Mosc¨² por Ucrania en otra ocasi¨®n?

Otra zanahoria que les estamos poniendo delante a los ucranios son las armas. La mayor¨ªa de las armas alemanas que se prometieron nunca llegaron. Las futuras entregas de armas van a ser m¨¢s dif¨ªciles porque la OTAN no quiere enfrentarse directamente al ej¨¦rcito de Rusia. Sergu¨¦i Lavrov, el ministro de Asuntos Exteriores ruso, ha afirmado que los convoyes de armas occidentales constituyen un objetivo leg¨ªtimo en la guerra. Es de prever que el suministro de armas a Ucrania se agote con el tiempo.

Uno de los palos con los que los ucranios nos est¨¢n amenazando a nosotros es la repetida afirmaci¨®n de que, una vez que Putin tome Ucrania, seremos los siguientes. Entiendo por qu¨¦ quiere difundir ese relato. Pero no es cierto. El radio de horror de Putin se limita a la esfera rusa que no est¨¢ en la OTAN: Ucrania, Georgia, tal vez Moldavia. La respuesta de la OTAN a esta guerra le ha sorprendido. La OTAN va a destinar un n¨²mero abrumador de tropas y armas a su frente oriental. Una invasi¨®n de un pa¨ªs de la OTAN ser¨ªa demasiado arriesgada incluso para un hombre que calcule los riesgos que corre.

Sin embargo, Putin puede ganar la guerra en Ucrania porque tiene las armas m¨¢s mort¨ªferas y est¨¢ dispuesto a atacar a civiles. Una vez que los suministros de armas occidentales terminen, las probabilidades en esta guerra volver¨¢n a estar a favor de Rusia. El tiempo est¨¢ del lado de Putin.

Tambi¨¦n puede contar con la brevedad de nuestra capacidad de atenci¨®n. Los tabloides brit¨¢nicos ya empiezan a perder inter¨¦s. Los medios de comunicaci¨®n y Twitter vuelven a obsesionarse con las pifias de Boris Johnson y otros graves asuntos de Estado. ?Seguiremos viendo im¨¢genes de Ucrania al principio de los informativos dentro de cuatro semanas? ?Dentro de cuatro meses? ?Es posible que Putin espere a que nos distraigamos antes de descargar sus armas m¨¢s mort¨ªferas? A Occidente le importaron poco las bombas de racimo en Alepo, Siria.

Europa puede y debe hacer una promesa cre¨ªble de que acogeremos a millones de refugiados ucranios. Pero nuestra capacidad de ayudar a Ucrania a ganar la guerra es limitada. Esto es lo que debemos decirle a Zelenski. Basta ya de animar desde la grada.