El presidente del Constitucional rechaza la renuncia de tres magistrados

El presidente del Tribunal Constitucional, Pascual Sala, ha rechazado las renuncias de los magistrados Eugeni Gay, Elisa P¨¦rez Vera y Javier Delgado, que hab¨ªan dejado sus puestos en el alto tribunal para forzar su renovaci¨®n, pendiente desde noviembre. Se trata de la primera vez en la historia del Constitucional que se produce el abandono de alguno de sus miembros.

El vicepresidente dice en su carta de renuncia a Sala que la no renovaci¨®n le ha hecho tener "la sensaci¨®n de formar parte de un tribunal secuestrado". Los dos primeros jueces son del bloque progresista y el otro era el l¨ªder de los conservadores. Los tres forman parte del turno del Congreso, que lleva sin renovar desde el pasado noviembre, por la falta de acuerdo entre los partidos pol¨ªticos. En total, son cuatro las plazas que habr¨ªa que haber sustituido: adem¨¢s de estos tres magistrados, la cuarta corresponder¨ªa a Roberto Garc¨ªa Calvo, que falleci¨® en 2008.

Delgado, que ha tenido graves problemas de salud, hab¨ªa dicho reiteradamente que quer¨ªa marcharse. Pero ahora se trata de una renuncia en bloque para forzar la renovaci¨®n del Constitucional por parte del Congreso de los Diputados. As¨ª lo anunciaron los tres magistrados en el pleno del pasado 7 de junio, donde adujeron que el motivo era haber expirado con creces su mandato.

Seg¨²n el decreto de Pascual Sala, el presidente del Constitucional es el ¨²nico con la potestad para aceptar la renuncia de los magistrados que lo integran y de decretar "el cese o la vacante en el cargo". De hecho, los magistrados no pueden abandonar su cargo si el presidente no acepta su renuncia, ya que incurrir¨ªan en la comisi¨®n de un delito. Sala argumenta que el "funcionamiento del Tribunal en Pleno exige la presencia de dos tercios de sus magistrados" y que dado el volumen de procesos constitucionales pendientes y de la "insustituible funci¨®n institucional" de los miembros del alto tribunal no acepta las renuncias de Gay, P¨¦rez Vera y Delgado "a fin de garantizar la continuidad y estabilidad de este ¨®rgano".

Sala se compromete a instar al Congreso de los Diputados a cumplir "los plazos de renovaci¨®n constitucional y legalmente establecidos". Sin embargo, es muy poco probable que los partidos lleguen a un acuerdo para renovar las cuatro plazas que se deber¨ªan haber sustituido a nueve meses del fin de la legislatura, sobre todo porque el PP se ver¨ªa favorecido, si gana las elecciones generales, en la elecci¨®n de los jueces que corresponde a la C¨¢mara baja.

El reparto ideol¨®gico

El reparto ideol¨®gico no habr¨ªa variado con la renuncia de los magistrados, pues pasar¨ªa de ser siete progresistas frente a cuatro conservadores a quedarse en cinco contra tres magistrados. En estos cinco est¨¢ incluido Manuel Arag¨®n, un progresista que en ocasiones, como en la sentencia de Bildu, se ha alineado con las tesis del sector conservador.

Sala ya forz¨® al final de su mandato en el Consejo General del Poder Judicial, el 28 de enero de 1996, la finalizaci¨®n del ¨®rgano al aceptar la renuncia que le presentaron seis vocales, que tambi¨¦n ten¨ªan el mandato caducado desde hac¨ªa meses, en un mismo acto.

La secretaria general del PP, Dolores de Cospedal, ha relacionado estas renuncias con la "deriva del Gobierno" de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero. Por su parte, el secretario de Organizaci¨®n del PSOE, Marcelino Iglesias, ha pedido "responsabilidad" al PP para alcanzar un acuerdo para la renovaci¨®n del Tribunal Constitucional. Y ha reclamado que "de una vez por todas" sea capaz de entender que "tiene que cooperar y colaborar" para que se produzca la renovaci¨®n, informa Efe.

El diputado de Izquierda Unida en el Congreso Gaspar Llamazares ha urgido una vez m¨¢s a PSOE y PP a desbloquear la negociaci¨®n para la renovaci¨®n del Tribunal Constitucional porque, seg¨²n ha subrayado, tras la dimisi¨®n de su vicepresidente y de otros dos magistrados, el alto tribunal est¨¢ a¨²n m¨¢s "tocado" de lo que ya estaba. "PSOE y PP tienen que hacer algo, porque esto no puede seguir as¨ª", ha reclamado Llamazares.

El Constitucional vivi¨® su ¨²ltima pol¨¦mica a cuenta de la decisi¨®n de que Bildu pudiera presentarse a las elecciones municipales del pasado 22 de mayo.?El vicepresidente, Eugeni Gay, y la magistrada Elisa P¨¦rez votaron a favor de dejar a Bildu concurrir a las elecciones, junto al presidente del Constitucional, Pascual Sala, y los magistrados Pablo P¨¦rez Tremps, Luis Ortega y Adela As¨²a, todos ellos del sector progresista. Javier Delgado present¨® su voto particular discrepante junto a los de los tambi¨¦n conservadores Ram¨®n Rodr¨ªguez Arribas, Francisco Hernando Santiago y Francisco P¨¦rez de los Cobos, a los que se uni¨® el progresista Manuel Arag¨®n.

Los magistrados del Tribunal, elegidos por mandato constitucional entre juristas de reconocida competencia, son independientes e inamovibles. La duraci¨®n de su cargo es de nueve a?os -sin posibilidad de reelecci¨®n inmediata, salvo si se ha servido en el cargo por un plazo no superior a tres a?os-, sin que la ley haya previsto l¨ªmite de edad para su desempe?o. Con el fin de asegurar la continuidad en las actuaciones del tribunal, este se renueva por terceras partes cada tres a?os (art. 159.3 CE).

Las dos salas del tribunal est¨¢n formadas por seis magistrados. La primera es presidida por el presidente del tribunal, en tanto que el vicepresidente preside la sala segunda. Cada una de las salas se divide, adem¨¢s, en dos secciones formadas por tres magistrados. Las secciones desempe?an su cometido b¨¢sicamente en las primeras fases de los procedimientos sustanciados ante el tribunal, decidiendo sobre la admisibilidad de los recursos. Los acuerdos del pleno, las salas y las secciones exigen la presencia de los dos tercios de los magistrados que los forman.