Los regalos bajo el ¨¢rbol de Navidad de Putin
El Kremlin tiene varios Pap¨¢s Noel: Viktor Orb¨¢n, Donald Trump y los republicanos, Xi Jinping, los camioneros polacos y el doble rasero de Occidente

A Vlad¨ªmir Putin, que ayer anunci¨® su poco sorpresiva candidatura a las elecciones de marzo para seguir en la presidencia, se le van acumulando muchos regalos bajo el ¨¢rbol de Navidad. Tiene varios Pap¨¢s Noel: Viktor Orb¨¢n, Donald Trump y los republicanos, Xi Jinping, los camioneros polacos y el doble rasero de Occidente, entre otros. Veamos.
Orb¨¢n. El primer ministro h¨²ngaro ha sido en repetidas ocasiones un obst¨¢culo para que la UE avanzara en su respuesta a la invasi¨®n Rusia de Ucrania. Ahora, de cara al importante Consejo Europeo de la semana que viene, Budapest agita su poder de veto ante dos iniciativas fundamentales: la actualizaci¨®n presupuestaria necesaria para garantizar nuevos fondos ¡ª50.000 millones de euros entre ayudas y pr¨¦stamos¡ª a Kiev, y la apertura de negociaciones para la adhesi¨®n de Ucrania a la UE. Sin duda, en gran medida es una maniobra para obtener a cambio la liberaci¨®n de fondos europeos congelados a causa de sus desmanes antidemocr¨¢ticos. Pero no es solo eso, hay m¨¢s: una visi¨®n estrat¨¦gica que igual ser¨¢ la que ¨¦l cree mejor para Hungr¨ªa, pero se parece mucho a un servicio prestado al Kremlin.
Trump y los republicanos. El partido conservador estadounidense ha tumbado esta semana en el Senado la medida con la que la Administraci¨®n de Biden busca, entre otras cosas, activar 50.000 millones de d¨®lares de nueva ayuda para Ucrania. Los republicanos han argumentado que para dar el visto bueno la presidencia debe hacer mucho m¨¢s para frenar la inmigraci¨®n irregular en EE UU. M¨¢s all¨¢ de la catadura moral del tener como reh¨¦n a Ucrania para una pelea de pol¨ªtica interna, en realidad lo ocurrido es una muestra de la creciente reticencia del partido a implicarse en el apoyo a Kiev, en l¨ªnea con la m¨¢s general ideolog¨ªa aislacionista de la que Trump es portabandera.
Xi Jinping. Esta semana se han conocido los datos de comercio entre China y Rusia desde enero hasta noviembre de este a?o. El total asciende a 218.000 millones de d¨®lares, un 26% m¨¢s que el a?o anterior. En el desglose, se ve que las exportaciones chinas a Rusia han crecido un 50%. China est¨¢ sustituyendo en gran medida los productos occidentales que ya no llegan con fluidez por las sanciones. Ox¨ªgeno chino reanima a Rusia.
Camioneros polacos. Desde principios de noviembre, los camioneros polacos mantienen una protesta que est¨¢ obstaculizando el comercio con Ucrania. Se quejan de que la UE garantiza a los camioneros ucranios un trato de favor que distorsiona la competencia. Por ello, bloquean pasos fronterizos, ralentizando el flujo mercantil. Bruselas no logra solventar el asunto, que va a peor, con agricultores polacos y camioneros h¨²ngaros ¡ª?qu¨¦ casualidad!¡ª sum¨¢ndose a la protesta.
Doble rasero occidental. Un regalo intangible pero colosal para el Kremlin es la actitud de EE UU y Europa ante el conflicto en Gaza. Aunque la ret¨®rica haya ido cambiando con el paso de las semanas, reclamando con mayor contundencia a Israel el respeto del derecho internacional, la total ausencia de hechos concretos y relevantes para presionar al Gobierno de Netanyahu para que se abstenga de infligir el masivo sufrimiento humano que viene causando desde hace dos meses da alas enormes al argumento de que Occidente act¨²a con un doble rasero. En tromba contra las violaciones del derecho en Ucrania, con sordina en Gaza. Putin gustosamente subraya esta duplicidad ante la mirada de un mundo que, vaya, no tiene dudas acerca de lo que ve.
La UE y EE UU han reaccionado de forma notable a la invasi¨®n de Ucrania. Claramente, Putin no se esperaba de ninguna manera algo parecido. Esa reacci¨®n ha permitido a Ucrania resistir, y hundido a Rusia en un camino que es un calvario. Pero ahora muchas cosas est¨¢n yendo claramente mal a este lado del frente. Hay que activarse con contundencia para desactivar a esos Pap¨¢s Noel y quitar, o reducir el tama?o, de los regalos que se acumulan bajo el ¨¢rbol de Navidad de Putin. No es demasiado tarde, pero la tarea es compleja y requiere mucho ingenio, mucha concentraci¨®n, mucha altura de miras, mucha valent¨ªa. ?nimo.
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