Crisis en Sumar
La dimisi¨®n de Yolanda D¨ªaz como coordinadora de la coalici¨®n que fund¨® hace un a?o evidencia la debilidad de ese espacio de izquierdas
El liderazgo de Yolanda D¨ªaz en Sumar termin¨® ayer, poco m¨¢s de un a?o despu¨¦s de lanzar la coalici¨®n con la que trat¨® de consolidar el espacio de izquierdas abierto hace una d¨¦cada por Podemos, y tras una serie de resultados electorales decepcionantes. D¨ªaz anunci¨® en una comparecencia en v¨ªdeo y sin periodistas que el fracaso en las elecciones europeas hace necesario abrir ¡°un debate¡± y que, para ello, abandona el cargo de coordinadora de Sumar sin renunciar al de vicepresidenta segunda del Gobierno de coalici¨®n y ministra de Trabajo.
La decisi¨®n es coherente con esos resultados y transmite a la opini¨®n p¨²blica el malestar de sus filas ante lo obtenido en las urnas el domingo, cuando Sumar consigui¨® un 4,56% de los votos (811.000) y tres eurodiputados. La formaci¨®n que agrupa a una docena de partidos a la izquierda del PSOE qued¨® solo 11.000 votos por encima del agitador ultra Alvise P¨¦rez. Pero, sobre todo, apenas logr¨® 240.000 m¨¢s que Podemos (dos eurodiputados), cuyos dirigentes actuales han hecho de la competencia directa con D¨ªaz una de sus principales razones de ser.
Designada por Pablo Iglesias para sustituirle en marzo de 2021, D¨ªaz intent¨® de dejar atr¨¢s el hiperliderazgo de su mentor. Para ello lanz¨® Sumar en abril de 2023 como un paraguas para unir a una izquierda territorial no nacionalista pero reflejo de la Espa?a plurinacional. Tambi¨¦n para superar la marca Podemos. La resistencia de la formaci¨®n morada a verse diluida en Sumar y la incapacidad de D¨ªaz para encontrar una f¨®rmula de reconciliaci¨®n han sido clave para el progresivo declive de ese espacio, que entr¨® en una pugna cainita, se disgreg¨® en el Congreso de los Diputados y termin¨® cosechando una dolorosa derrota al quedar fuera del Parlamento de Galicia, donde D¨ªaz inici¨® su carrera pol¨ªtica.
Tras la leve recuperaci¨®n de las elecciones vascas y catalanas, los errores de estrategia, la elecci¨®n de una candidata sin apenas proyecci¨®n p¨²blica y la concentraci¨®n del voto progresista en torno a los socialistas termin¨® dejando fuera del europarlamento a formaciones de gran calado simb¨®lico y pr¨¢ctico dentro de Sumar como Izquierda Unida y M¨¢s Madrid.
Con todo, no son pocos los ¨¦xitos de D¨ªaz en la cartera de Trabajo en estos a?os dentro del Gobierno de coalici¨®n, entre ellos, garantizar la protecci¨®n de los trabajadores durante la pandemia o revertir la reforma laboral del PP. Lleg¨® a ser la ministra m¨¢s valorada del Ejecutivo. Sin embargo, su ¨¦xito en la gesti¨®n y su capacidad para construir consensos entre los agentes sociales en la primera legislatura contrasta con su fracaso como l¨ªder org¨¢nica.
Su retirada como coordinadora de Sumar llega despu¨¦s de un a?o de liderazgo absoluto pero err¨¢tico y de negar la rocosa fuerza residual de Podemos, una mezcla que se ha revelado electoralmente muy da?ina. Sumar, una coalici¨®n cuyo principal pegamento era la imagen de D¨ªaz, se enfrenta ahora a la incertidumbre. Su salida deja todav¨ªa muchas inc¨®gnitas, unas internas y otras que afectan a la estabilidad del Gobierno de coalici¨®n. La crisis a la izquierda del PSOE es profunda, pero ese espacio pol¨ªtico existe hist¨®ricamente en Espa?a y seguir¨¢ existiendo. S¨¢nchez sabe que son imprescindibles para una mayor¨ªa progresista. Para evitar su ca¨ªda en la paulatina irrelevancia ser¨¢n necesarios mucha m¨¢s generosidad, realismo y conexi¨®n con el tiempo presente de los que sus l¨ªderes han demostrado hasta ahora.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.