Alzheimer: el elefante en la habitaci¨®n

El Alzheimer y las demencias se est¨¢n configurando como una pandemia estructural que, a falta de tomarse medidas, podr¨ªa alcanzar una dimensi¨®n sanitaria y asistencial insostenible. Son el elefante en la habitaci¨®n, ignorado por nuestros responsables p¨²blicos a pesar de su enorme tama?o.

A las puertas de un nuevo ciclo electoral en el que escucharemos las propuestas de los diversos candidatos es vital que los poderes p¨²blicos y los partidos pol¨ªticos dejen de mirar hacia otro lado. Estamos ante una realidad a la que debemos enfrentarnos como sociedad y que afecta a miles de ciudadanos y familias que soportan gran parte del peso y de los costes derivados del cuidado y la atenci¨®n.

Se estima que hoy hay en Espa?a 900.000 personas con demencia, un 70% de los casos se deben a la enfermedad de Alzheimer. Solo en t¨¦rminos con¨®micos, esto representa un coste anual de 21.000 millones de euros. Si no se encuentran soluciones, con el aumento de la esperanza de vida, el n¨²mero de personas afectadas podr¨ªa duplicarse en un par de d¨¦cadas.

En ausencia de una cura, que a¨²n parece lejana, la ¨²nica soluci¨®n a medio plazo consiste en promover m¨¢s investigaci¨®n para conocer a fondo las causas de la enfermedad y contribuir a un diagn¨®stico precoz y al avance de estrategias de prevenci¨®n. La r¨¢pida respuesta a la covid-19 ha demostrado que, cuando se invierte en ciencia, la humanidad es capaz de acabar con problemas de salud que parec¨ªan irresolubles.

Sin embargo, el abordaje del Alzheimer y otras demencias no est¨¢ en las prioridades de las pol¨ªticas p¨²blicas a pesar de su gran impacto y prevalencia. No lo est¨¢ la atenci¨®n a las familias afectadas, ni la mejora de los protocolos sanitarios, ni tampoco la promoci¨®n de la investigaci¨®n. Basta como ejemplo la dotaci¨®n presupuestaria del Plan Integral de Alzheimer, la principal herramienta de abordaje p¨²blico de esta enfermedad y que en 2023 no llega a un mill¨®n de euros. No vemos al elefante, aunque el Alzheimer ya sea la segunda preocupaci¨®n de salud entre los espa?oles, muy cerca del c¨¢ncer.

Hablamos de enfermedades que afectan a una de cada diez personas mayores de 65 a?os y a una de cada tres que cuentan con m¨¢s de 85. Son personas que se enfrentan a un deterioro cognitivo progresivo que hace que necesiten cuidados diarios y constantes para realizar sus actividades cotidianas. En el 80% de los casos el cuidado y la atenci¨®n recaen en un familiar que ve totalmente alterada su vida, con consecuencias importantes para su salud psicol¨®gica y su bienestar.

Adem¨¢s de ser la tercera causa de mortalidad en Espa?a, el Alzheimer es la enfermedad que causa m¨¢s a?os vividos en situaci¨®n de dependencia. Es, tambi¨¦n, una enfermedad con un claro componente de g¨¦nero, no solo porque las mujeres tienen el doble de riesgo de padecerla, sino porque, en dos de cada tres casos, las tareas de cuidado, acompa?amiento y apoyo recaen en ellas, con el enorme coste personal que esto supone.

Pero no todo son malas noticias. Espa?a es una de las primeras potencias mundiales en la investigaci¨®n de estas enfermedades, a pesar de los recursos insuficientes que se dedican a ella. El ecosistema cient¨ªfico espa?ol est¨¢ preparado para asumir y administrar fondos de manera eficaz, por lo que tenemos la garant¨ªa de que la investigaci¨®n puede avanzar si se la dota de los recursos suficientes.

Somos muchas las entidades que hace a?os que insistimos en que el abordaje del Alzheimer y las demencias debe ser una prioridad pol¨ªtica estrat¨¦gica. Sin embargo, el an¨¢lisis de los programas de las ¨²ltimas citas electorales demuestra la ausencia total de propuestas para fomentar la investigaci¨®n, el diagn¨®stico precoz o el apoyo al cuidado de las personas diagnosticadas y su entorno familiar. En la mayor¨ªa de los casos, no hay referencia alguna a estas enfermedades.

Si no tomamos conciencia y actuamos r¨¢pida y eficazmente, la pandemia estructural del Alzheimer tendr¨¢ consecuencias inasumibles para nuestra sociedad y nuestro sistema sanitario y social. Es imprescindible que activemos las pol¨ªticas y los recursos necesarios.

Para ello, el primer paso consiste en que los poderes p¨²blicos reconozcan la magnitud del reto y le presten atenci¨®n. Las citas electorales de 2023 son una ocasi¨®n ¨²nica para que los partidos pol¨ªticos y los gobiernos que surjan de las urnas incorporen a sus programas electorales y legislativos soluciones a los problemas que afectan a sus ciudadanos.

El abordaje del Alzheimer y las demencias debe dejar de ser el elefante en la habitaci¨®n.