Abandonar la red social de Elon Musk

El ¨²ltimo tuit informativo que lanz¨® la radio estadounidense NPR fue el 5 de abril. La organizaci¨®n dej¨® de usar Twitter porque las nuevas pol¨ªticas de la red social le colocaron, primero, una etiqueta de ¡°medio de comunicaci¨®n afiliado al Estado¡± y luego, tras protestar, la de ¡°medio financiado por el Gobierno¡±. En un comunicado, consideraron que esas denominaciones cuestionaban su independencia editorial y buscaban socavar su credibilidad. D¨ªas despu¨¦s, en un hilo, dieron alternativas para acceder a sus contenidos sin depender de esta red social.

Las consecuencias de abandonar Twitter ¡ªahora X¡ª han resultado, para ellos, ¡°insignificantes¡±, seg¨²n una nota distribuida entre los trabajadores de la NPR y que ha analizado el periodista Gabe Bullard. En su art¨ªculo en Nieman Reports dice lo que muchos pensamos: esa red social no merece el esfuerzo que le dedicamos, sea profesionalmente desde los medios de comunicaci¨®n, pues el porcentaje de audiencia que llega desde all¨ª no es tan grande; o sea desde una cuenta personal, ya que la desinformaci¨®n, las malas formas de algunos usuarios o incluso el propio algoritmo pueden hacer que nuestra experiencia no sea tan grata como esperamos.

Los periodistas, sobre todo los m¨¢s j¨®venes, tienen ¡ªtenemos¡ª la presi¨®n de estar presentes en todas las plataformas, cuantas m¨¢s mejor, y cuidar y alimentar activamente los perfiles en cada una de ellas, ya que esa es la ¨²nica forma de que te conozcan y te den una oportunidad laboral. De ello escribi¨® Rub¨¦n Serrano (@RubenSerranoM) hace unos d¨ªas, cuando confes¨® la raz¨®n por la que llevaba unos meses m¨¢s alejado de las redes: ¡°Estar presente porque me nac¨ªa pas¨® a serlo por necesidad y por unos precios que me hicieron creer que mi trabajo no val¨ªa la pena. Me quem¨®, me desgast¨® y las redes me secaron por completo. Poner un tuit o no ponerlo me disparaba la ansiedad¡±.

En la misma l¨ªnea public¨® Mario Ju¨¢rez (@_emenauta): ¡°Cada d¨ªa tengo menos fuerza para seguir aqu¨ª. Vuelvo porque esto me ha tra¨ªdo gente incre¨ªble a mi vida, pero me ten¨¦is que decir c¨®mo hac¨¦is para que las guerras, las temperaturas planetarias, los cad¨¢veres y los medios buitres no os destrocen por dentro¡±. Ju¨¢rez se refiri¨® tambi¨¦n a la ansiedad que puede generar en ocasiones esta red social, que impulsa a participar en todos los debates, a tener una opini¨®n formada y urgente sobre todos los temas. Una opini¨®n que, encima, se puede malinterpretar.

Esta cuesti¨®n la abordaba Jaron Lanier en 2018 en su libro Diez razones para borrar tus redes sociales de inmediato, donde hablaba de su funcionamiento: ¡°Remezclan el significado, cualquier cosa que digamos se contextualizar¨¢ y se le dar¨¢ significado a trav¨¦s de la forma en la que los algoritmos, las multitudes reales y las de personas falsas la remezclen con lo que dicen otras personas¡±. Tambi¨¦n criticaba la presi¨®n que se imponen los medios de comunicaci¨®n para difundir y conseguir audiencia, algo que seguro tambi¨¦n tendr¨ªan en la NPR antes de irse de Twitter.

S¨ª, es cierto que la plataforma no es solo el tr¨¢fico que reporta. Twitter tambi¨¦n es amistad, comunidad, fuentes de informaci¨®n, temas de conversaci¨®n y debates interesant¨ªsimos. Precisamente por eso, y aunque reneguemos, muchos aguantaremos en ella hasta el fin de sus d¨ªas ¡ªque pueden ser pocos, ya que Elon Musk ha sugerido que bloquear¨¢ el acceso en Europa para evitar cumplir con la legislaci¨®n comunitaria, seg¨²n Business Insider¡ª o hasta que tengamos que pagar para usarla, como ya hace con los nuevos perfiles en Filipinas y Nueva Zelanda para, dice, evitar bots. Como si las granjas de bots no pudieran pagar un d¨®lar al a?o para seguir intoxicando.