La revoluci¨®n CRISPR llega a la cl¨ªnica
La edici¨®n gen¨®mica de pacientes parece a punto de recibir luz verde de la agencia del medicamento de Estados Unidos
Una grave enfermedad hereditaria que afecta a millones de personas en el mundo, la anemia falciforme, est¨¢ a punto de convertirse en objeto del primer ¡°f¨¢rmaco CRISPR¡± aprobado por la agencia del medicamento de Estados Unidos (la FDA), lo que suele servir como disparador para que la agencia europea (EMA) haga lo propio un poco despu¨¦s. La t¨¦cnica de edici¨®n gen¨®mica CRISPR se descubri¨® hace poco m¨¢s de diez a?os, se llev¨® un premio Nobel hace tres y ya ha revolucionado los laboratorios gen¨¦ticos de medio mundo. Sus aplicaciones son muy amplias, pero una de las m¨¢s evidentes es la de aliviar el sufrimiento humano. Hay m¨¢s de 3.000 enfermedades gen¨¦ticas distintas, y la perspectiva de tratarlas una a una, desarrollando f¨¢rmacos al viejo estilo, es francamente exigua. Pero si sabes arreglar un gen, sabes arreglar cualquiera. Esta es la gran esperanza contra las enfermedades raras, que son gen¨¦ticas en su mayor¨ªa.
Tiene algo de justicia po¨¦tica que el primer tratamiento CRISPR que vaya a ser aprobado sea contra la anemia falciforme, que fue la primera enfermedad gen¨¦tica descrita molecularmente. La sangre es roja porque contiene gl¨®bulos rojos, que a su vez lo son porque contienen hemoglobina. Esta es la prote¨ªna que trasporta el ox¨ªgeno desde los pulmones hasta el resto del cuerpo. Una mutaci¨®n en el gen de la hemoglobina hace que la prote¨ªna se apile en largos filamentos que deforman los gl¨®bulos rojos y los hacen atascarse en las venas. Las consecuencias son graves y dolorosas, e incluyen una muerte prematura.
La hemoglobina mutante se da sobre todo en la franja ecuatorial de ?frica y en personas de esa ascendencia. Una de cada 12 personas negras lleva la mutaci¨®n, pero solo una de cada 400 tiene la enfermedad. La raz¨®n es que hay que heredar la mutaci¨®n tanto del padre como de la madre para sufrirla. Pero ?por qu¨¦ es tan com¨²n en esa zona? Las mutaciones debilitantes suelen resultar barridas de cualquier poblaci¨®n por la selecci¨®n natural. ?Por qu¨¦ no lo han sido en ?frica? La respuesta es otro cl¨¢sico de la patolog¨ªa molecular: las personas con una copia mala y otra buena del gen no padecen la enfermedad, pero son resistentes a la malaria, que es end¨¦mica en esa zona. En esas condiciones, a la evoluci¨®n no le interesa barrer al gen malo. No del todo, al menos.
Por todo lo que sabemos, CRISPR cura a la gran mayor¨ªa (29/30) de enfermos de anemia falciforme, aunque de una forma algo indirecta. Hay otro gen de la hemoglobina (llamado fetal) que normalmente solo funciona durante el desarrollo del feto. Despu¨¦s lo apaga otro gen represor (BCL11A). Lo que hace CRISPR es inactivar al represor, de modo que la hemoglobina fetal, que no est¨¢ afectada por la mutaci¨®n, se produce en el adulto. Este tipo de circuitos l¨®gicos son universales en gen¨¦tica.
El tratamiento no es una pastilla. Hay que extraer c¨¦lulas medulares del paciente, modificar sus genes y reinsertar las c¨¦lulas. Estas pr¨¢cticas funcionan bien, pero son muy caras. Despu¨¦s de la aprobaci¨®n de la FDA, empezar¨¢ la verdadera guerra por el acceso al f¨¢rmaco. ?Cu¨¢nto cuesta una vida humana?
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