Las ¡®hermanas¡¯ kurdas de Amini alzan su voz por los derechos de las iran¨ªes

Hace dos meses, el nombre de Mahsa Amini ocup¨® la atenci¨®n mundial y fue el detonante de las protestas masivas contra el Gobierno iran¨ª. Esta joven kurda fue detenida en Teher¨¢n por la polic¨ªa de la moral. La raz¨®n: llevar mal puesto el hiyab en su cabeza. Muri¨® tres d¨ªas despu¨¦s a causa de una hemorragia cerebral ocasionada por los golpes de los agentes, seg¨²n denuncia su familia. En respuesta, miles de mujeres de todo el pa¨ªs, tambi¨¦n de Rojhilat (Kurdist¨¢n iran¨ª), y de diferentes partes del mundo, ocuparon las calles al grito de ¡°Jin, Jiyan, Azad?¡° (Mujer, Vida y Libertad en idioma kurdo), cort¨¢ndose el pelo y quemando los velos como se?al de protesta.

A mil kil¨®metros de Rojhelat, las mujeres de Rojava (Kurdist¨¢n sirio), tambi¨¦n gritan y levantan la voz como kurdas y ciudadanas que han librado una dura batalla contra el Estado Isl¨¢mico (ISIS) y contra el Gobierno sirio, que les negaba su autonom¨ªa por el hecho de ser mujeres. Desde hace 10 a?os, ensayan un confederalismo democr¨¢tico, un sistema aut¨®nomo de gobierno que las tiene como protagonistas y al que ellas llaman ¡°revoluci¨®n de las mujeres¡±.

1. Fatma

¡°Soy parte del Comit¨¦ de Salud en el cant¨®n de la ciudad de Hasaka¡±, dice Fatma como presentaci¨®n.

Pregunta. ?C¨®mo vivieron desde aqu¨ª lo ocurrido en Rojhilat?

Respuesta. Condenamos el asesinato de Jina [Jina era el nombre kurdo de Mahsa Amini] a manos del Estado iran¨ª. Fue asesinada por ser mujer y kurda. El Estado debe dejar de creer que mat¨¢ndonos va a quitarnos nuestra voluntad de lucha. Por el contrario, ahora se est¨¢n levantando ni?os, ancianos, mujeres y hombres en las calles de Ir¨¢n. Por cada una que maten, nos vamos a levantar miles.

Nosotras nos apoyamos porque somos todas una, tenemos nuestros derechos y no vamos a aceptar que ninguna sea asesinada ni torturada. No nos vamos a quedar en silencio. Somos mujeres y nuestra voluntad es muy fuerte, y vamos a luchar hasta con nuestra ¨²ltima gota de sangre; vamos a estar en las calles y en nuestras plazas.

P. ?C¨®mo es la situaci¨®n en Rojava con respecto a los derechos de las mujeres?

R. En Rojava decimos que la revoluci¨®n que empez¨® el 19 de julio del 2012 es la revoluci¨®n de las mujeres, porque a partir de ese d¨ªa comenzamos a tomar nuestros derechos, participando en todos lados: en la econom¨ªa, en la defensa, en cada parte de la vida. Esa mujer que antes estaba en casa con los ojos cerrados y no pod¨ªa salir, se levant¨®. Aquella que solo viv¨ªa adentro de casa y bajo el orden del hombre, ya no lo acept¨® m¨¢s y se levant¨®.

Aqu¨ª pudimos lograr derechos que los grandes Estados del mundo no pudieron brindar a su pueblo. Todas las minor¨ªas, ¨¢rabes, armenios, asirios, todos tienen sus derechos. No solo para los kurdos, lo que se logr¨® es para todas las naciones del mundo, porque fuimos todos los pueblos juntos los que luchamos contra el Estado Isl¨¢mico y por nuestra liberaci¨®n.

Queremos preguntar a los pa¨ªses del mundo por qu¨¦ se quedan en silencio ante nuestras muertes. ?Es porque somos kurdas? ?Por eso el silencio? ?Por qu¨¦ hay tanto silencio cuando matan a una de nuestras mujeres, o a un ni?o, con los drones turcos? ?Por qu¨¦ sigue el silencio?

2. Kocer Husein

Kocer Husein es joven, sonriente e integra una organizaci¨®n, a¨²n sin nombre, que trabaja promoviendo los derechos de las mujeres en la ciudad de Hasaka, al noreste de Siria. Se para frente a la c¨¢mara y dice: ¡°Soy portavoz del comit¨¦ de educaci¨®n en una organizaci¨®n constituida exclusivamente por mujeres¡±.

P. ?Qu¨¦ piensa de lo que est¨¢ ocurriendo en Ir¨¢n tras el asesinato de Mahsa Amini?

R. Todos los gobiernos del mundo tienen mucho miedo de la fuerza de la mujer. Las kurdas sabemos que somos la vanguardia de la revoluci¨®n. Aquellas que se organizan, que se educan, que viven con ideas revolucionarias y que participan en la organizaci¨®n social, desarrollan una voluntad libre, pueden participar en todas las partes y desempe?ar una funci¨®n importante para su pueblo. Por ello, queremos mandar nuestro saludo y apoyo a las iran¨ªes que est¨¢n saliendo a la calle a marcar una postura en contra de la mentalidad chauvinista que todo el tiempo nos quiere esclavizar.

P. Historias como las de Amini, ?son frecuentes en la historia de las kurdas?

R. La historia est¨¢ llena de nombres de mujeres, y muchas veces no las conocemos porque la historia la cuentan los hombres. Pero en Kurdist¨¢n recordamos siempre a Sakine Cansiz. Resisti¨® en la c¨¢rcel, luch¨® por la libertad y la igualdad, as¨ª como por su identidad.

Hemos llegado a un momento en el que nadie puede prohibir nuestra voz y nadie puede extinguirnos. En Ir¨¢n, cuando asesinaron a Mahsa Amini, la excusa fue su pelo, que muestra su cultura, su manera de vivir. Pero, en realidad, utilizan esas prohibiciones como pol¨ªtica contra todas las mujeres que buscan ser libres. En Ir¨¢n lo muestran como un problema de moral o ¨¦tica, y eso es interesante, porque si existieran la moral y la ¨¦tica, no ser¨ªamos asesinadas por el Estado.

Hoy vemos en las monta?as libres de Kurdist¨¢n que la libertad no solo tiene relaci¨®n con el pelo y la ropa, sino que es algo m¨¢s profundo. El sistema tambi¨¦n nos enga?a porque nos dice que si podemos mostrar el pelo y usar cierta ropa, con eso vamos a lograr libertad. Pero eso es una trampa, una distracci¨®n. La libertad es algo m¨¢s grande. Y no seremos libres mientras haya mujeres oprimidas en las cuatro partes de Kurdist¨¢n y en el mundo. Seguiremos luchando hasta lograr la libertad de todas.

3. Nora Juzeni

Amuda es una ciudad al norte de Rojava que limita con la frontera turca. Dentro de una casa peque?a, las vecinas se re¨²nen para aprender diferentes t¨¦cnicas de autodefensa, incluso a utilizar un arma en caso de peligro.

Los pa¨ªses europeos dicen que es por el islam, crean miedo y prejuicio contra todo Oriente Pr¨®ximo, y en realidad es un r¨¦gimen fascista quien est¨¢ detr¨¢s.

Nora Juzeni es la reverber?, nombre que en Rojava se les da a las responsables de los diferentes lugares. Tambi¨¦n es miembro de una asociaci¨®n feminista llamada Kongra Star. ¡°Amini fue un estruendo en todo el mundo, fue una mujer que buscaba tener una vida libre. Por tradiciones malas, falsas, que intentan, en nombre de la religi¨®n, ir en contra de nosotras fue asesinada¡±, asegura.

P. ?C¨®mo se relacionan los conceptos de religi¨®n y revoluci¨®n en Rojava?

R. Los pa¨ªses europeos dicen que es por el islam; crean miedo y prejuicios contra todo Oriente Pr¨®ximo, y en realidad es un r¨¦gimen fascista quien est¨¢ detr¨¢s. El mundo busca detener la fuerza femenina. Algunas que en nuestro territorio nos dieron mucha fuerza fueron R¨ºber Apo y Abdullah ?calan. Aqu¨ª, como mujeres del Kongra Star, hicimos declaraciones, marchamos, nos cortamos el pelo. El islam para nosotras significa selam, paz, pero es utilizado por un r¨¦gimen fascista en nuestra contra. Ellos quieren controlar a su pueblo y especialmente a la mujer.

P. En Rojava, ?c¨®mo es la situaci¨®n en relaci¨®n con la libertad de la mujer?

R. A¨²n tenemos tradiciones antiguas que nos ocasionan problemas. No llegamos al punto de ser totalmente libres. Pero tambi¨¦n tenemos un ej¨¦rcito femenino y uno de los pueblos. Aqu¨ª, nosotras participamos de las decisiones pol¨ªticas todos los d¨ªas. Tenemos educaci¨®n para todos, para entender la importancia de una vida m¨¢s igualitaria.

4. Sucra Juzeni

¡°Es impensable que aqu¨ª una mujer sea asesinada porque se le vea el pelo. Sabemos que en Turqu¨ªa, al igual que el Estado Isl¨¢mico iran¨ª, apuntan contra las mujeres, asesin¨¢ndolas. Pero ahora es distinto, porque por cada una que asesinan hay mil m¨¢s en la calle¡±, dice Sucra Juzeni despu¨¦s de cortarse el pelo en protesta por el asesinato de Mahsa Amini.

¡°El ejemplo de nuestra revoluci¨®n en Rojava promovi¨® que hoy las personas en Ir¨¢n se levanten. Es algo que no se puede aceptar y nosotras, desde aqu¨ª, estaremos al lado de todas las que luchen en Rojhilat. Nunca vamos a aceptar una situaci¨®n as¨ª en ninguna parte del mundo¡±.

P. Antes del 2012, ?c¨®mo era la situaci¨®n de las mujeres en Rojava?

R. Cuando el r¨¦gimen sirio estaba en nuestros territorios, no suced¨ªa que te detuviesen por tener mal puesto el hiyab, pero hab¨ªa otras maneras para taparnos: nos sofocaban dentro de cuatro muros, sin derechos, cuidando a los ni?os, como una m¨¢quina que trabaja en casa. Eso cambi¨® con la revoluci¨®n: empezamos a ocupar lugares, comenzamos a conocernos a nosotras mismas y a protagonizar espacios. Vimos que ten¨ªamos derechos, y eso fue para nosotras muy especial en un contexto de guerra tan dif¨ªcil como el que vivimos. Nos conocimos y supimos que ten¨ªamos fuerza.

Llamamos a todas las mujeres del mundo a que miren a Mahsa Amini de frente, a los ojos, y vean toda la opresi¨®n y la violencia que sufri¨®, y vean tambi¨¦n a todas las mujeres de Rojava que la vivieron antes de la revoluci¨®n. Llamamos a todas a que salgan a todas las plazas del mundo hasta que todas sean libres, porque cuando esto ocurra podremos decir que nuestra revoluci¨®n dio su resultado. Y solo cuando estemos libres se podr¨¢ liberar el pueblo.

5. Rima Mahmud

Rima Mahmud elige quitarse la kufiya que envuelve su pelo y tirarla al suelo para la fotograf¨ªa. ¡°A Amini no solo la mataron porque se le ve¨ªa un poco el pelo por debajo del hiyab. Nosotras sabemos bien c¨®mo es el Gobierno del Estado Isl¨¢mico de Ir¨¢n. Utiliza el islam para implementar una pol¨ªtica contra nosotras, porque quiere romper la voluntad de la mujer libre. En todas partes del mundo se hicieron protestas. Jin Jiyan, Azad? fue nuestra respuesta¡±, declara.

¡°En Ir¨¢n se est¨¢n levantando contra una mentalidad, contra un Gobierno que tapa su pelo y su libertad, el Estado iran¨ª tiene una pol¨ªtica con los mismos principios y mentalidad que el Daesh, que fuerza a ni?as a cubrirse, pero ellas ya se est¨¢n levantando en las escuelas contra los autoritarismos dictatoriales¡±.

P. ?Cu¨¢l es el objetivo final de estas represiones?

R. Quieren romper y reprimir la voluntad de la mujer libre, pero la respuesta en todas partes del mundo ha sido el levantamiento y acciones de solidaridad. Los hombres tambi¨¦n han salido a la calle, eso fue fuerte para todo el mundo: vieron que ya no aceptamos la muerte, la esclavitud. Muy pronto, tambi¨¦n se levantar¨¢n en Turqu¨ªa y en otras partes de Oriente Pr¨®ximo. La historia de la opresi¨®n contra nosotras tiene 5.000 a?os, y siempre resistimos.

6. Hale

¡°Ir¨¢n quiere meternos dentro de una bolsa negra porque la mujer, cuando piensa en la libertad, logra la fuerza m¨¢s grande que tiene, y es contra esa fuerza que los Estados quieren luchar. La mujer es una parte esencial de la revoluci¨®n¡±, dice Hale, mientras busca entre sus cosas un cartel con el rostro de Amini.

¡°Cuando nos levantamos aqu¨ª, nos levantamos por la revoluci¨®n de las mujeres. Es importante condenar cada ataque que existe contra nosotras. Y, especialmente, condenar a los Estados que est¨¢n contra nuestros derechos¡±.

P. ?Qu¨¦ papel tiene la religi¨®n para las mujeres en Oriente Pr¨®ximo?

R. Gran parte de la poblaci¨®n es musulmana. Lo que sucede en pa¨ªses como Ir¨¢n es que mezclan religi¨®n y pol¨ªtica para sus intereses. Nosotras, cuando nos levantamos, lo hicimos tambi¨¦n con esa fuerza que nos da la religi¨®n, la libertad, la resistencia. Eso est¨¢ conectado entre s¨ª en nuestro territorio.

A Mahsa la asesinaron, la maltrataron, pero el pueblo sali¨® a la calle. En Rojava tambi¨¦n sali¨® el pueblo. Todos ellos ahora son Amini. Podemos decir que los pa¨ªses nunca van a romper nuestra fuerza. Y que vamos a trabajar y desarrollarnos m¨¢s. Hoy en d¨ªa, conocemos nuestra fuerza, sacamos los dolores afuera y vamos a resistir hasta la ¨²ltima gota de sangre. Nunca vamos a olvidar a quienes murieron luchando.

7. Ayshe

¡°Si esa mujer era o no era musulmana, no es un motivo que d¨¦ permiso a nadie para asesinarla. Nosotras tambi¨¦n somos musulmanas y cada quien usa el pelo a su manera y no por ello la matan¡±. Dice Ayshe, para luego quitarse las gafas y anunciar: ¡°No voy a hablar mucho¡±.

P. Puede decir lo que quiera.

R. En general, la mujer sigue oprimida, pero en un gran porcentaje estamos liberadas, podemos salir de la manera que queremos y hacer los trabajos a la par que los hombres. Hay que resistir hasta el final para lograr nuestros derechos y tenemos la esperanza en que el resto del mundo nos apoye.

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