Claves para entender la India de Modi
Bonanza econ¨®mica y retroceso democr¨¢tico conviven en un pa¨ªs que hoy celebra elecciones
Siendo todav¨ªa ni?o, los padres del primer ministro de la India, Narendra Modi, decidieron concertar su matrimonio con la hija de una familia conocida ¡ªuna costumbre tradicional en la aldea de donde proven¨ªa¡ª. Una vez alcanzada la edad legal para formalizar la uni¨®n, Modi, que carec¨ªa de vocaci¨®n familiar, abandon¨® el hogar y desapareci¨® por dos a?os. Durante este periodo, en el que no dio se?ales de vida, anduvo como n¨®mada errante, viajando por las provincias del norte del pa¨ªs. Cuando finalmente regres¨® a casa, al verlo aparecer por la puerta, la atribulada madre le pregunt¨® d¨®nde hab¨ªa estado todo ese tiempo. ¡°En el Himalaya¡±, respondi¨® lac¨®nicamente. Acto seguido, se dirigi¨® al centro local de la Rashtriya Swayamsevak Sangh (RSS), la Asociaci¨®n de Voluntarios Nacionales.
La an¨¦cdota, recogida por el escritor brit¨¢nico Andy Marino en Narendra Modi: una biograf¨ªa pol¨ªtica, indica, entre otras cosas, de la devoci¨®n del primer ministro indio hacia la instituci¨®n que le introdujo en la doctrina del nacionalismo hind¨², organizaci¨®n tan relevante en la India como desconocida fuera de sus fronteras.
A menudo se compara al primer ministro indio con figuras de cariz populista como Recep Tayyip Erdogan en Turqu¨ªa. Hombres fuertes de talante autoritario. Sin embargo, Narendra Modi no es un personaje que encaje con facilidad en las categor¨ªas pol¨ªticas al uso. Al contrario de la divisoria populista que contrapone las ¡°¨¦lites decadentes¡± al ¡°pueblo verdadero¡±, el premier indio ha logrado un apoyo transversal en la sociedad m¨¢s diversa y compleja que existe. A Modi lo respaldan las ¨¦lites econ¨®micas ¡ªla nueva plutocracia cuya riqueza ha crecido exponencialmente bajo su mandato¡ª pero tambi¨¦n los sectores m¨¢s pobres, castas atrasadas y los descastados o dalits, que ven en su fulgurante carrera, de hijo de un modesto vendedor de t¨¦ en una estaci¨®n de ferrocarril a primer ministro estelar, una trayectoria ejemplar.
Pero, sobre todo, la popularidad Modi responde a los cambios propiciados por un movimiento de reforma surgido en 1925 con la finalidad de avanzar la causa nacional india desde la identidad hind¨². Se trata de la RSS, formaci¨®n que a lo largo de un siglo, con algunos altibajos, ha incrementado su campo de acci¨®n hasta convertirse en el principal agente de transformaci¨®n cultural del pa¨ªs. En esa marcha, en los a?os ochenta, la campa?a para la construcci¨®n de un templo dedicado al dios Rama en la ciudad de Ayodhia, donde se encontraba ubicada la mezquita de Babri, encumbr¨® al movimiento y apuntal¨® los pilares del nacionalismo hind¨² contempor¨¢neo. Tres d¨¦cadas despu¨¦s, el pasado mes de enero, Modi inaugur¨® el templo de Rama, consagrando la oficialidad de la identidad nacional hind¨².
La RSS cuenta con una red compuesta por m¨¢s de 37.000 centros de reuni¨®n, las shakkas, donde presta ayuda social e instrucci¨®n en los valores de la hinduidad. La asociaci¨®n act¨²a tambi¨¦n a modo de matriz para las cerca de 40 agrupaciones afiliadas que operan en distintas ¨¢reas de inter¨¦s como la empresa, la poblaci¨®n tribal, o la di¨¢spora india en el extranjero, y que incluye al principal sindicato de trabajadores del pa¨ªs, con 10 millones de afiliados, a la organizaci¨®n estudiantil Akhil Bharatiya Vidyarthi Parishad ¡ªconsiderada la mayor asociaci¨®n de estudiantes del mundo¡ª, y al triunfante partido pol¨ªtico de Modi, el Bharatiya Janata Party (BJP). Todos juntos forman la sangh parivar, la ¡°familia¡±.
Si bien las unidades afiliadas son aut¨®nomas, existe una relaci¨®n de interdependencia jer¨¢rquica entre ellas y la RSS. En el caso del BJP, en las elecciones generales de 2014 y 2019, decenas de miles de voluntarios participaron en la campa?a distribuyendo material electoral, elaborando estudios y asesorando en materia de tecnolog¨ªas de la comunicaci¨®n. El resultado fue notable, en ambos casos el partido obtuvo la mayor victoria de su historia.
Con objeto de atraer a nuevos simpatizantes y diluir los aspectos m¨¢s pol¨¦micos de su ideolog¨ªa, la RSS ha convertido el desarrollo econ¨®mico y social en leitmotiv del nacionalismo hind¨². La preocupaci¨®n por el medio ambiente, la atenci¨®n a los problemas de la pobreza, la educaci¨®n y la sanidad ocupan el centro de su discurso.
Esta mezcla de regeneracionismo religioso y voluntad de progreso coincide con el enfoque adoptado en el gobierno por Narendra Modi, con patente ¨¦xito a la vista de los logros de la ¨²ltima d¨¦cada. Si en 2014 la falta de infraestructuras de comunicaci¨®n y transporte amenazaba con crear un cuello de botella, a d¨ªa de hoy se han duplicado los tramos de carreteras rurales, puertos, autopistas y aeropuertos. Los programas de bienestar social, acu?ados con la foto de Modi, han multiplicado por cuatro el acceso de agua canalizada en el campo, duplicado las l¨ªneas de transmisi¨®n el¨¦ctrica y pr¨¢cticamente eliminado la defecaci¨®n abierta ¡ªuna necesidad sanitaria b¨¢sica¡ª. Las transformaciones digitales han tenido un impacto directo sobre la gobernanza con la implantaci¨®n de un sistema de identificaci¨®n biom¨¦trica que permite a los ciudadanos recibir ayudas directas del Estado, eliminando la figura de los mediadores, y ahorrando miles de millones en p¨¦rdidas por corrupci¨®n. A nivel internacional, la India ha aumentado su influencia global y ha sabido capitalizar la diversificaci¨®n de las inversiones extranjeras inducidas por las tensiones entre Estados Unidos y China. El ejemplo m¨¢s reciente, el anuncio de la colaboraci¨®n entre la empresa india Tata y la taiwanesa Powerchip Semiconductor Manufacturing Corporation (PSMC) para fabricar semiconductores en el estado de Gujarat.
Un rosario de logros econ¨®micos que ha ido acompa?ado de un retroceso en la calidad democr¨¢tica. Se acusa a las agencias de investigaci¨®n criminal de actuar selectivamente contra la oposici¨®n y contra los cr¨ªticos con el Gobierno. Los casos m¨¢s sonoros han sido la inhabilitaci¨®n del l¨ªder del Partido del Congreso Rahul Gandhi y el arresto, un mes antes de las elecciones, de Arvind Kejriwal, dirigente de la oposici¨®n. En lo social se ha formado un clima de inseguridad para los 200 millones de musulmanes del pa¨ªs, y pocos se atreven a denunciar los abusos de los que son objeto. La posici¨®n de la India en los ¨ªndices de libertad de prensa baja.
Desde una ¨®ptica liberal, llama la atenci¨®n que a la poblaci¨®n india no parece importarle esta deriva. Antes lo contrario. Las medidas m¨¢s controvertidas de la agenda del BJP y la RSS, ¡ªla construcci¨®n del templo de Ayodhia, la derogaci¨®n del art¨ªculo 370 de la Constituci¨®n, o la Enmienda a la Ley de la Ciudadan¨ªa¡ª, se han implementado con m¨¢s gloria que pena. Modi es el pol¨ªtico m¨¢s popular del pa¨ªs, y por ende del mundo. Un valor al alza. Lo que, entre otras cuestiones, pone de relieve, primero, las prioridades de los ciudadanos. La poblaci¨®n antepone la gesti¨®n pol¨ªtica efectiva a los derechos individuales. Segundo, tambi¨¦n revela el estado precario de la oposici¨®n. El hist¨®rico Partido del Congreso se muestra incapaz de ofrecer una alternativa cre¨ªble. Y finalmente, cambios en la percepci¨®n que tiene la sociedad de s¨ª misma. La popularidad de Modi no se explica sin la labor sostenida en el tiempo de la RSS. Es el producto de una calculada estrategia de arriba hacia abajo. Pero tambi¨¦n de una presi¨®n de abajo a arriba. Una osmosis entre un modelo de construcci¨®n nacional y una sociedad de fuertes pulsiones identitarias.
Este viernes comienzan las decimoctavas elecciones generales de la India. Las perspectivas son favorables para el BJP. A la vista del ascendiente global del pa¨ªs, es importante entender los cambios que ocurren en la India de Modi.
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