El Nobel de Econom¨ªa Stiglitz participa por sorpresa en el Foro del 15-M

El premio Nobel de Econom¨ªa Joseph Stiglitz particip¨® este lunes en el I Foro Social del 15-M celebrado en el Parque del Retiro. Unos alumnos de un curso de Pol¨ªtica Econ¨®mica?que se celebr¨® en San Lorenzo de El Escorial y simpatizantes del movimiento invitaron a Stiglitz para que intervenga en el encuentro. El premio Nobel pronunci¨® un discurso de 12 minutos, compartidos con su?traductor, durante la comisi¨®n de Econom¨ªa del 15-M y despu¨¦s se march¨®. No sin antes defender una regulaci¨®n de los mercados y reconocer que le gusta la "energ¨ªa" que ve en el Movimiento 15-M: "La crisis econ¨®mica ha mostrado los problemas actuales del capitalismo con unos mercados sin regular. La experiencia de las tres ¨²ltimas d¨¦cadas demuestra que hay una necesidad de que los gobiernos jueguen un importante papel en regular los mercados".

El perfil de Twitter @Acampadasol ha confirmado con un mensaje la presencia del Nobel de Econom¨ªa de 2010: "Joseph Stiglitz, Nobel de Econom¨ªa, est¨¢ en Madrid y va a venir al #foro15M. En un rato junto al Palacio de Cristal¡±. El economista estadounidense se ha despidi¨® reclamando un cambio en el discurso econ¨®mico y reconociendo la lucha que est¨¢n llevando a cabo los indignados: "Como alguien ajeno al movimiento veo aqu¨ª una energ¨ªa reconfortante, espero que la us¨¦is de forma constructiva. No se pueden remplazar las malas ideas por la ausencia de ideas sino que hay que cambiarlas por buenas ideas. Lograr que se integren en el debate p¨²blico requiere organizaci¨®n y liderazgo. Va a ser una lucha dif¨ªcil porque esas malas ideas est¨¢n asentadas en el discurso econ¨®mico dominante pero ahora tenemos una gran oportunidad para unir la ciencia econ¨®mica con el compromiso y la justicia social y lograr as¨ª una nueva econom¨ªa. Os deseo la mejor suerte".

El Movimiento 15-M celebr¨® durante todo el lunes una especie de Congreso en Madrid despu¨¦s de un fin de semana en el que el esp¨ªritu del 15-M ha vuelto con fuerza a la capital, con la llegada de la marcha indignada el viernes tras 34 d¨ªas de camino desde distintos puntos de Espa?a, la bienvenida en Sol en una multitudinaria asamblea s¨¢bado y la manifestaci¨®n del domingo que reuni¨® a m¨¢s de 35.000 personas..

Lo han llamado I Foro Social 15-M y se celebr¨®, con pancartas con lemas como Ilusionado de estar aqu¨ª, junto al Palacio de Cristal del parque del Retiro desde las diez de la ma?ana a las nueve y media de la noche, con un descanso para comer entre las dos y media y las cinco de la tarde. A primera hora, los indignados, decenas de los cuales pasaron la noche en el paseo de Recoletos y en Sol, se desperezaban en sus tiendas y se preparaban para un d¨ªa de intenso debate, en el que se trataron asuntos relacionados con pol¨ªtica internacional, medio ambiente, educaci¨®n, feminismo, democracia participativa, econom¨ªa, cultura, sanidad, temas sociales....

En esta ¨¢gora al aire libre participaron entre 200 y 300 personas, la mayor¨ªa llegadas de marchas indignadas de Burgos, Mallorca, Galicia... Charlaron organizados en amplios corros, aunque quer¨ªan hacer grupos de trabajo m¨¢s peque?os. Recogieron dudas y propuestas y trataron de dar muchos turnos de palabra para que todo el mundo participase. Adem¨¢s de aportar soluciones en los diferentes ¨¢mbitos, tambi¨¦n contaron qu¨¦ problemas tienen en sus asambleas locales y se buscaron mecanismos para mejorar la conexi¨®n entre las diferentes asambleas del movimiento y para centralizarlo. "En Burgos no hay comisi¨®n de medio ambiente porque somos pocos", coment¨® un miembro del movimiento.

Los corrillos m¨¢s populares, que congregaron a m¨¢s personas, fueron medio ambiente global y democracia participativa o a largo plazo y reforma del estado. "Como dice Marx", comenz¨® a decir un participante, que fue interrumpido por una chica, que le ha espet¨®: "Si vengo de Galicia es para escuchar vuestras teor¨ªas, no las de Kant ni las de Marx". A su lado, un hombre dijo que las asambleas son "el gran m¨¦rito del 15-M", ya que son el el ¨®rgano que les "permite pensar y decidir juntos, sintetizar ideas en principio opuestas".

En este grupo se dio un peque?o debate sobre si "reprimir a los que reprimen", es decir, responder?con violencia a la polic¨ªa. "El futuro del movimiento pasa por recuperar los valores que ha perdido la clase pol¨ªtica y por la no violencia", dijo un joven, que abog¨® por incluir la no violencia y la resistencia pac¨ªfica en la futura constituci¨®n del 15-M.

Mientras tanto, en Sol, una treintena de personas trabaja en los nuevos asentamientos con los que el s¨¢bado se empez¨® a recontruir el campamento. Ya no hay en la plaza un solo puesto o barrac¨®n informativo sino varios. Son seis o siete puestecillos sat¨¦lites alrededor de la estructura principal, no tienen toldos y no ocupan toda la plaza, sino el espacio entre las dos fuentes. Los que all¨ª est¨¢n ofrecen informaci¨®n sobre el movimiento y sobre las actividades del d¨ªa. El 15-M Madrid ha decidido que la miniacampada improvisada este fin de semana se levantar¨¢ hoy. Han despejado la duda sobre si volver¨¢n a tomar la plaza de forma continuada. No lo har¨¢n. Al que quiera quedarse, le ofrecen dos opciones: unirse a la acampada itinerante o instalarse en alguna de las casas ocupadas del Movimiento.

Unas 35.700 personas, m¨¢s de 500 de las cuales llegaron el s¨¢bado a la capital a pie en seis columnas y m¨¢s de 30 autobuses, regresaron el domingo al kil¨®metro cero de Madrid para exigir reformas pol¨ªticas, econ¨®micas y sociales. Los manifestantes partieron de la glorieta de Atocha pasadas las siete de la tarde, coreando las consignas que ya se han convertido en cl¨¢sicas, "el pueblo unido jam¨¢s ser¨¢ vencido" y ¡°?que no, que no, que no nos representan!¡±. Pasadas las ocho y media, los primeros llegaron a Sol, donde los recib¨ªa una pancarta que rezaba Bienvenida, dignidad.

Sin embargo, la multitudinaria manifestaci¨®n no termin¨® en una asamblea en la plaza, como estaba previsto. Primero decenas y luego cientos de personas trasladaron la protesta hasta las Cortes. Un per¨ªmetro de seguridad rodeaba al edificio e imped¨ªa el acceso a la Carrera de San Jer¨®nimo. Toda la zona estaba vallada y flanqueada por decenas de polic¨ªas, pero los indignados tomaron asiento y retaron a la polic¨ªa a ver qui¨¦n aguantaba m¨¢s.