Educaci¨®n para los rohingya y una escuela reciclada en Costa de Marfil con una donaci¨®n a la carta
No hay una sola forma de ser solidario: nuevas iniciativas permiten que cada persona pueda decidir a qu¨¦ dedica su dinero, en tres, seis o doce meses y darse de baja cuando quiera. As¨ª funciona ¡®Unidos Por¡¯
Nota a los lectores: EL PA?S ofrece en abierto la secci¨®n Planeta Futuro por su aportaci¨®n informativa diaria y global sobre la Agenda 2030, la erradicaci¨®n de la pobreza y la desigualdad, y el progreso de los pa¨ªses en desarrollo. Si quieres apoyar nuestro periodismo, suscr¨ªbete aqu¨ª.
Shahed tiene 12 a?os y lleg¨® en 2017 a Cox?s Bazar (Banglad¨¦s), el mayor campo de refugiados de mundo. Hu¨ªa de una muerte segura, de un exterminio contra los rohingya en Myanmar. 700.000 personas de este grupo ¨¦tnico han tenido que escapar de all¨ª y m¨¢s de la mitad de los desplazados eran ni?os. Unicef estima que 36 millones de menores de edad, la mayor cifra hasta la fecha, viven desplazados debido a los conflictos, la violencia y los desastres. Ahora, junto a otros adolescentes, estudia energ¨ªa solar y electr¨®nica b¨¢sica, una formaci¨®n que les supone una herramienta ¨²til para su futuro.
La educaci¨®n, al igual que en la crisis de los rohingya, los refugiados y migrantes y el cambio clim¨¢tico son las cuatro causas por las que apuesta Unidos Por, una iniciativa solidaria en la que cada persona puede decidir a qu¨¦ dedica su dinero, en tres, seis o doce meses y darse de baja cuando quiera. Shahed es uno de sus rostros visibles.
¡°De esta manera lo que se pretende es acercarnos a la ciudadan¨ªa y a su punto de vista y adaptarnos a lo que ellos nos demandan, y es que tenemos que ser conscientes de que colaborar un tiempo concreto, con una cantidad menor a una causa en concreto, tambi¨¦n significa ayudar¡±, asegura Neus Gonzalbo, responsable de la campa?a.
La guerra en Yemen y Siria, el ¨¦xodo de millones en Venezuela, la hambruna en el Sahel Central... Son muchas las emergencias humanitarias que se producen al mismo tiempo en el mundo y que est¨¢n enquistadas en el tiempo. Y a los conflictos y crisis que ya viv¨ªa el planeta se le ha sumado una sanitaria sin precedentes como es la pandemia por la covid-19. La organizaci¨®n en defensa de la infancia nunca hab¨ªa solicitado tanta ayuda: 5.300 millones para 2021, una cifra que supera la del a?o pasado, que ya era la mayor de su historia.
Pero hay crisis que parece perpetuarse en el tiempo. En ?frica, 32 millones de ni?os no van a la escuela primaria. Usher Shanca vive en Ponto Novo, una aldea en Guinea-Bissau. Tiene siete a?os y hasta los cinco no pudo caminar. Naci¨® con una discapacidad que a su familia le hizo pensar que nunca podr¨ªa ir al colegio y valerse por s¨ª mismo. Es otro protagonista detr¨¢s de las Escuelas Amigas de la Infancia y de la campa?a Unidos Por.
Adem¨¢s de la educaci¨®n, la salud y el cambio clim¨¢tico est¨¢n en el eje central de la iniciativa solidaria. En Costa de Marfil, el 60% de los casos de malaria, diarrea y neumon¨ªa en los ni?os est¨¢n relacionados con el mal manejo de las basuras. Estas contaminan el entorno, el agua, el aire¡ Solo el 5% de los desechos pl¨¢sticos se recicla, convirtiendo los basureros en un peligro tanto para el presente como el futuro del pa¨ªs.
Para atajarlo, la empresa colombiana Conceptos Pl¨¢sticos y Unicef est¨¢n construyendo en Costa de Marfil escuelas hechas con pl¨¢stico reciclado. El primer proyecto piloto es en Toumodi-Sakassou, una ciudad en el centro del pa¨ªs. Los ladrillos, que se realizan por entero con pl¨¢stico de los vertederos, permiten construir las estructuras r¨¢pidamente. Con ello se consigue que la escuela sea 30% m¨¢s barata que las tradicionales, y que a¨ªsle mejor la temperatura y tenga una vida ¨²til mucho m¨¢s larga. Con estos ladrillos reciclados se construyen tambi¨¦n ba?os y los colegios cuentan con placas solares que las dotan de electricidad.
Pero el proyecto, que est¨¢ apoyado con las donaciones que se recauden a trav¨¦s de Unidos Por, va mucho m¨¢s all¨¢. Muchas familias viven de recuperar desechos en los vertederos y ahora muchas de ellas pueden acceder a un sueldo consiguiendo pl¨¢stico para reciclar. Eso ha llevado a crear una cooperativa de mujeres y una planta de reciclaje, lo que ha generado m¨¢s puestos de trabajo.
La escuela de Toumodi-Sakassou es el comienzo adem¨¢s de un proyecto que se pretende llevar a otros pa¨ªses del continente africano con el fin de cuidar del planeta y formar a una nueva generaci¨®n concienciada en cuidarlo.
1 de cada 2 refugiados es un ni?o. Sabemos que muchas personas quieren aportar su ayuda para que la situaci¨®n de estos ni?os y ni?as cambie. #UNIDOSpor los refugiados y migrantes es la forma m¨¢s f¨¢cil de hacerlo: https://t.co/YN662gHdDo pic.twitter.com/N1OFTkeav6
— UNICEF Espa?a (@unicef_es) October 19, 2020
Puedes seguir a PLANETA FUTURO en Twitter, Facebook e Instagram, y suscribirte aqu¨ª a nuestra ¡®newsletter¡¯.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.