Afropoderossa, la ¡®influencer¡¯ del Poblenou que planta cara al racismo

Afropoderossa para sus seguidores, Perla para quienes la conocen, arrasa en sus cuentas de TikTok e Instagram, con casi 400.000 y m¨¢s de 100.000 seguidores, respectivamente. Nacida en Guinea Ecuatorial hace 31 a?os y asentada en el barrio del Poblenou de Barcelona desde los 12, en sus redes comparte informaci¨®n sobre ?frica, sus culturas y trata de desmentir estereotipos y prejuicios. Tambi¨¦n, reivindica el derecho de las mujeres negras a salirse del canon de belleza occidental. Dice tener muchos sue?os, pero llevar su mensaje a los institutos, ya que ¡°la educaci¨®n es la soluci¨®n al racismo¡±, y crear su propia marca de productos espec¨ªficos para cabello afro ¡ªs¨ªmbolo de resistencia, liberaci¨®n y orgullo¡ª, ser¨ªa para ella lo m¨¢ximo.

Fue durante el confinamiento cuando Perla cont¨® en redes sociales la determinaci¨®n que hab¨ªa tomado de dejar su pelo al natural. ¡°Hab¨ªa pasado toda la vida alis¨¢ndomelo, como casi todas las mujeres negras, y se estaba poniendo malo. As¨ª pues, decid¨ª rap¨¢rmelo, para dejarlo crecer tal y como era, pero me encontr¨¦ con que no hab¨ªa productos para mi pelo¡±, relata. ¡°Como no los hab¨ªa, empec¨¦ a hacerlos y a compartir mis recetas. Una cosa llev¨® a la otra, y al final empec¨¦ a informar, a producir contenido divulgativo¡±. Hoy, sus plataformas son un espacio de reivindicaci¨®n de lo africano.

Perla, al igual que muchas de sus amigas negras, pas¨® muchos a?os intentando ocultar sus rasgos naturales. ¡°Algunas se ponen pelucas para disimular el voluminoso pelo afro, otras incluso se aclaran la piel¡±, explica. Esto, reflexiona, es porque ¡°los c¨¢nones de belleza occidentales lo dominan todo¡±, provocando que ¡°todas las mujeres quieran ser iguales¡±. Ella quiere dejar de ocultarse: ¡°Aceptar la piel negra y el pelo afro es aceptar lo que somos. Aunque s¨¦ que me van a juzgar, a excluir, he admitido lo que soy y estoy orgullosa de ello. Al final, mis caracter¨ªsticas f¨ªsicas tienen una historia de lucha, porque representan a una etnia que ha sido y sigue siendo oprimida¡±.

Nos quieren solo por lo singular de nuestro color, nuestro pelo, nuestros labios, nuestro culo

Las mujeres con piel negra, contin¨²a, se sienten rechazadas por los hombres negros a los que se educa con el mensaje que una mujer blanca tiene m¨¢s valor y puede ser un signo de ascenso social. ¡°Si te das cuenta, todos los futbolistas negros de ¨¦xito se casan con mujeres blancas¡±, recalca. Asimismo, la mujer afro en Europa est¨¢ ¡°sexualizada¡± y ¡°exotizada¡± por los hombres blancos. ¡°Nos quieren solo por lo singular de nuestro color, nuestro pelo, nuestros labios, nuestro culo. Me dicen, seguro que bailas muy bien. Y les importa poco la persona que soy¡±, se queja. ¡°Mis labios sirven para m¨¢s cosas de las que se est¨¢n imaginando: sirven para hablar y decir cosas a veces interesantes¡±, reivindica.

Un d¨ªa, esperando el bus, un se?or me pregunt¨® cu¨¢nto cobraba. Daba por hecho que era una prostituta

En Espa?a, asegura Perla, el color de piel y el tipo de pelo provoca discriminaciones a¨²n a d¨ªa de hoy, a la hora, por ejemplo, de conseguir un trabajo o alquilar un piso. ¡°Siempre se nos exige m¨¢s¡±, reflexiona. Tambi¨¦n, dice, a la hora de simplemente existir. ¡°Al llegar a Barcelona, yo sab¨ªa que era negra, pero no sab¨ªa que mi color era un inconveniente¡±, reconoce, y recuerda el poema Me gritaron negra, de Victoria Santa Cruz, que relata, ¡°a la perfecci¨®n¡±, lo que sinti¨® ella. ¡°En el instituto, se met¨ªan conmigo, me pegaban, y los chicos no quer¨ªan saber nada de m¨ª, solo tirarme de los pelos. En la calle, sin embargo, los hombres mayores me acosaban. Un d¨ªa, esperando el bus, un se?or me pregunt¨® cu¨¢nto cobraba. Daba por hecho que era una prostituta¡±, explica. Aparte de esta, la escena m¨¢s racista que ha sufrido, dice Perla, fue con 16 a?os. ¡°Baj¨¦ en ascensor al metro y, al salir, dos Mossos d¡¯Esquadra me detuvieron, me cachearon y miraron dentro mi mochila. Resulta que a una mujer le hab¨ªan robado el m¨®vil en el ascensor, y yo era la ¨²nica negra¡±, describe.

El activismo de Perla no termina en Espa?a. En Guinea Ecuatorial, es una de las fundadoras de la entidad Somos parte del mundo, que ayuda a la comunidad LGTBI en el pa¨ªs africano, donde, aunque la homosexualidad es legal, no existen medidas de protecci¨®n contra la discriminaci¨®n por orientaci¨®n sexual o identidad de g¨¦nero. ¡°Si una persona homosexual comete un delito, el castigo va a ser doble. Primero, por la infracci¨®n, y luego por ser lesbiana o gay. Adem¨¢s, muches ni?es acaban en las calles, repudiados por sus familias¡±, explica. En la fundaci¨®n, intentan darles cobijo y que recuperen los estudios, adem¨¢s de ¡°hacer ruido¡±. Ella misma pas¨® una noche en el calabozo por defender a dos ni?as supuestamente lesbianas a las que la polic¨ªa hab¨ªa detenido por esc¨¢ndalo p¨²blico.

?Qu¨¦ podemos hacer?

Para seguir avanzando hacia una sociedad sin racismo, dice Perla, ¡°lo primero es la educaci¨®n¡±. ¡°Hay que explicar mejor la historia¡±, argumenta, e invita a escuchar la primera TED Talk de Chimamanda Ngozi Adichie, en la que hace una llamada a rechazar los relatos ¨²nicos y alerta sobre los peligros de reducir una persona, un pa¨ªs o una cultura a un relato un¨ªvoco. ¡°Lo pasaba fatal cuando en el colegio pasaban documentales de lo mal que se vive en ?frica, de ni?os desnutridos con mocos y moscas. En ?frica, claro que hay pobreza, pero ?frica no es solo eso¡±, lamenta.

En ?frica, claro que hay pobreza, pero ?frica no es solo eso

¡°Lo segundo es rodearse de gente de otras culturas. Escucharlas, hablar con ellas, conocerlas. Y cuestionarse a uno mismo y a todo lo que se da por seguro, con la intenci¨®n de desaprender para volver a aprender¡±, prosigue. ¡°La diversidad es lo que hace este mundo maravilloso¡±, declara. Adem¨¢s, considera de vital importancia ¡°dejar atr¨¢s las palabras y expresiones racistas¡±, como ¡°trabajar como un negro¡±, ¡°merienda de negros¡±, ¡°dinero en negro¡±, o ¡°color carne¡±. Para cambiar el fondo quiz¨¢s se pueda empezar cambiando las formas.

Asimismo, recomienda que se organicen eventos como el Afrobrunch, celebrado por primera vez este domingo en Barcelona. ¡°Son entornos donde se puede compartir. M¨²sica, gastronom¨ªa, moda, peinados¡­ Bailas, cantas, comes, y conoces a personas de otras culturas¡±, asegura, y aprovecha para pedir ¡°espacios, apoyos, patrocinios, para poder llevarlo a cabo regularmente¡±.

¡°Todav¨ªa queda mucho por hacer¡±, resume, y ejemplifica el racismo que ya ha sufrido su hijo, de solo cinco a?os y medio. ¡°Una vez, en el parque, cuando ten¨ªa un a?ito, estaba jugando con un ni?o blanco de su edad. El hermano mayor, de cinco o seis, lo vino a buscar y le dijo que no pod¨ªa jugar con negros. Yo no entend¨ªa nada. Hace unos d¨ªas, lleg¨® a casa diciendo que sus compa?eros le hab¨ªan dicho que ten¨ªa la nariz grande y chata¡±, narra. ¡°Yo no quiero que mi ni?o viva lo mismo que yo. Eso es lo que me mueve. Eso y que siempre he tenido esp¨ªritu de Pantera Negra¡±.

Los libros, pel¨ªculas y series que necesitas leer y ver para ser antirracista, seg¨²n Afropoderossa

• La libertad es una batalla constante, de Angela Davis.
• Por qu¨¦ no hablo con blancos sobre racismo, de Reni Eddo-Lodge.
• The Fire Next Time, de James Baldwin.
• Beloved, de Toni Morrison.
• Your Silence Will Not Protect You, de Audre Lorde.
• As¨ª nos ven, creada, escrita y dirigida por Ava DuVernay.
• Harriet, en busca de la libertad, dirigida por Kasi Lemmons.
• La Venus negra, dirigida por Claude Mulot.

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