Contagiados invisibles entre las pir¨¢mides
Egipto es el quinto pa¨ªs del mundo que m¨¢s ha manipulado a la baja la cifra de muertes por covid-19, sin sobrepasar oficialmente el centenar en un solo d¨ªa. La falta de transparencia deja un agujero inexplicado de decenas de miles de fallecidos en los ¨²ltimos dos a?os
En una esquina poco ventilada de la laber¨ªntica estaci¨®n de metro de Sadat, en el centro de El Cairo y una de las m¨¢s concurridas de la capital egipcia, permanece instalada desde mediados de noviembre una peque?a cl¨ªnica del Ministerio de Salud dispuesta a vacunar contra la covid-19, cada tarde y sin cita previa, a todos los que se acerquen.
La de Sadat forma parte de una red de unidades similares que las autoridades egipcias han habilitado en puntos especialmente transitados de la ciudad para abarcar al mayor n¨²mero de personas posible en su apuesta por acelerar la campa?a de vacunaci¨®n. La sensaci¨®n de urgencia se vio acrecentada a medida que Egipto atravesaba un nuevo repunte hasta alcanzar picos que no se registraban desde verano de 2020.
La peor jornada de la ¨²ltima ola ocurri¨® el 18 de noviembre. Aquel d¨ªa, sin embargo, se registraron 73 muertes, una cifra relativamente baja en un pa¨ªs de m¨¢s de 100 millones de personas, de las que menos del 15% ten¨ªa la pauta de vacunaci¨®n completa en uno de sus peores momentos desde el inicio de la pandemia. De hecho, Egipto nunca ha sobrepasado oficialmente el centenar de decesos en un solo d¨ªa. Unas cifras que, vista la tragedia global que ha acarreado, parecen poco menos que un milagro.
Pero la realidad se presenta mucho m¨¢s l¨²gubre cuando se mira desde un ¨¢ngulo distinto. A finales del pasado junio, la agencia estatal de estad¨ªsticas egipcia, CAPMAS, public¨® un informe ¨Cel ¨²ltimo disponible¨C en el que recog¨ªa el n¨²mero total de muertes registrado en Egipto en 2019, 2020 y la primera mitad de 2021. Entonces, muchos medios destacaron que las ocurridas en el pa¨ªs durante los primeros seis meses de 2021 en relaci¨®n con el mismo per¨ªodo de 2019 y, por lo tanto, antes de la pandemia, hab¨ªan aumentado un vertiginoso 31,3%. O lo que es lo mismo: 90.000 v¨ªctimas de m¨¢s solamente durante aquel intervalo.
En aquellas mismas fechas, en cambio, el Ministerio de Salud hab¨ªa confirmado poco m¨¢s de 16.000 decesos por el nuevo coronavirus desde febrero de 2020. Dos cifras que, si bien deber¨ªan haber tenido relaci¨®n, se encontraban a una enorme distancia, sugiriendo que algo fallaba.
Una mirada m¨¢s detenida al registro de CAPMAS permite entender la dimensi¨®n del agujero. En marzo y abril de 2020, cuando ya se hab¨ªa declarado la pandemia, el virus no dej¨® rastro en las estad¨ªsticas de fallecimientos, pero empez¨® a causar estragos en mayo y, sobre todo, en junio. Solo aquel mes, el m¨¢s mort¨ªfero hasta la fecha, murieron en Egipto 79.078 personas, unas 33.500 m¨¢s de las que hab¨ªan muerto el a?o anterior. ?nicamente en ese mes, por lo tanto, el exceso de mortalidad fue muy superior a la cifra total de fallecidos por covid-19 que se hab¨ªa registrado incluso hasta este diciembre, en torno a los 22.000.
A medida que se ampl¨ªa el foco, mayor aparece el extrav¨ªo. En total, el exceso de muertes en Egipto desde marzo de 2020 hasta junio de 2021, en relaci¨®n con los mismos meses de 2019, cuando no hab¨ªa pandemia, alcanza las 191.093, seg¨²n los datos de CAPMAS. De estos, un 8,5% se han atribuido oficialmente al SARS-CoV2.
Entre expertos en este campo existe un elevado consenso en torno a la idea de que la cifra global de decesos a causa de la pandemia, que en enero de 2022 ya supera los 5,4 millones en todo el mundo seg¨²n el recuento de la Universidad Johns Hopkins, es una subestimaci¨®n. Pero existen pa¨ªses y pa¨ªses. Y en la clasificaci¨®n de aquellos con mayor cifra de exceso de fallecidos no atribuidos a la pandemia, Egipto se sit¨²a en las primeras posiciones.
Concretamente, la primera en Oriente Medio y el Norte de ?frica a mucha distancia, y la quinta en el mundo, por detr¨¢s solo de Tayikist¨¢n, Nicaragua, Uzbekist¨¢n y Bielorrusia, seg¨²n un estudio de dos investigadores de la Universidad Hebrea de Israel y de la Universidad de T¨¹bingen de Alemania. Esta investigaci¨®n, de la que se hizo eco un informe del Banco Mundial en octubre, nota que la relaci¨®n en Egipto entre el exceso de muertes totales y las atribuidas a la covid-19 se sit¨²a actualmente en torno al 12,8%.
La relaci¨®n en Egipto entre el exceso de muertes totales y las atribuidas a la covid-19 se sit¨²a en torno al 12,8%
Para calcularlo, los investigadores del estudio establecieron para cada pa¨ªs una mortalidad de referencia, basada en los respectivos datos de cada uno entre 2015 y 2019, siempre antes de la pandemia. A partir de esta, se calcula el exceso de fallecidos como la diferencia entre la real por todas las causas en 2020 y 2021, y la de referencia. Este indicador permite calcular de forma altamente objetiva las v¨ªctimas que han causado pandemias u otros tipos de acontecimientos inesperados y extremos.
¡°Normalmente, la diferencia entre el exceso de muertes y las muertes por covid-19 tiene dos explicaciones¡±, observa Ariel Karlinsky, uno de los l¨ªderes de la investigaci¨®n. La primera, explica, es la capacidad de cada pa¨ªs para hacer pruebas de diagn¨®stico y para contabilizar los casos y fallecidos por la nueva enfermedad. La segunda es la mala intenci¨®n. ¡°Cuanto m¨¢s alta es la ratio entre el exceso de muertes [por cualquier causa] y las provocadas por la covid-19, parece m¨¢s y m¨¢s evidente la malicia¡±, desliza Karlinsky.
La mayor¨ªa de medios de comunicaci¨®n, estrictamente controlados, han cerrado en gran medida filas con la versi¨®n y los n¨²meros oficiales del Ministerio de Salud. Pero todas las cifras del Gobierno relacionadas con la pandemia se han tomado con cautela desde poco despu¨¦s de declararse. E incluso las propias autoridades han sido relativamente abiertas y sinceras al respecto, siempre y cuando la observaci¨®n no fuera acompa?ada de cr¨ªticas a su gesti¨®n.
En 2020, sin ir m¨¢s lejos, un miembro del comit¨¦ nacional de coronavirus, Mohammad El Nadi, reconoci¨® en un popular programa de televisi¨®n que la cifra real de infecciones en Egipto podr¨ªa ser hasta diez veces m¨¢s elevada que la oficial, y asegur¨® que las autoridades estaban siendo cautas y que su estimaci¨®n incluso podr¨ªa quedar corta. Actualmente, los datos m¨¢s recientes indican que en el pa¨ªs se han contagiado casi 395.000 personas y han fallecido 22.000.
Un miembro del Sindicato de M¨¦dicos, en condici¨®n de anonimato, se?ala en un despacho de la sede de la organizaci¨®n que las bajas cifras oficiales se deben principalmente a dos motivos, en la l¨ªnea de lo se?alado por Karlinsky. Por un lado, a la poca capacidad que tuvo el pa¨ªs inicialmente para realizar pruebas. Y por el otro, a su estricta pol¨ªtica de contabilizaci¨®n, sobre todo cuando los test han empezado a ser m¨¢s accesibles. En este sentido, los positivos registrados fuera de los laboratorios centrales del Ministerio no se consideran oficialmente ni se incluyen en las estad¨ªsticas p¨²blicas.
La mayor¨ªa de medios de comunicaci¨®n, estrictamente controlados, han cerrado en gran medida filas con la versi¨®n y los n¨²meros oficiales del Ministerio de Salud
Esta forma sui generis de contabilizar ha provocado que, incluso con una gran infravaloraci¨®n del n¨²mero de decesos absoluto atribuible a la pandemia, Egipto presente igualmente una de las tasas de mortalidad por coronavirus m¨¢s altas del mundo: la de Egipto hasta diciembre era del 5,7%, m¨¢s del doble de la tasa global, que se sit¨²a sobre el 2%, lo que deja a este pa¨ªs, seg¨²n las estad¨ªsticas de la Universidad Johns Hopkins, como el s¨¦ptimo con la mayor del mundo, fruto sobre todo de su aberraci¨®n estad¨ªstica. En algunos puntos de la pandemia, como en verano de 2020, el medio egipcio Mada Masr document¨® una mortalidad en este pa¨ªs norafricano del 8%, mientras la mundial se situaba en torno al 1,8%.
La fuente del Sindicato de M¨¦dicos, miembro de su consejo directivo hasta este oto?o, explica que, si bien los doctores pueden observar que una persona ingresada presenta s¨ªntomas propios del coronavirus, en caso de defunci¨®n no pueden hacerlo constar como la causa de muerte si no han podido realizar un test antes. Por ello, en el certificado de defunci¨®n pueden aparecer otras causas de muerte como un paro card¨ªaco o falla org¨¢nica.
Pero al ser preguntado por el motivo del pronunciado aumento de v¨ªctimas, la misma fuente, que ha estado al frente de la lucha contra la pandemia, no deja margen de duda. ¡°Creo que el motivo es muy claro y muy f¨¢cil¡±, nota. ¡°?Qu¨¦ ha ocurrido que empezara el a?o pasado [y que haya continuado] hasta ahora que pueda ser la causa de esta subida?¡±, se pregunta ret¨®ricamente. ¡°Parece que no hay m¨¢s raz¨®n que una¡±.
Planeta Futuro contact¨® directamente al portavoz del Ministerio de Salud egipcio, Khaled Megahed, y solicit¨® a trav¨¦s del Centro de Prensa del pa¨ªs una entrevista con un oficial de este organismo, pero no ha obtenido respuesta hasta el momento de publicarse este art¨ªculo.
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