Vivienda disparada

El mercado de la vivienda est¨¢ sometido a una elevada agitaci¨®n y a un r¨¢pido proceso de encarecimiento que solo puede agravar uno de los problemas cr¨®nicos de la sociedad espa?ola: los precios han aumentado hasta en un 8,5% con respecto al mismo periodo del a?o anterior a lo largo del primer trimestre del a?o. Los ¨²ltimos datos apuntan a niveles r¨¦cord en operaciones de compraventa, as¨ª como a fuertes subidas en los precios de los alquileres que siguen haciendo muy dif¨ªcil el acceso a la vivienda, sobre todo en grandes ciudades, a j¨®venes y familias de rentas bajas. De hecho, hay ciudades en las que los precios ya se sit¨²an en los niveles de la burbuja inmobiliaria y, aunque la compraventa acumula 14 meses de ascensos, los datos publicados el lunes por el Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE) empiezan a mostrar el impacto de la elevada inflaci¨®n y una ralentizaci¨®n en el n¨²mero de operaciones cerradas en el mes de abril.

El encarecimiento de los materiales de construcci¨®n est¨¢ frenando la oferta de obra nueva, lo que a?ade presi¨®n sobre ese mercado y tambi¨¦n sobre el de segunda mano. Esa amenaza persiste y hace m¨¢s necesario todav¨ªa recordar el informe anual del Banco de Espa?a y su advertencia de que para reducir la desigualdad, es necesario actuar sobre las condiciones de acceso a la vivienda, que se han endurecido en los ¨²ltimos a?os, tanto en la vivienda en propiedad como en la de alquiler.

La ley de vivienda que el Gobierno envi¨® al Congreso en el mes de febrero, y que tiene todav¨ªa pendiente su tramitaci¨®n parlamentaria, recoge varias iniciativas para promover el alquiler y limitar las subidas de precios, pero las cifras de inflaci¨®n complican algunas de las propuestas del Ejecutivo, como la declaraci¨®n de zona de precios tensionada o las condiciones exigidas para topar los precios en determinadas ¨¢reas. La experiencia en aquellas zonas donde las administraciones han decidido una limitaci¨®n de los precios de los alquileres ha reducido la oferta y ha hecho m¨¢s dif¨ªcil el acceso a la vivienda de muchas familias.

El propio Banco de Espa?a apostaba, por el contrario, por poner el ¨¦nfasis en la construcci¨®n de vivienda p¨²blica en alquiler, donde los avances siguen muy limitados y tremendamente desiguales por el territorio. Su recomendaci¨®n se basa en datos de Eurostat de 2020, seg¨²n los cuales un 48,7% de los espa?oles que viv¨ªan de alquiler a precios de mercado estaban en riesgo de pobreza o de exclusi¨®n social, el porcentaje m¨¢s elevado de la Uni¨®n Europea. Sin embargo, seg¨²n datos del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, apenas una de cada cuatro viviendas construidas con dinero p¨²blico en toda Espa?a en 2021 se destin¨® al alquiler. Y 10 comunidades aut¨®nomas (Andaluc¨ªa, Arag¨®n, Asturias, Baleares, Canarias, Cantabria, Castilla-La Mancha, Extremadura, Murcia y La Rioja) no concedieron ni una calificaci¨®n para vivienda p¨²blica destinada al arrendamiento. La actuaci¨®n de las administraciones p¨²blicas es a¨²n m¨¢s urgente ahora que a principios de a?o: sigue pendiente en Espa?a una promoci¨®n p¨²blica y masiva de obra destinada al alquiler que consiga revertir la tradicional preferencia por la compra en lugar del alquiler, y acabe con la excepci¨®n espa?ola en el contexto europeo.